Viven una 'Yidis-novela'

BOGOTÁ.- El Presidente de Colombia, Álvaro Uribe, ha protagonizado en los últimos días lo que por muchos fue visto como una suerte de "Yidis-telenovela", en alusión al escándalo que desató la ex congresista Yidis Medina al denunciar supuestas prebendas del Gobierno para que en 2004 apoyara la reelección presidencial.

La polémica estalló el pasado 20 de abril, al transmitirse una entrevista -realizada en agosto de 2004- en la cual la entonces congresista denunció que funcionarios del Gobierno le ofrecieron cargos públicos a cambio de votar a favor de una reforma que permitió la reelección presidencial inmediata, de la cual se benefició Uribe.

Alegando temer por su vida, Medina no autorizó que la entrevista fuera transmitida en su momento, pero como los funcionarios supuestamente implicados no cumplieron sus promesas, dio luz verde a su posterior difusión.

Tras autoinculparse y luego de que la Corte Suprema de Justicia ordenara su captura por el presunto delito de cohecho, Medina se entregó, se presentó ante el alto tribunal y fue recluida en prisión, mientras el Gobierno negó las acusaciones.

"El Gobierno persuade; no presiona ni compra conciencias. El Gobierno respeta el derecho de la participación, pero no tolera la corrupción", había reiterado Uribe.

La semana pasada el Mandatario llevó su defensa a la esfera mediática al enfrascarse en un intercambio de comunicados con Medina que buscaban demostrar que la ex congresista mintió al negar que llamó a familiares de Uribe a manera de chantaje.

"¿En qué consistió el chantaje? Llamó a miembros de mi familia a decirles que le dijeran al Presidente que necesitaba hablar con él, porque iba a pasar algo muy grave. Al ser informado, pedí que no se le volviera a pasar al teléfono", expuso Uribe el martes pasado en la mañana, para por la noche precisar que Medina llamó a su hijo Tomás tres veces.

El jueves Uribe presentó registros de las llamadas realizadas en julio del año pasado y precisó el número desde el cual llamó Medina.

El viernes, el abogado de Medina reconoció que su cliente mintió al decir que no llamó al hijo del Presidente. Y la opinión pública colombiana sacó conclusiones: según una encuesta del noticiero CM&, 78.3 por ciento de los encuestados cree que la revelación de Medina afecta su credibilidad sobre las denuncias de compra de voto.

Pese a la popularidad de 84 por ciento que Uribe mantiene, muchos se mostraron críticos de la pelea mediático que protagonizó.

En su editorial del viernes pasado, el diario bogotano El Tiempo, planteó: "La confusión aumenta cuando el propio Presidente encabeza la curiosa cruzada mediática. Sus reiteradas entrevistas con periodistas amigos por radio y televisión y sus heterodoxos 'comunicados públicos bajo juramento' generan más preguntas de las que intentan contestar".

"Y hasta suspicacias: ¿tiene la 'Yidispolítica' la gravedad y dimensión que amerita semejante ofensiva propagandística? ¿Se merece una figura como Medina, que encarna todo lo venal y mediocre de la política colombiana, la categoría de 'sparring' de Uribe, un Presidente en el que cree la gran mayoría de los ciudadanos?", amplió.

El diario vio fuera de toda lógica las alusiones a la familia presidencial y consideró que lo sensato sería delegar el debate en figuras de menor nivel y canalizar las versiones a las instancias judiciales.

"La causa del Presidente saldría mejor librada si se baja el tono a la polémica pública y a un show mediático que sólo contribuye a un desgaste inútil de su investidura", expuso el editorial.

Una comisión del Congreso evalúa si la denuncia de Medina amerita citar al Presidente a rendir testimonio.

Octavio Pineda, corresponsal, Reforma, 17 de junio.


0 Responses to "Viven una 'Yidis-novela'"