qtkeEn la defensa de su iniciativa de reforma energética, el presidente Felipe Calderón manifestó ayer que es “verdaderamente preocupante” lo que ocurre en la industria petrolera, pues de 3.3 millones de barriles diarios que se producían hace cuatro años, se bajó a 2 millones 700 mil.
Dijo que estas cifras pueden ser constatadas y auditadas, y explicó que dicha situación se debe a la declinación del yacimiento de Cantarell, el cual generó 62 por ciento del crudo en el país.
Por tal motivo, advirtió que es necesario sustituir dicho campo, pero se requiere “no aumentar, sino multiplicar la inversión y las obras de perforación y exploración, lo que puede lograrse si se da más facultades a Pemex para adquirir, contratar y negociar tecnología”.
Luego de inaugurar la Reunión de Directivos de la Administración Pública Federal, el Presidente explicó que su propuesta plantea que la paraestatal pueda contratar a quien haga una refinería y la opere. “Pemex va a seguir siendo dueña del petróleo y va a decir al operador: dame la gasolina que produzcas, te voy a pagar una cuota”.
Añadió que una refinería nueva puede costar entre 8 y 10 mil millones de dólares, gasto que “no pensamos quitar a educación, salud, carreteras, seguridad pública ni muchas otras áreas”.
Sobre el tema, el secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, dijo que las fuerzas políticas se comprometieron a dictaminar de inmediato la iniciativa, una vez que concluya el debate en el Senado.
Dijo que estas cifras pueden ser constatadas y auditadas, y explicó que dicha situación se debe a la declinación del yacimiento de Cantarell, el cual generó 62 por ciento del crudo en el país.
Por tal motivo, advirtió que es necesario sustituir dicho campo, pero se requiere “no aumentar, sino multiplicar la inversión y las obras de perforación y exploración, lo que puede lograrse si se da más facultades a Pemex para adquirir, contratar y negociar tecnología”.
Luego de inaugurar la Reunión de Directivos de la Administración Pública Federal, el Presidente explicó que su propuesta plantea que la paraestatal pueda contratar a quien haga una refinería y la opere. “Pemex va a seguir siendo dueña del petróleo y va a decir al operador: dame la gasolina que produzcas, te voy a pagar una cuota”.
Añadió que una refinería nueva puede costar entre 8 y 10 mil millones de dólares, gasto que “no pensamos quitar a educación, salud, carreteras, seguridad pública ni muchas otras áreas”.
Sobre el tema, el secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, dijo que las fuerzas políticas se comprometieron a dictaminar de inmediato la iniciativa, una vez que concluya el debate en el Senado.
Georgina Saldierna, La Jornada, 7 de junio.
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