La “parapolítica” le estalla a Uribe

El escándalo de la llamada “parapolítica” le ha estallado finalmente al presidente de Colombia, Álvaro Uribe. El mandatario declaró ayer a Caracol Radio que no descarta la posibilidad de adelantar las elecciones para superar la actual crisis política, al crecer día tras día las revelaciones sobre los nexos entre líderes políticos y los grupos paramilitares. La Corte Suprema de Justicia (CSJ) ha vinculado a 64 legisladores con el escándalo, 54 de los cuales pertenecen a formaciones afines al jefe del Estado.

Del total de implicados, 32 están detenidos, entre ellos Mario Uribe Escobar, primo del presidente y que el martes se refugió en la Embajada de Costa Rica en Bogotá para pedir asilo político, que le fue negado. La convocatoria de una asamblea constituyente ha sido defendida por los opositores a Uribe, que con sus aliados insiste en una reforma política que no toque la Constitución.

Tras declararse como “un combatiente de la democracia”, el presidente advirtió que hará todo el esfuerzo para pedir a sus compatriotas que no se dejen “llevar por caminos de incertidumbre”, como sería el de la constituyente. Uribe reconoció, sin embargo, que se están analizando “todas las opciones”, y que desde el domingo pasado se reunió con los grupos parlamentarios para tomar la decisión más adecuada para hacer frente a la crisis política. “No me voy a dejar presionar, necesitamos examinar ese tema con mucho cuidado y tomar la mejor decisión”, afirmó el presidente, para quien es un “error histórico” de los colombianos pensar que los problemas se solucionan con reformas constitucionales. “Lo que se debe recordar es que este gobierno fue el que desmontó el paramilitarismo, los combatió y los obligó a la desmovilización”, señaló Uribe, quien insistió en que siente un gran dolor por la captura de su primo pero espera que la justicia complete la investigación y ofrezca al país la verdad de esos hechos. Uribe informó de que también es sujeto de una investigación. Las autoridades, señaló, están investigando una acusación hecha por un preso que lo señala de haber participado en una reunión para planear la masacre de El Aro, en Antioquia, en la que fueron asesinadas quince personas en octubre de 1997 a manos de los paramilitares. En ese entonces Uribe era el gobernador de Antioquia.

“Me pasé la Semana Santa hablando con abogados para que recogieran toda la información sobre mis movimientos y desplazamientos desde 1988”, declaró Uribe a la emisora. Según ese testigo, el entonces gobernador se reunió con el general Ospina, el general Rosso y el líder paramilitar Salvatore Mancuso para planear esa masacre. El presidente afirmó que la justicia debe investigar todo los hechos pero teniendo “mucho cuidado” con el testimonio “de un bandido con ánimo de venganza contra un ciudadano honorable” como él. “Ese bandido (un ex paramilitar que actuaba en el departamento de Sucre) dice que yo hasta agradecí a los paramilitares por esa masacre porque liberaron a seis secuestrados, entre ellos un primo mío y que Santiago mi hermano prestó 20 paramilitares para ese crimen”, añadió Uribe.

La Registraduría Nacional del Estado Civil, la autoridad electoral, propuso ayer replantear la financiación de las campañas políticas para evitar que dineros y apoyos del narcotráfico y de grupos armados ilegales continúen desatando escándalos.

Claves

Ecuador y las FARC

• Ecuador reconocería a las FARC como fuerza beligerante si esa guerrilla colombiana desiste de los secuestros y demás ataques que puedan calificarse como terroristas, dijo ayer el presidente, Rafael Correa, a la televisora estatal venezolana VTV

• “El gobernador de Nuevo México y ex aspirante a la candidatuara demócrata a la presidencia de Estados Unidos, el hispano Bill Richardson, viajará a Venezuela para tratar mañana viernes con el presidente venezolano, Hugo Chávez, sobre los rehenes estadunidenses que se encuentran en manos de la guerrilla de las FARC.
Nota de agencias en Bogotá, Milenio, 24 de abril.

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