El gobierno colombiano no tuvo que esperar mucho tiempo para que las FARC reconocieran la muerte de Manuel Marulanda Vélez, más conocido como Tirofijo. En un gesto poco habitual en esa guerrilla, un día después de que el Ministerio de Defensa informara la muerte del jefe guerrillero, Timoleón Jiménez (Timochenko), confirmó a través del canal venezolano Telesur la muerte su líder.
“Manuel Marulanda Vélez murió el pasado 26 de marzo como consecuencia de un infarto cardiaco, acompañado de su compañera y rodeado de su guardia personal y de todas las unidades que conformaban su seguridad, luego de una breve enfermedad. Le hemos rendido los honores que merece un conductor de su dimensión y dado honrosa sepultura”, afirmó Timochenko, miembro del secretariado de las FARC quien según las autoridades está en la zona del departamento de Norte de Santander, en la frontera con Venezuela.
En un tono más parecido al de un dirigente político en campaña que al de un guerrillero acostumbrado a dar órdenes de combate, confirmó que Guillermo León Sáenz (Alfonso Cano), era el sucesor de Tirofijo.
Cano, es un antropólogo de 56 años, alejado del ala militar de las FARC. En México se le conoce por haber participado en la década de los ochenta en los fallidos diálogos de paz entre el gobierno colombiano y la Coordinadora Guerrillera (integrada por las FARC y el ELN), en la ciudad de Tlaxcala.
Hace dos semanas, el presidente colombiano, Álvaro Uribe, se dirigió a él en Planadas (Tolima) y lo llamó “filósofo del terrorismo”, lo retó a desmovilizarse o a correr la misma suerte de Raúl Reyes e Iván Ríos, miembros del secretariado, muertos en marzo pasado.
El nombramiento de Cano, afirmó Timochenko, se hizo de común acuerdo entre los miembros del secretariado. Esto deja ver que en la estructura monolítica de las FARC sigue pesando la antigüedad, y Cano era el miembro más antiguo de la cúpula de esa guerrilla.
Minutos después de que la guerrilla reconociera la muerte de su líder, el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, hizo una propuesta audaz a Cano: que las FARC entreguen el cadáver de Tirofijo para practicarle una necropsia que permita establecer las verdaderas causas de su muerte.
Indicó que varias comunicaciones interceptadas a guerrilleros permitieron confirmar la información que les había dado un confidente.
Para respaldar su afirmación, presentó una conversación entre alias Alberto Cancharina, jefe de una facción de las FARC que opera en el centro del país, y un jefe de cuadrilla. El primero afirma que “el viejo murió el 26 de marzo de un paro cardiaco” y ordena “que eso hay que reportárselo a la tropa”.
Su muerte, señaló el ministro Santos, cierra un capítulo que solo ha traído dolor y muerte a los colombianos. De ahí, su insistencia para que Cano y Jorge Briceño (mono Jojoy), jefe del ala militar de las FARC, opten por una salida política al conflicto y se desmovilicen.
“A él y a Jojoy les decimos: aprovechen esta oportunidad, aprovechen la generosidad del Gobierno del presidente Uribe (Álvaro), y entren por esa puerta de la paz. A los miembros de las FARC les decimos: desmovilícense, no tienen futuro, 44 años de intentos infructuosos, donde lo que ha tenido como resultado el país es desolación y violencia. Ahí no tienen ningún futuro”.
Aumentan a once los muertos por sismo
(Bogotá•AFP)
• La Cruz Roja local informó que el sismo de 5.5 grados en la escala de Richter que el sábado afectó a una importante zona del país, dejó once muertos.
El director de socorro del organismo, Walter Cote, precisó a periodistas que como consecuencia directa del movimiento telúrico fallecieron once personas y unas 54 resultaron heridas de consideración. Igualmente se reportó que 400 viviendas fueron dañadas gravemente.
Un total de 4 mil 181 personas quedaron damnificadas en los departamentos de Cundinamarca, Boyacá, Meta (centro) y Casanare (este). Desde el sábado, la estatal Red Sismológica Nacional ha registrado numerosas réplicas, de las cuales la más fuerte, de 4.1 grados en la escala de Richter, se presentó ayer a las 04H39 locales, con epicentro a unos 50 kms. de Bogotá.
