ELECCIONES EN MICHOACÁN. 3. EL PARTIDO ACCIÓN NACIONAL.

También en Acción Nacional hubo contienda para elegir al candidato: Benigno Quesada y Salvador López Orduña, el seleccionado. A continuación, los 19 comentarios sobre el tema, 9.31% de los 204 sistematizados.

Y aunque usted no lo crea, Germán Martínez Cázares podría cambiar sus expectativas, de la dirigencia nacional a la candidatura por la gubernatura de Michoacán. Al menos eso es lo que sostienen los que saben de eso. Germán había dicho que buscaría el liderazgo albiazul en mancuerna con Carlos Abascal. Pero las cosas se le pusieron diferentes y César Nava parece que podrá rebasar por la derecha a los otros competidores. A menos que quieran ganarse la enemistad eterna del otro michoacano. ¿Declinarán Benigno Quesada y Manuel Orduña?
Jesús Sánchez, “Recuento Político”, El Financiero, 7 de junio.

Que también en Michoacán, ahora que Santiago Creel ha comenzado a recuperar terreno en el panismo, no ha perdido el tiempo y logró ya colocar a Benigno Quesada, quien fuera su coordinador de campaña cuando contendió por la candidatura presidencial del PAN, como precandidato a la gubernatura de la entidad.
“Trascendió”, Milenio, 7 de junio.

En Michoacán uno de los dos precandidatos al gobierno, Benigno Quezada Naranjo, rechazó que en el panismo se pudiera dar una candidatura de “unidad” con Salvador López Orduña; declara que el panismo michoacano está en sus mejores momentos, cuando por la influencia del presidente Calderón Hinojosa podrían arrebatarle la gubernatura al PRD. El PRI no cuenta en esta pelea, según nos aseguran buenas fuentes.
Ubaldo Díaz, “Escenario Político”, Crónica, 19 de junio.

Una vez que el PRD libró la interna para elegir a su candidato al gobierno de Michoacán, ahora le tocará al PAN enfrentarse a dos retos: capitalizar una posible escisión en las filas perredistas y nombrar a su aspirante entre Salvador López Orduña, hombre cercano al presidente Calderón, y el empresario aguacatero Benigno Quesada Naranjo, quien tiene mucho más arrastre popular. Se aceptan apuestas
“Frentes Políticos”, Excélsior, 26 de junio.

Que desde Los Pinos se intentó que Benigno Quezada olvidará sus intenciones de ser candidato del PAN a la gubernatura de Michoacán y declinara en favor del presidente municipal (con licencia) de Morelia, Salvador López Orduña.
El miércoles hubo una reunión en la casa presidencial en la que todo parecía ir sobre ruedas.
Pero al final, Benigno, ex dirigente del partido en Michoacán, decidió que siempre sí peleará para ser el abanderado blanquiazul.
Benigno, por lo demás, coordinó la campaña de Santiago Creel en aquellas tierras y López Orduña hizo lo propio con la de Felipe Calderón.
Así las cosas, el PAN tendrá su elección interna el domingo 29 de julio. ¡Va a estar buena!
“Trascendió”, Milenio, 6 de julio.

Un nuevo pleito parece acercarse entre la dirigencia del PAN, encabezada por Manuel Espino, y la administración Calderón. Ahora, por las elecciones en Michoacán del 11 de noviembre. Los espinistas aseguran que desde Los Pinos operan la elección de candidato de Acción Nacional. Y juran que se tiene registro de una visita de Benigno Quezada Naranjo a la residencia oficial para pedirle retirar su precandidatura a la gubernatura por el blanquiazul. Este panista tiene enfrente a Salvador López, ex alcalde de Morelia, quien según nos dicen, goza de la simpatía calderonista
“Bajo reserva”, El Universal, 6 de julio.

