MÉRIDA, Yuc.- Andrés Manuel López Obrador dijo ayer que después de que terminen los foros sobre la reforma energética, en la tercera semana de julio, tomarán "otras decisiones", para evitar que se privatice el petróleo.
"El 22 de julio, cuando termine el debate en la Cámara de Diputados, vamos a tomar otras decisiones, pero que quede claro: no vamos a permitir que se viole la Constitución.
"Nada que atente contra la soberanía del País; nada que tenga fines de privatizar la industria del petróleo y no a las prácticas que fomenten la corrupción en Pemex", sentenció ante unas 300 personas reunidas en la capital yucateca.
Antes, en Cancún, Quintana Roo, el tabasqueño planteó que el pueblo de México debe expresar su aceptación o su rechazo a la propuesta de privatizar Pemex a través de una consulta popular.
Al iniciar una serie de reuniones informativas con integrantes del movimiento nacional en defensa del petróleo, el tabasqueño sostuvo que ninguna decisión del Gobierno federal debe estar por encima de los intereses de la Nación.
"Que no se imponga nada, que sea el pueblo el que decida, porque en la democracia es el pueblo el que manda", expuso.
Agregó que los legisladores del Congreso de la Unión podrán tener la última palabra, pero "la primera palabra siempre la va a tener el pueblo de México, y eso es lo que vamos a defender".
Reunido con brigadistas en Cancún, López Obrador reiteró que la reforma energética que propone el Presidente Felipe Calderón pretende violar el artículo 27 constitucional.
Sostuvo que el Gobierno federal quiere entregar el proceso de refinación a empresas extranjeras, así como las áreas de petroquímica, transporte y el manejo de los ductos de Pemex.
"No vamos a permitir que se privatice la industria petrolera, porque el petróleo ya tiene dueño y es el pueblo de México", alertó.
"Es una minoría la que pretende violar la Constitución, la que quiere entregar nuestro petróleo a los extranjeros, pero esa minoría sólo cuenta con el apoyo de los medios de comunicación, salvo algunas excepciones, pero especialmente con el de las televisoras".
Explicó que la gira que inició por el sureste tiene el propósito de organizar a los ciudadanos como defensores del petróleo, y reiteró que a finales de junio el movimiento de resistencia civil contará con alrededor de 200 mil brigadistas que informarán a los ciudadanos, casa por casa, sobre los riesgos que implica el proyecto de Calderón.
Acompañado por dirigentes locales Frente Amplio Progresista, López Obrador enfatizó que los mexicanos no dejarán que el País se convierta en una colonia.
"Por esa razón tenemos que organizarnos mejor, para impedir un nuevo atraco a la Nación.
"(El Presidente Felipe) Calderón quiere entregar Pemex por compromisos, pero que quede claro que privatizar es sinónimo de corrupción y así ha quedado demostrado a lo largo de la historia", añadió el político tabasqueño.
"El 22 de julio, cuando termine el debate en la Cámara de Diputados, vamos a tomar otras decisiones, pero que quede claro: no vamos a permitir que se viole la Constitución.
"Nada que atente contra la soberanía del País; nada que tenga fines de privatizar la industria del petróleo y no a las prácticas que fomenten la corrupción en Pemex", sentenció ante unas 300 personas reunidas en la capital yucateca.
Antes, en Cancún, Quintana Roo, el tabasqueño planteó que el pueblo de México debe expresar su aceptación o su rechazo a la propuesta de privatizar Pemex a través de una consulta popular.
Al iniciar una serie de reuniones informativas con integrantes del movimiento nacional en defensa del petróleo, el tabasqueño sostuvo que ninguna decisión del Gobierno federal debe estar por encima de los intereses de la Nación.
"Que no se imponga nada, que sea el pueblo el que decida, porque en la democracia es el pueblo el que manda", expuso.
Agregó que los legisladores del Congreso de la Unión podrán tener la última palabra, pero "la primera palabra siempre la va a tener el pueblo de México, y eso es lo que vamos a defender".
Reunido con brigadistas en Cancún, López Obrador reiteró que la reforma energética que propone el Presidente Felipe Calderón pretende violar el artículo 27 constitucional.
Sostuvo que el Gobierno federal quiere entregar el proceso de refinación a empresas extranjeras, así como las áreas de petroquímica, transporte y el manejo de los ductos de Pemex.
"No vamos a permitir que se privatice la industria petrolera, porque el petróleo ya tiene dueño y es el pueblo de México", alertó.
"Es una minoría la que pretende violar la Constitución, la que quiere entregar nuestro petróleo a los extranjeros, pero esa minoría sólo cuenta con el apoyo de los medios de comunicación, salvo algunas excepciones, pero especialmente con el de las televisoras".
Explicó que la gira que inició por el sureste tiene el propósito de organizar a los ciudadanos como defensores del petróleo, y reiteró que a finales de junio el movimiento de resistencia civil contará con alrededor de 200 mil brigadistas que informarán a los ciudadanos, casa por casa, sobre los riesgos que implica el proyecto de Calderón.
Acompañado por dirigentes locales Frente Amplio Progresista, López Obrador enfatizó que los mexicanos no dejarán que el País se convierta en una colonia.
"Por esa razón tenemos que organizarnos mejor, para impedir un nuevo atraco a la Nación.
"(El Presidente Felipe) Calderón quiere entregar Pemex por compromisos, pero que quede claro que privatizar es sinónimo de corrupción y así ha quedado demostrado a lo largo de la historia", añadió el político tabasqueño.
Nota de Martín Morita, Reforma, 7 de mayo.
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