“Manuel Marulanda Vélez murió el pasado 26 de marzo como consecuencia de un infarto cardiaco, acompañado de su compañera y rodeado de su guardia personal y de todas las unidades que conformaban su seguridad, luego de una breve enfermedad. Le hemos rendido los honores que merece un conductor de su dimensión y dado honrosa sepultura”, afirmó Timochenko, miembro del secretariado de las FARC quien según las autoridades está en la zona del departamento de Norte de Santander, en la frontera con Venezuela.
En un tono más parecido al de un dirigente político en campaña que al de un guerrillero acostumbrado a dar órdenes de combate, confirmó que Guillermo León Sáenz (Alfonso Cano), era el sucesor de Tirofijo.
Cano, es un antropólogo de 56 años, alejado del ala militar de las FARC. En México se le conoce por haber participado en la década de los ochenta en los fallidos diálogos de paz entre el gobierno colombiano y la Coordinadora Guerrillera (integrada por las FARC y el ELN), en la ciudad de Tlaxcala.
Hace dos semanas, el presidente colombiano, Álvaro Uribe, se dirigió a él en Planadas (Tolima) y lo llamó “filósofo del terrorismo”, lo retó a desmovilizarse o a correr la misma suerte de Raúl Reyes e Iván Ríos, miembros del secretariado, muertos en marzo pasado.
El nombramiento de Cano, afirmó Timochenko, se hizo de común acuerdo entre los miembros del secretariado. Esto deja ver que en la estructura monolítica de las FARC sigue pesando la antigüedad, y Cano era el miembro más antiguo de la cúpula de esa guerrilla.
Minutos después de que la guerrilla reconociera la muerte de su líder, el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, hizo una propuesta audaz a Cano: que las FARC entreguen el cadáver de Tirofijo para practicarle una necropsia que permita establecer las verdaderas causas de su muerte.
Indicó que varias comunicaciones interceptadas a guerrilleros permitieron confirmar la información que les había dado un confidente.
Para respaldar su afirmación, presentó una conversación entre alias Alberto Cancharina, jefe de una facción de las FARC que opera en el centro del país, y un jefe de cuadrilla. El primero afirma que “el viejo murió el 26 de marzo de un paro cardiaco” y ordena “que eso hay que reportárselo a la tropa”.
Su muerte, señaló el ministro Santos, cierra un capítulo que solo ha traído dolor y muerte a los colombianos. De ahí, su insistencia para que Cano y Jorge Briceño (mono Jojoy), jefe del ala militar de las FARC, opten por una salida política al conflicto y se desmovilicen.
“A él y a Jojoy les decimos: aprovechen esta oportunidad, aprovechen la generosidad del Gobierno del presidente Uribe (Álvaro), y entren por esa puerta de la paz. A los miembros de las FARC les decimos: desmovilícense, no tienen futuro, 44 años de intentos infructuosos, donde lo que ha tenido como resultado el país es desolación y violencia. Ahí no tienen ningún futuro”.
Aumentan a once los muertos por sismo
(Bogotá•AFP)
• La Cruz Roja local informó que el sismo de 5.5 grados en la escala de Richter que el sábado afectó a una importante zona del país, dejó once muertos.
El director de socorro del organismo, Walter Cote, precisó a periodistas que como consecuencia directa del movimiento telúrico fallecieron once personas y unas 54 resultaron heridas de consideración. Igualmente se reportó que 400 viviendas fueron dañadas gravemente.
Un total de 4 mil 181 personas quedaron damnificadas en los departamentos de Cundinamarca, Boyacá, Meta (centro) y Casanare (este). Desde el sábado, la estatal Red Sismológica Nacional ha registrado numerosas réplicas, de las cuales la más fuerte, de 4.1 grados en la escala de Richter, se presentó ayer a las 04H39 locales, con epicentro a unos 50 kms. de Bogotá.
Clara Isabel Vélez Rincón en Medellín, Milenio, 26 de mayo.
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