PARA NO VARIAR, los panistas del CEN andan que trinan contra los panistas de Los Pinos.
DICEN en el equipo de Manuel Espino que Benigno Quezada, quien despuntaba entre los precandidatos blanquiazules a la gubernatura de Michoacán, decidió no presentarse a la elección interna porque así se lo pidieron en el Molino del Rey.
Y EN EL CUARTEL panista ven ese movimiento como una intentona del grupo calderonista de despejarle el camino a Salvador López para que sea el candidato albiazul.
NI QUÉ DECIR que los felipistas están más que interesados en esa elección, pues un triunfo sería una doble victoria política para Felipe Calderón: ganar su estado natal y derrotar al PRD en uno de sus bastiones.
Fray Bartolomé, “Templo Mayor”, Reforma, 8 de julio.

Todos saben que debido a que el presidente Calderón es originario de Michoacán —en donde su padre Luis Calderón Vega fue uno de los fundadores de Acción Nacional, y de donde Felipe Calderón ha sido diputado federal y candidato al gobierno del estado— la influencia de esa circunstancia en el panismo local —y en una buena parte de los ciudadanos en general— será notoria en el proceso electoral que se llevará a cabo el 11 de noviembre próximo, para renovar al gobierno estatal.
Michoacán, también todos lo saben, es un bastión fundacional del PRD, centro de operaciones del otrora influyente “líder moral” del partido amarillo, y herencia de la dinastía de los Cárdenas, a quienes el grupo político del nuevo jefe de ese partido les arrebató la posibilidad de mantener el control político del gobierno estatal. En Michoacán la guerra electoral que concluirá el 11 de noviembre —domingo en el que se elegirá nuevo gobernador— en realidad será una suerte de reedición de la batalla electoral que en julio de 2006 enfrentó a Calderón y López Obrador.
Pero también en el PAN están empeñados en que Michoacán deje de ser perredista, y sobre todo les interesa derrotar al ex jefe de gobierno del Distrito Federal, a AMLO, ya que calculan que desde ese y otros centros reales de poder saldrá el dinero para seguir financiando la candidatura presidencial del señor López Obrador, una candidatura que inició el mismo 3 de julio y que terminará en julio de 2012, sea bajo las siglas del PRD, sea por las de otro nuevo partido.
Y es que las ambiciones electorales de AMLO caminan por una vía doble; la del PRD, por un lado, y la de su propio partido, por el otro. En los dos casos, el ex candidato sabe que toda ambición política requiere dinero, mucho dinero, que deberá salir de las arcas públicas. Por eso el interés en Michoacán y en otras entidades, como el DF, en donde se llevó al poder a incondicionales
Ricardo Alemán, “Itinerario Político”, El Universal, 10 de julio.

Dicen los que saben y lo que no lo inventan, que Benigno Quezada fue llamado a Los Pinos y sólo salió para declinar su interés por competir por la candidatura a Michoacán. Que no le preguntaron, que le ordenaron. El caso es que no contesta ni el teléfono.
Jesús Sánchez, “Recuento Político”, El Financiero, 12 de julio.

Los panistas mueven sus baterías hacia Michoacán. El grupo parlamentario en la Cámara de Diputados hace preparativos para una reunión plenaria, con la idea de definir la agenda del periodo ordinario de sesiones que arranca en septiembre. El líder de la bancada, Héctor Larios, se quiere llevar a sus compañeros de curul a tierras michoacanas para respaldar al virtual candidato panista Salvador López Orduña, que goza de las simpatías de Los Pinos. La dirigencia panista, encabezada por Manuel Espino, está empeñada en obtener esa posición, que actualmente está en manos del PRD. Las encuestas internas le han dado alguna esperanza a don Salvador. La elección todavía está lejana, será para el 11 de noviembre
“Bajo reserva”, El Universal, 25 de julio.

En febrero se había efectuado en la casa presidencial una reunión de la plana mayor del panismo michoacano, que ahora tiene fuerte presencia en el gobierno federal. Además de López Orduña, en cuyo favor se habrían congregado los circunstantes, y del anfitrión, el propio presidente de la República, acudieron a la cita el mencionado secretario particular, César Nava, y dos miembros del gabinete, nacidos en Michoacán, Germán Martínez, de la Función Pública, y Juan Rafael Elvira Quezada, del Medio Ambiente. Si bien este último nació en la Ciudad de México, se radicó en Michoacán al cabo de sus estudios de posgrado en Inglaterra, y fue alcalde de Uruapan de 1999 a 2001, cuando interrumpió su mandato para incorporarse a la administración federal.
Miguel Ángel Granados Chapa, “Plaza Pública”, Reforma, 26 de julio.

