BOGOTÁ.- La Fiscalía General de Colombia inició ayer una averiguación por la denuncia de una ex congresista que asegura que el Presidente Álvaro Uribe y otros funcionarios le ofrecieron cargos para que aprobara una reforma que permitió la reelección del Mandatario en 2006.
Se trata de la primera decisión de un organismo de control después de que el domingo un noticiero transmitiera una entrevista con la ex legisladora del Partido Conservador Yidis Medina grabada en 2004, en la que asegura que Uribe y funcionarios de su Gobierno le ofrecieron tres cargos directivos en dependencias gubernamentales y un Consulado.
"La Fiscalía General de la Nación, dentro de su competencia, inició una averiguación en torno al contenido de la información divulgada por Noticias Uno sobre el posible delito de cohecho y otros que puedan desprenderse de lo manifestado por la ex representante a la Cámara Yidis Medina", dijo un comunicado.
Según expertos, de comprobarse la denuncia de Medina, Uribe y otros funcionarios podrían ser investigados por el delito de cohecho.
También aseguraron que la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes y la Corte Suprema de Justicia deben investigar.
El Congreso aprobó en 2004 un acto legislativo que habilitó a Uribe para buscar su reelección inmediata, el cual fue avalado por la Corte Constitucional. El voto de Medina fue decisivo para impulsar la reforma. Según ella, aunque se oponía a la reelección, cambió su decisión después de las ofertas del Gobierno, las cuales no se cumplieron.
Medina dijo que grabó la entrevista porque temía por su vida, pero condicionó su transmisión pública a que fuera víctima de un atentado o a que el Gobierno no le cumpliera la promesa de los cargos ofrecidos.
La Administración de Uribe negó las acusaciones de Medina y sugirió que se trata de un montaje.
La denuncia se conoce cuando el Congreso colombiano vive una crisis por el arresto de 29 legisladores y la investigación de otros 33 por sus presuntos nexos con paramilitares.
Entre ellos, destaca la presidenta del Senado, Nancy Gutiérrez, quien descartó ayer renunciar tras abrirse una investigación en su contra.
La iniciativa que estudia el Congreso para enfrentar el escándalo de la "parapolítica" es visto por algunos como una "fachada".
"Es sólo fachada. La reforma política no se aplicará a los que están implicados en este momento", dijo el politólogo Fernando Rojas, de la Universidad Javeriana.
Se trata de la primera decisión de un organismo de control después de que el domingo un noticiero transmitiera una entrevista con la ex legisladora del Partido Conservador Yidis Medina grabada en 2004, en la que asegura que Uribe y funcionarios de su Gobierno le ofrecieron tres cargos directivos en dependencias gubernamentales y un Consulado.
"La Fiscalía General de la Nación, dentro de su competencia, inició una averiguación en torno al contenido de la información divulgada por Noticias Uno sobre el posible delito de cohecho y otros que puedan desprenderse de lo manifestado por la ex representante a la Cámara Yidis Medina", dijo un comunicado.
Según expertos, de comprobarse la denuncia de Medina, Uribe y otros funcionarios podrían ser investigados por el delito de cohecho.
También aseguraron que la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes y la Corte Suprema de Justicia deben investigar.
El Congreso aprobó en 2004 un acto legislativo que habilitó a Uribe para buscar su reelección inmediata, el cual fue avalado por la Corte Constitucional. El voto de Medina fue decisivo para impulsar la reforma. Según ella, aunque se oponía a la reelección, cambió su decisión después de las ofertas del Gobierno, las cuales no se cumplieron.
Medina dijo que grabó la entrevista porque temía por su vida, pero condicionó su transmisión pública a que fuera víctima de un atentado o a que el Gobierno no le cumpliera la promesa de los cargos ofrecidos.
La Administración de Uribe negó las acusaciones de Medina y sugirió que se trata de un montaje.
La denuncia se conoce cuando el Congreso colombiano vive una crisis por el arresto de 29 legisladores y la investigación de otros 33 por sus presuntos nexos con paramilitares.
Entre ellos, destaca la presidenta del Senado, Nancy Gutiérrez, quien descartó ayer renunciar tras abrirse una investigación en su contra.
La iniciativa que estudia el Congreso para enfrentar el escándalo de la "parapolítica" es visto por algunos como una "fachada".
"Es sólo fachada. La reforma política no se aplicará a los que están implicados en este momento", dijo el politólogo Fernando Rojas, de la Universidad Javeriana.
Nota de agencias, Reforma, 22 de abril.
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