Que queden claras la necesidades de Pemex

Abandonada a su suerte, rezagada en infraestructura, urgida de inversiones, necesitada de un mejor marco regulatorio y, por si fuera poco, el tiempo juega en contra. Éste es un diagnóstico más de Petróleos Mexicanos trazado en el Senado de la República. Esta vez ocho especialistas acudieron al recinto de Xicoténcatl para debatir sobre el tema: "Transporte, Almacenamiento y Distribución de Hidrocarburos y Derivados"; la participación o no de la iniciativa privada es estas actividades, un punto central. La paraestatal, en voz de su subdirector de Distribución en Pemex Refinación, Mario Nieto Garza, defendió las iniciativas presidenciales, bajo el argumento de que la inversión privada sería complementaria a la que realiza la paraestatal, "como se hace en todos los mercados energéticos del mundo", atajó. El representante de los gasolineros del país, Juan Pablo González Córdova, puntualizó que nadie quiere un monopolio del Estado; pero tampoco que se pase de un monopolio de Estado a un oligopolio o monopolios privados. Mientras que para el investigador Raúl Monteforte Sánchez es imperativo que el Estado mexicano privilegie a la industria nacional. Isidro Rodríguez Carbajal, miembro del Grupo Ingenieros de la Constitución del 17, aseguró que es "inadmisible" que las iniciativas del Ejecutivo propongan que "en un excelente negocio para la nación" se compartan utilidades con las compañías extranjeras. ¿Riesgos y vulnerabilidad por instalaciones deficientes? También fue tema del debate. Mientras, a unos pasos de la -aún- oficina del panista Santiago Creel, presidente del Senado, el director general de Pemex, Jesús Reyes Heroles, nuevamente se dio tiempo para hablar con la prensa. Para Pemex -dijo el funcionario que acudió por segunda ocasión como espectador al foro- cada día que pasa es más complicado. Y es que segundos antes se le había cuestionado sobre el plazo que tiene Pemex para que se apruebe la reforma, si sería antes de septiembre. Su deseo: que se procese lo más rápido posible la reforma. Pero reconoció que no es la paraestatal la que determina los tiempos, sino el Congreso. Su balance: que se dejaron claras las necesidades de Petróleos Mexicanos en el debate, que se necesita que el sistema de transporte, almacenamiento y distribución funcionen lo mejor posible.

Mauricio Rubí, El Economista, 18 de junio.