Las dos compañías han estado en una disputa desde 2005, cuando Televisa inició un pleito contra Univision en una corte de California, en el que alega incumplimiento del acuerdo de programación que expira en 2017 y demanda el pago de regalías.
A finales de abril, las dos empresas habían solicitado un aplazamiento del juicio hasta julio.
Este es la segunda ocasión en el año en que ambas empresas solicitan el aplazamiento del juicio, en lo que analistas interpretan como una ventana para llegar a un posible acuerdo fuera de tribunales.
La batalla legal de tres años se inició cuando Jerrold Perenchio, entonces presidente ejecutivo de Univision, designó a uno de sus cercanos colaboradores como su sucesor, destruyendo las esperanzas de Televisa de colocar a uno de los suyos al frente de la empresa estadunidense.
Poco después Televisa inició el pleito contra Univision por incumplimiento del acuerdo de programación y demandando el pago de las regalías.
Univision demandó a Televisa en agosto de 2005, argumentando que su socio había tratado de sabotear sus operaciones.
El pleito empeoró luego de que Televisa perdió la carrera por la compra de Univision contra un grupo de inversionistas liderados por el magnate de los medios Haim Saban, que ofreció 12 mil 300 millones de dólares. Televisa también vendió su 11 por ciento de participación en Univision.
A finales de abril, las dos empresas habían solicitado un aplazamiento del juicio hasta julio.
Este es la segunda ocasión en el año en que ambas empresas solicitan el aplazamiento del juicio, en lo que analistas interpretan como una ventana para llegar a un posible acuerdo fuera de tribunales.
La batalla legal de tres años se inició cuando Jerrold Perenchio, entonces presidente ejecutivo de Univision, designó a uno de sus cercanos colaboradores como su sucesor, destruyendo las esperanzas de Televisa de colocar a uno de los suyos al frente de la empresa estadunidense.
Poco después Televisa inició el pleito contra Univision por incumplimiento del acuerdo de programación y demandando el pago de las regalías.
Univision demandó a Televisa en agosto de 2005, argumentando que su socio había tratado de sabotear sus operaciones.
El pleito empeoró luego de que Televisa perdió la carrera por la compra de Univision contra un grupo de inversionistas liderados por el magnate de los medios Haim Saban, que ofreció 12 mil 300 millones de dólares. Televisa también vendió su 11 por ciento de participación en Univision.
Reuters, Milenio, 19 de junio.
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