Ricardo González Sada, presidente de la Confederación Patronal de México (Coparmex), expresó que el sector empresarial impulsará la iniciativa de reforma energética elaborada por el Poder Ejecutivo ante sus detractores.
El dirigente empresarial dijo estar convencido de apoyar la reforma propuesta por el Ejecutivo, después de reunirse con la titular del ramo, Georgina Kessel, a puerta cerrada.
El directivo comentó que “destancados miembros del Frente Amplio Progresista (FAP)” han tenido reuniones con las cúpulas empresariales para discutir la iniciativa del presidente Felipe Calderón.
González informó que el debate no se debe fincar en el emisor de la propuesta, sino en la sustancia de la iniciativa.
Al finalizar la reunión de las grandes empresas, afiliadas a Coparmex, González apoyó que, en caso de que el debate siga estancado, PRI y PAN formen un bloque y se apruebe la reforma por mayoría simple en una sede alterna.
“El FAP tiene que saber perder, pero más importante: tiene que saber ganar y estar preparado, y esto implica ser un actor que abone a la maduración del proceso democrático, y eso se logra con debate con negociación”, comentó González después de reunirse con la secretaria de Energía.
En opinión de González, los políticos que han paralizado el Congreso de la Unión, con la toma de la tribuna, son una minoría que no contribuyen a la vida democrática del país.
Kessel dijo que el tiempo que tarde en salir la reforma depende del Congreso. No obstante, expresó, Energía está lista para proporcionar la información complementaria que sea solicitada por los partidos políticos.
Expresó no estar de acuerdo con los señalamientos de Cuauhtémoc Cárdenas, porque la iniciativa enviada por el Ejecutivo “cumple a cabalidad con lo estipulado por la Constitución”.
Es un avance que la Comisión de Energía del Senado haya firmado un acuerdo para iniciar el debate lde la propuesta petrolera, dijo.
El dirigente empresarial dijo estar convencido de apoyar la reforma propuesta por el Ejecutivo, después de reunirse con la titular del ramo, Georgina Kessel, a puerta cerrada.
El directivo comentó que “destancados miembros del Frente Amplio Progresista (FAP)” han tenido reuniones con las cúpulas empresariales para discutir la iniciativa del presidente Felipe Calderón.
González informó que el debate no se debe fincar en el emisor de la propuesta, sino en la sustancia de la iniciativa.
Al finalizar la reunión de las grandes empresas, afiliadas a Coparmex, González apoyó que, en caso de que el debate siga estancado, PRI y PAN formen un bloque y se apruebe la reforma por mayoría simple en una sede alterna.
“El FAP tiene que saber perder, pero más importante: tiene que saber ganar y estar preparado, y esto implica ser un actor que abone a la maduración del proceso democrático, y eso se logra con debate con negociación”, comentó González después de reunirse con la secretaria de Energía.
En opinión de González, los políticos que han paralizado el Congreso de la Unión, con la toma de la tribuna, son una minoría que no contribuyen a la vida democrática del país.
Kessel dijo que el tiempo que tarde en salir la reforma depende del Congreso. No obstante, expresó, Energía está lista para proporcionar la información complementaria que sea solicitada por los partidos políticos.
Expresó no estar de acuerdo con los señalamientos de Cuauhtémoc Cárdenas, porque la iniciativa enviada por el Ejecutivo “cumple a cabalidad con lo estipulado por la Constitución”.
Es un avance que la Comisión de Energía del Senado haya firmado un acuerdo para iniciar el debate lde la propuesta petrolera, dijo.
Nota de Ramiro Alonso y Noé Cruz, El Universal, 23 de abril.
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