Lima, 17 de mayo. México y la Unión Europea acordaron establecer una asociación estratégica cuyo contenido aún está por determinarse, así como cooperar en el combate al terrorismo, el tráfico de drogas y de armas pequeñas que amenazan la seguridad internacional.
El presidente Felipe Calderón obtuvo también el respaldo del presidente de la Comunidad Europea, José Manuel Durao Barroso, a su propuesta de crear un Fondo Verde, complementario de otras acciones para mitigar los efectos del cambio climático.
Durao Barroso resaltó el liderazgo del presidente mexicano y explicó, durante un mensaje que ofrecieron, que coincide con el principio expuesto por Calderón de que todos los países tienen una responsabilidad compartida pero diferenciada en el tema del medio ambiente.
Un día después de que concluyó la cumbre América Latina y el Caribe-Unión Europea, cada gobernante latinoamericano realizó reuniones por separado con los líderes europeos. En el caso de México, el comunicado conjunto resaltó la importancia de combatir el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, con estricta observancia del derecho internacional, los estándares mundiales de protección a las garantías individuales y el derecho internacional.
De igual forma, habrá cooperación entre las dos regiones para el problema de las drogas ilícitas y delitos relacionados, sobre la base de una responsabilidad compartida y el impulso de políticas y programas para enfrentarlo de manera integral y balanceada.
Además declararon que el tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras y sus municiones constituye una seria amenaza a la paz y la seguridad internacionales. Por eso determinaron seguir las recomendaciones del programa de acción de las Naciones Unidas en la materia y participar de manera activa durante la Tercera Reunión Bienal del mismo, a realizarse en Nueva York del 14 al 18 de julio.
El Presidente aprovechó para hacer campaña en pro de la candidatura mexicana al Consejo de Seguridad de la ONU como miembro no permanente para el periodo 2009-2010, pero sólo consiguió una expresión de “satisfacción” de la UE por la información proporcionada por México sobre las motivaciones de este proyecto.
También expresaron su disposición para reactivar y concluir, tan pronto como sea posible, las negociaciones relativas a las cláusulas de revisión previstas en el Tratado de libre comercio con la Unión Europea en materia agropecuaria, de servicios e inversión.
De manera adicional, el presidente mexicano acordó con los líderes de la UE que el Banco Europeo de Inversiones otorgará una línea de crédito por 50 millones de euros para financiar proyectos de mitigación del cambio climático. En estas conversaciones coincidieron en que la migración debe ser analizada con un enfoque amplio y balanceado para encontrar respuestas basadas en el principio de responsabilidad compartida entre países de origen, tránsito y destino, con pleno respeto de los derechos humanos de los migrantes.
Calderón Hinojosa cerró su estancia en la capital peruana con otras reuniones con resultados escasos, según los comunicados dados a conocer por la Presidencia de la República. En una de ellas, el primer ministro de los Países Bajos, Jan Peter Balkenende, mostró interés en diversificar su inversión en México, y en otra, con la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, abordaron la importancia de fortalecer el Grupo de Río y la iniciativa del Arco del Pacífico Latinoamericano.
El mandatario regresó por la noche al Distrito Federal, donde continuará sus contactos con la región europea, ya que ofrecerá una cena privada a la canciller alemana, Angela Merkel, quien hará una visita de Estado a México.
El presidente Felipe Calderón obtuvo también el respaldo del presidente de la Comunidad Europea, José Manuel Durao Barroso, a su propuesta de crear un Fondo Verde, complementario de otras acciones para mitigar los efectos del cambio climático.
Durao Barroso resaltó el liderazgo del presidente mexicano y explicó, durante un mensaje que ofrecieron, que coincide con el principio expuesto por Calderón de que todos los países tienen una responsabilidad compartida pero diferenciada en el tema del medio ambiente.
Un día después de que concluyó la cumbre América Latina y el Caribe-Unión Europea, cada gobernante latinoamericano realizó reuniones por separado con los líderes europeos. En el caso de México, el comunicado conjunto resaltó la importancia de combatir el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, con estricta observancia del derecho internacional, los estándares mundiales de protección a las garantías individuales y el derecho internacional.
De igual forma, habrá cooperación entre las dos regiones para el problema de las drogas ilícitas y delitos relacionados, sobre la base de una responsabilidad compartida y el impulso de políticas y programas para enfrentarlo de manera integral y balanceada.
Además declararon que el tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras y sus municiones constituye una seria amenaza a la paz y la seguridad internacionales. Por eso determinaron seguir las recomendaciones del programa de acción de las Naciones Unidas en la materia y participar de manera activa durante la Tercera Reunión Bienal del mismo, a realizarse en Nueva York del 14 al 18 de julio.
El Presidente aprovechó para hacer campaña en pro de la candidatura mexicana al Consejo de Seguridad de la ONU como miembro no permanente para el periodo 2009-2010, pero sólo consiguió una expresión de “satisfacción” de la UE por la información proporcionada por México sobre las motivaciones de este proyecto.
También expresaron su disposición para reactivar y concluir, tan pronto como sea posible, las negociaciones relativas a las cláusulas de revisión previstas en el Tratado de libre comercio con la Unión Europea en materia agropecuaria, de servicios e inversión.
De manera adicional, el presidente mexicano acordó con los líderes de la UE que el Banco Europeo de Inversiones otorgará una línea de crédito por 50 millones de euros para financiar proyectos de mitigación del cambio climático. En estas conversaciones coincidieron en que la migración debe ser analizada con un enfoque amplio y balanceado para encontrar respuestas basadas en el principio de responsabilidad compartida entre países de origen, tránsito y destino, con pleno respeto de los derechos humanos de los migrantes.
Calderón Hinojosa cerró su estancia en la capital peruana con otras reuniones con resultados escasos, según los comunicados dados a conocer por la Presidencia de la República. En una de ellas, el primer ministro de los Países Bajos, Jan Peter Balkenende, mostró interés en diversificar su inversión en México, y en otra, con la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, abordaron la importancia de fortalecer el Grupo de Río y la iniciativa del Arco del Pacífico Latinoamericano.
El mandatario regresó por la noche al Distrito Federal, donde continuará sus contactos con la región europea, ya que ofrecerá una cena privada a la canciller alemana, Angela Merkel, quien hará una visita de Estado a México.
Nota de Claudia Herrera Beltrán, La Jornada, 18 de mayo.
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