Piden en Mexicali rearmar a elementos del grupo Beta

La Coalición Pro Defensa del Migrante, con sede en Mexicali, se pronunció porque elementos del grupo Beta vuelvan a portar armas durante su tarea de auxiliar a los migrantes en zonas altamente peligrosas de la frontera norte, pues los "mandan a la guerra son fusil" al tener que enfrentarse con bandas de narcotraficantes y polleros.

José Moreno, presidente de la coalición y catedrático de la Universidad de Mexicali, afirmó que tiene que evitarse que otro agente Beta sea asesinado como ocurrió la semana pasada en Tijuana, cuando un grupo armado emboscó a dos agentes Beta en la colonia Libertad.

El activista reveló que los grupos Beta tienen grandes carencias además de que faltan elementos para proteger, rescatar y auxiliar a miles de personas que pretenden cruzar la frontera sin documentos y en condiciones de suma vulnerabilidad.

"Es raquítico el número de elementos y también no tienen infraestructura (…) no tienen suficientes vehículos para transitar en el desierto, no están dotados de todos los elementos para salvamento, no tienen lanchas, cuerdas; no tienen lo más elemental", señaló.

En entrevista telefónica para Crónica desde Mexicali, expresó que no es posible que haya menos de diez elementos Beta para cubrir todo el territorio de Mexicali.

El sociólogo explicó que las organizaciones de protección a migrantes no estaban de acuerdo en que los grupos Beta estuvieran armados a principios de los 90 cuando el Instituto Nacional de Migración (INM) los creó para proteger a los migrantes.

Los grupos Beta estaban armados cuando fueron creados en los años 90 y se mantuvieron varios años armados. "Después les quitaron las armas porque muchos de ellos empezaron a abusar de las armas y extorsionaban a los migrantes, pero ha habido evolución de esto, ya no son grupos armados, sino sólo grupos que se dedican a la protección", detalló.

Sin embargo, consideró que los Betas deben estar nuevamente armados, pero sólo en las zonas de alta peligrosidad como áreas de Tijuana o partes de Sonora como la Rumorosa, Nogales o en el desierto de Altar, Algodones, y Tecate.

Nota de Mariana Viayra Ramírez, Crónica, 21 de marzo.