Michoacán es una pieza crucial en la estrategia de Calderón. No fue gratuito que allí comenzaran las operaciones contra la delincuencia organizada en que el Ejército ha tenido preponderancia. En esa entidad conquistó el PAN su primer gobierno municipal, y de allí han provenido algunos de sus dirigentes nacionales, como el propio Calderón que encabezó el panismo entre 1996 y 1999, previamente había sido candidato a gobernador, y aunque ocupó el tercer lugar en la contienda, disputada centralmente por Víctor Manuel Tinoco Rubí y Cristóbal Arias, aumentó de modo considerable la votación blanquiazul, deprimida en los años inmediatamente anteriores a causa de la polarización entre el PRI y el PRD, que allí nació de una partición masiva del partido oficial.
Miguel Ángel Granados Chapa, “Plaza Pública”, Reforma, 26 de julio.

Aunque como hijo predilecto del estado la votación a favor del candidato presidencial panista fue muy abundante, no alcanzó para imponerse a la que favoreció a Andrés Manuel López Obrador. Éste superó a Calderón por 100 mil votos y más de 5 puntos porcentuales: 615 mil 476 (41.17 por ciento) contra 515 mil 524 (34.48 por ciento). Ese resultado fue obtenido por el candidato de la coalición Por el Bien de Todos no obstante la renuencia del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas a apoyar su postulación, y el peso considerable que su figura y sus actitudes tienen en esa entidad.
No extraña, por eso, que Calderón haya procurado gestar o mostrar una relación de gran cercanía con Cárdenas Batel, que no ha sido huidizo a tal actitud. Un triunfo panista en la entidad natal del Presidente, donde gobierna el partido que rehúsa reconocerlo, mitigaría notablemente la debilidad presidencial en ese terreno. Por eso, simétricamente, Godoy Rangel anuncia que apoyarán su candidatura, quién sabe si al punto de comparecer juntos en campaña, el ingeniero Cárdenas y López Obrador.
Miguel Ángel Granados Chapa, “Plaza Pública”, Reforma, 26 de julio.

Piensa el PAN que lo mejor es blindar la elección en Michoacán, pues en esa entidad es mucho lo que está en juego. Lo curioso es que ese partido ha encontrado en el viejo PRI un modelo a seguir. La dirigencia de Manuel Espino estudia el nombramiento de un delegado del CEN panista a manera de “gran observador” del proceso electoral y, en particular, de la campaña de su abanderado en esa entidad, Salvador López Orduña. Los delegados del CEN del PRI eran considerados como procónsules de la nomenklatura priísta. No vaya a ser que ese sea el objetivo de Espino
“Bajo reserva”, El Universal, 18 de agosto.

En esas condiciones, y dado el imaginario arraigo del presidente Felipe Calderón, por el simple accidente de haber nacido en Morelia cuando ya el ingeniero Cárdenas se acercaba a la treintena, el Partido Acción Nacional, cuya presencia ha ido en relativo aumento en esa entidad, se prepara para derrotar a Leonel Godoy y de paso y quizá sin proponérselo, terminar con la influencia histórica de los Cárdenas (independiente del culto casi religioso a la figura del general) no sólo en Michoacán sino en el país.
Manuel Espino, quien ha recibido una dosis de oxígeno más o menos notable gracias a la derrota de Jorge Hank en Baja California, ha expresado dos líneas de operación: una de enfrentamiento con Marcelo Ebrard a quien desde ahora acusa de probable distractor de fondos del GDF al aliento del triunfo electoral de Godoy, y otra —absolutamente insensata— negándole el ingreso a Elba Esther Gordillo para el auxilio.
Rafael Cardona, “El cristalazo”, Crónica, 20 de agosto.

