Calderón pide solución al tema migratorio y Bush aboga por la Iniciativa Mérida

Nueva Orléans, EU, 21 de abril. Con el proceso electoral en curso para elegir al sucesor del presidente George W. Bush, su homólogo mexicano Felipe Calderón le pidió: “no perdamos impulso” para dar una solución integral al problema migratorio, y aprovechó para hacer una fuerte defensa del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Sin embargo, el propio Presidente mexicano hizo ver las limitaciones de su interlocutor. Si bien extendió una invitación para que visite México el próximo año, aclaró que en realidad iba dirigida al que gane la elección, aunque “el presidente Bush de todos modos será bienvenido cuando quiera hacerlo como ciudadano”.

En el marco de la Cumbre de Líderes de América del Norte, Calderón y Bush sostuvieron su tercer encuentro en lo que va del sexenio, pero, a unos meses de concluir su gobierno, el estadunidense ya no abordó el asunto migratorio y se centró en llamar al Congreso estadunidense a aprobar el paquete de ayuda en materia de seguridad, denominado Iniciativa Mérida, en aras de enviar un “fuerte mensaje de que queremos trabajar de manera cooperativa”.

Ambos tuvieron su primera aparición pública en la inauguración de las nuevas oficinas consulares en esta ciudad, y luego se reunieron en privado en el hotel Windsor Court.

Sonriente, al final del encuentro, Bush afirmó que la gente usa drogas porque hay oferta y por eso es necesario derrotar a los narcotraficantes. Así, aprovechó para insistir en las bondades de la Iniciativa Mérida.

A tono con el mensaje que Calderón daría después, señaló que el comercio ha sido benéfico para las dos naciones, y puso de ejemplo el desarrollo de la frontera México-Estados Unidos, porque “cuando uno viaja a esa zona se encuentra con prosperidad”.

El michoacano intentó empujar la impugnada Iniciativa Mérida al señalar que se requiere una estrategia común para enfrentar y vencer a un enemigo común como es el crimen organizado y el tráfico de drogas.

Hizo un reconocimiento al republicano, porque está “empezando a trabajar seriamente o más rápidamente” sobre el problema del tráfico de armas hacia México, lo que se demostró con la detención de algunos líderes de bandas.

Con la cabeza, el presidente de Estados Unidos asentía lo que decía su interlocutor y, ante la interrupción de la intérprete para hacer su labor, quiso presumir su buen manejo del español y respondió: “I understand every word”. Aun así se cumplió con el protocolo de traducción.

Sentado a un lado de su par, Calderón planteó que en estos tiempos se cuestiona mucho al comercio y sus beneficios, pero “la verdad es que para mí es muy claro que el comercio entre Estados Unidos y México ha beneficiado a la gente en ambos lados de la frontera”.

Enfático, dijo que se cuestiona ahora “el TLCAN, y la verdad es que éste ha generado cientos de miles de empleos en México y en Estados Unidos”. No sólo eso, sino ha permitido reducir la presión migratoria de muchos mexicanos, aseguró.

Al final fue cuando el Presidente mexicano declaró haber externado su preocupación sobre los derechos de los mexicanos en Estados Unidos. “Sé que hay un proceso electoral en curso en Estados Unidos, que nosotros respetamos; que hay muchas decisiones, incluyendo ésta, que competen a los ciudadanos americanos.”

Pero dijo que es muy importante que no se pierda el impulso, sino que se redoblen esfuerzos para dar una solución responsable al fenómeno migratorio.

Otro tema que abordaron fue el incremento de precios en los alimentos. Calderón planteó que intercambiaron opiniones acerca de las políticas públicas relativas a los biocombustibles, y se mostraron convencidos de que podrán enfrentar juntos un “problema de estas dimensiones” que afecta a muchas economías y a muchos ciudadanos en el mundo.

Mayor movilidad más al norte
A diferencia de las barreras migratorias puestas a los migrantes mexicanos en Estados Unidos, el otro encuentro que tuvo el michoacano con el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, dejó en consecuencia un acuerdo de lanzar tres planes piloto para facilitar la movilidad laboral temporal de los trabajadores mexicanos y canadienses en los sectores de construcción, turismo y servicios financieros.

Este esquema –según se informó en un comunicado, porque los presidentes no dieron mensaje a la prensa– abre una nueva faceta en el ámbito de movilidad laboral sin crear desequilibrios en los mercados laborales, atender la demanda de esos sectores en uno de los países, con el exceso de oferta que pudiese existir en el otro, y con el fin de asegurar un flujo ordenado, legal y seguro de trabajadores.

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social de México se encargará del reclutamiento y la presentación de los candidatos mexicanos a prestar servicios en Canadá, y les facilitará los trámites de saluda, como hace en el Programa de trabajo temporal agrícola vigente.

Los dos mandatarios también comentaron el caso de Brenda Martín, quien se encuentra sujeta a proceso penal, por delitos de jurisdicción federal en los tribunales de Guadalajara, Jalisco. Al respecto, Calderón Hinojosa recordó que el Poder Judicial de la Federación goza de plena autonomía y que confía en que se resuelva en breve conforme a derecho.

Nota de Claudia Herrera Beltrán, La Jornada, 22 de abril.


0 Responses to "Calderón pide solución al tema migratorio y Bush aboga por la Iniciativa Mérida"