Hugo Chávez incluye al gigante del acero Sidor en su plan de nacionalización

Sin modificar su plan de nacionalización de empresas extranjeras con amplia presencia y desarrollo en Venezuela, el presidente Hugo Chávez ordenó ayer continuar con este proyecto y ahora tocó el turno a la siderúrgica Sidor, del grupo ítalo-argentino Ternium Techint, dentro de un plan estatizador que ya alcanzó a las industrias del cemento, el petróleo, la electricidad y la telefonía.

El anuncio lo hizo el vicepresidente venezolano Ramón Carrizalez, quien intentó desde el martes pasado poner fin a un conflicto laboral de más de un año que incluyó una decena de huelgas convocadas por el sindicato del sector.

La empresa siderúrgica —privatizada en 1997 por unos mil 200 millones de dólares— y sus trabajadores negociaban infructuosamente desde marzo de 2007 el nuevo contrato colectivo.
“Estaba en contacto con el presidente, le dije que con una gran arrogancia la empresa se estaba levantando de la mesa de negociación porque no tenía ninguna contrapropuesta y (Chávez) me instruyó que les informara que el gobierno toma el control de la empresa”, dijo Carrizalez en rueda de prensa.

El consorcio “colonizador”, como lo llamó Carrizalez, básicamente de la familia argentina Rocca, deberá desprenderse del 60 por ciento de la Siderúrgica del Orinoco (Sidor) que controla en la actualidad.

El Estado y los trabajadores venezolanos se reparten hasta ahora en partes iguales el 40 por ciento restante.

REPARTO.

El programa nacionalizador venezolano no registra incautaciones, al privilegiar acuerdos de compraventa o asociación en empresas mixtas, con previas o posteriores indemnizaciones.
La infraestructura de Sidor, situada a unos 800 kilómetros al sureste de Caracas, la componen una veintena de instalaciones donde se produce acero, laminados en caliente y frío, hierro y tuberías.

Tras el anuncio, los gerentes de Sidor “llamaron a la familia Rocca en Argentina, a (la presidenta Cristina Fernández de) Kirchner, pero nosotros sabemos que la posición del presidente Chávez (...) es que no se va a echar atrás”, destacó Meléndez.

FEMSA. Por otra parte, trabajadores de Coca-Cola Femsa, concesionaria de la empresa estadunidense en Venezuela, denunciaron que continúa el bloqueo ilegal de las instalaciones por parte de ex concesionarios de la compañía, lo que les imposibilita trabajar.

En una protesta ante la televisora Globovisión y al grito de “es nuestro derecho, queremos trabajar”, unas cien personas denunciaron el bloqueo que sufren las instalaciones de la empresa desde el lunes pasado, el segundo en lo que va de año, por lo que exigen la intervención del presidente Chávez para remediar la crisis.

Nota de agencias en Caracas, Crónica, 10 de abril.