En el terreno de política, y de política electoral, están en puerta las elecciones para renovar el gobierno de Michoacán —a celebrarse el 11 de noviembre próximo, y donde el PAN y sus estrategas se han propuesto arrebatarle el gobierno local al PRD— y dos eventos partidistas que se llevarán a cabo casi de manera simultánea y que serán determinantes para el nuevo gobierno; es decir, la renovación de las dirigencias nacionales del PAN y del PRD, respectivamente. Esas tres tareas requieren un intenso activismo político entre esa cuestionable dualidad de gobierno y partido, y que al parecer camina de la mano.
En Michoacán desde hace semanas están prendidos los focos rojos y no tardan en activarse las “alarmas chillonas”, ya que en la más reciente encuesta entre los aspirantes al gobierno estatal, prácticamente se ha detectado un empate técnico entre PAN y PRD. El aspirante azul, Salvador López Orduña, registra 35.9% de las preferencias, mientras que el candidato amarillo, Leonel Godoy, cuenta con 37.4%. No es un secreto para nadie que el PAN y estructuras del gobierno federal y hasta de gobiernos locales —Guanajuato y Jalisco— se volcarán para cumplir el objetivo político en esa entidad: arrebatarle al PRD el gobierno emblema del cardenismo
Ricardo Alemán, “Itinerario Político”, El Universal, 27 de agosto.

El PRD y el PAN tienen sus ojos puestos en el estado de Michoacán. Para los perredistas representa la joya de la corona, la tierra del fundador de su partido, Cuauhtémoc Cárdenas. Para los panistas representa la tierra del presidente de la República. De acuerdo con las más recientes encuestas, los candidatos del PRD, Leonel Godoy, y del PAN, Salvador López Orduña, se encuentran empatados en las preferencias electorales. Hasta hace un mes, Godoy le sacaba en promedio 5 puntos de ventaja al panista, quien ya lo alcanzó. La elección del 11 de noviembre está clasificada como no apta para cardiacos.
Pepe Grillo, Crónica, 6 de octubre.

Es posible que Manuel Espino no le cumplirá a Felipe Calderón. Hace unos meses el líder nacional panista anticipó el triunfo de su partido en los comicios de Michoacán, lo cual sería un regalo para el presidente. Así lo prometió.
Pero a un mes de que se realicen los comicios emblemáticos de este sexenio, no hay nada que indique que el paisano de Calderón, Salvador López Orduña, vaya a ganar.
El proceso está parejero, pero Leonel Godoy no se achica a pesar de la presión del centro. En la pelea también está el priista Jesús Reyna García.
De acuerdo con las evaluaciones de Arturo Estrada Chávez, todavía no hay una definición clara sobre quién será el sucesor de Lázaro Cárdenas Batel.
Es cierto que Cárdenas Batel ha mantenido una prudente distancia del proceso. Pero a partir de este fin de semana, Cuauhtémoc Cárdenas acompañará a Godoy en su campaña, a la cual también se sumará Andrés Manuel López Obrador.
Jesús Sánchez, “Recuento Político”, El Financiero, 11 de octubre.

La guerra sucia que denunció hace unos días amainó, y ahora le tocó el turno al panista Salvador López Orduña, a quien el PRI y el PRD lo acusan de promover la entrega de cemento a cambio del voto.
La reciente visita del presidente Calderón causó dudas y sospechas de intervencionismo en los comicios, pues el mandatario estuvo un par de días para inaugurar un festival de cine y una planta de turbinas.
Para cuando estén realizándose los comicios en Michoacán, el 11 de noviembre, los panistas estarán metidos en la elección de su dirigente nacional.
Para entonces sabremos si Manuel Espino se la juega por la reelección o le deja el camino libre a Germán Martínez Cázares.
Por ahora, hay una campaña en contra de Espino, en la que dicen que ya negoció el relevo y que dejaría la plaza. Para que el CEN del PAN emitiera un desmentido quiere decir que el fuego amigo no cesará hasta doblarlo. ¿Será?
Jesús Sánchez, “Recuento Político”, El Financiero, 11 de octubre.

0 Responses to "ELECCIONES EN MICHOACÁN. 3. EL PARTIDO ACCIÓN NACIONAL."