A 15 años del Tratado de Libre Comercio de América del Norte e inmersos en un debate antiinmigrante, los presidentes de México y Estados Unidos, Felipe Calderón y George W. Bush, junto con el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, se reunirán en Nueva Orleáns este lunes y martes en una visita que saldrá de lo convencional.
Y es que es posible que Bush acompañe a Calderón en la reinauguración del consulado de Louisiana, que servirá para darle apoyo a los casi 30,000 trabajadores mexicanos que llegaron para la reconstrucción de la capital del jazz después del desastre ocasionado en 2005 por el huracán Katrina, donde murieron aproximadamente 1,000 personas.
Además, será otro escenario para que Calderón le recuerde a su contraparte estadounidense el impacto económico de los migrantes mexicanos, aunque sea la recta final de su mandato debido ya que en noviembre próximo se define al sucesor de la Casa Blanca.
A pesar de que Bush fuera criticado fuertemente por la tardanza en la ayuda a los damnificados por este huracán, eligió esta ciudad para realizar la reunión de la Alianza para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte (ASPAN), donde los temas principales serán seguridad y economía, con reuniones bilaterales el primer día y una trilateral el segundo.
Calderón participará en una exposición del juguete mexicano, y muy al estilo del jazz, cenará el lunes con los mandatarios en uno de los 10 restaurantes más exclusivos de Estados Unidos, The Commander´s Palace. Éste fue uno de los comercios que sufrió mayores daños al paso del huracán, el cual causó pérdidas materiales por 75,000 millones de dólares.
Para el martes tendrá una conferencia de prensa y viajará a Dallas, Texas, para un encuentro abierto con comunidades de mexicanos.
En la visita se esperan manifestaciones de grupos canadienses y estadounidenses en contra del ASPAN, el cual consideran una extensión del TLCAN, realizado sin consultar a la sociedad civil, por lo cual ya se tiene preparado un operativo de seguridad del Departamento de la Policía de Nueva Orleáns, de acuerdo con periódicos locales.
Y es que es posible que Bush acompañe a Calderón en la reinauguración del consulado de Louisiana, que servirá para darle apoyo a los casi 30,000 trabajadores mexicanos que llegaron para la reconstrucción de la capital del jazz después del desastre ocasionado en 2005 por el huracán Katrina, donde murieron aproximadamente 1,000 personas.
Además, será otro escenario para que Calderón le recuerde a su contraparte estadounidense el impacto económico de los migrantes mexicanos, aunque sea la recta final de su mandato debido ya que en noviembre próximo se define al sucesor de la Casa Blanca.
A pesar de que Bush fuera criticado fuertemente por la tardanza en la ayuda a los damnificados por este huracán, eligió esta ciudad para realizar la reunión de la Alianza para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte (ASPAN), donde los temas principales serán seguridad y economía, con reuniones bilaterales el primer día y una trilateral el segundo.
Calderón participará en una exposición del juguete mexicano, y muy al estilo del jazz, cenará el lunes con los mandatarios en uno de los 10 restaurantes más exclusivos de Estados Unidos, The Commander´s Palace. Éste fue uno de los comercios que sufrió mayores daños al paso del huracán, el cual causó pérdidas materiales por 75,000 millones de dólares.
Para el martes tendrá una conferencia de prensa y viajará a Dallas, Texas, para un encuentro abierto con comunidades de mexicanos.
En la visita se esperan manifestaciones de grupos canadienses y estadounidenses en contra del ASPAN, el cual consideran una extensión del TLCAN, realizado sin consultar a la sociedad civil, por lo cual ya se tiene preparado un operativo de seguridad del Departamento de la Policía de Nueva Orleáns, de acuerdo con periódicos locales.
Nota de Laura Vega, El Economista, 21 de abril.
0 Responses to "Sostendrán reunión trilateral Calderón, Bush y Harper"
Publicar un comentario