La bancada del PRD en el Senado prepara un paquete de 10 reformas para integrar el plan energético que presentarán al Congreso el próximo 25 de agosto o en la primera sesión del periodo ordinario.
De acuerdo con un documento interno, del que REFORMA tiene copia, los legisladores del sol azteca preparan cambios y adiciones a ocho leyes, así como la elaboración de textos totalmente renovados para la Ley Orgánica de Pemex y la Ley de la Comisión Nacional de Energía.
Entre las propuestas que analizan, se encuentran cambios al sistema de gobierno de Pemex, que eliminan facultades del Ejecutivo, no sólo para el nombramiento los integrantes del Consejo de Administración, sino incluso para el director de la paraestatal.
"La dirección de Pemex recaerá en un director general, que será nombrado por el Ejecutivo federal y deberá ser ratificado por el Senado de la República, sin lo cual no podrá asumir el cargo", señala.
En el informe, entregado a los senadores perredistas, se confirma la intención de reducir de cinco a dos las posiciones del sindicato petrolero en el Consejo de Administración.
En rechazo a la propuesta del PRI, el proyecto contempla mantener a Pemex como un sólo organismo, e incluso nuevos candados para la creación, fusión o liquidación de entidades de su propiedad.
Para ello, será necesario notificar al Congreso, y cualquier cambio será objeto de control de la Auditoría Superior de la Federación.
Con la intención de garantizar mayor control sobre las decisiones de Pemex, el Consejo de Administración conformará un Comité Técnico de Adquisiciones, que tendrá "amplias facultades" para conocer toda la documentación relacionada con los contratos y para hacer recomendaciones.
En ese renglón, el PRD propone que para la contratación de adquisiciones, arrendamientos, servicios y obras públicas, Pemex se apegue al artículo 134 de la Constitución.
"Tratándose de grandes proyectos, para la construcción de nuevas instalaciones de refinación, plantas petroquímicas, ductos y proyectos de exploración, desarrollo y producción de hidrocarburos, deberán observarse los siguientes criterios: "Un porcentaje creciente del contenido nacional a incorporar para cada proyecto; favorecer la integración de las cadenas productivas; la formación de recursos humanos; el desarrollo científico y tecnológico nacional y la promoción de nuevas ramas industriales del País", indica.
Por otro lado, en la reforma a la Ley de Presupuesto, los perredistas buscan regular la asignación de los excedentes petroleros, para que sólo el 20 por ciento sea enviado al Fondo de Estabilización, mientras que el 70 por ciento restante se destine a programas y proyectos de inversión en infraestructura de Pemex.
Para garantizar la autonomía de gestión de la empresa, el PRD plantea que el decreto presupuestal sea elaborado por Pemex y remitido a la Cámara de Diputados para su aprobación, sin modificación de Hacienda.
Además de crear la "definición de superávit de operación", para un nuevo esquema de financiamiento, proponen que la deuda de Pidiregas sea revisada, auditada y "adoptada" como parte de la contabilidad del Gobierno federal, en calidad de "deuda pública interna".
Avanzan
El proyecto del PRD en materia energética contempla reformar las siguientes leyes:
· Reglamentaria del artículo 27 constitucional en el ramo del petróleo.
· Orgánica de la Administración Pública Federal.
· Entidades Paraestatales.
· Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.
· Planeación.
· Obras y Servicios.
· Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios.
· Derechos.
· Orgánica de Pemex (nueva).
· Comisión Nacional de Energía (nueva).
De acuerdo con un documento interno, del que REFORMA tiene copia, los legisladores del sol azteca preparan cambios y adiciones a ocho leyes, así como la elaboración de textos totalmente renovados para la Ley Orgánica de Pemex y la Ley de la Comisión Nacional de Energía.
Entre las propuestas que analizan, se encuentran cambios al sistema de gobierno de Pemex, que eliminan facultades del Ejecutivo, no sólo para el nombramiento los integrantes del Consejo de Administración, sino incluso para el director de la paraestatal.
"La dirección de Pemex recaerá en un director general, que será nombrado por el Ejecutivo federal y deberá ser ratificado por el Senado de la República, sin lo cual no podrá asumir el cargo", señala.
En el informe, entregado a los senadores perredistas, se confirma la intención de reducir de cinco a dos las posiciones del sindicato petrolero en el Consejo de Administración.
En rechazo a la propuesta del PRI, el proyecto contempla mantener a Pemex como un sólo organismo, e incluso nuevos candados para la creación, fusión o liquidación de entidades de su propiedad.
Para ello, será necesario notificar al Congreso, y cualquier cambio será objeto de control de la Auditoría Superior de la Federación.
Con la intención de garantizar mayor control sobre las decisiones de Pemex, el Consejo de Administración conformará un Comité Técnico de Adquisiciones, que tendrá "amplias facultades" para conocer toda la documentación relacionada con los contratos y para hacer recomendaciones.
En ese renglón, el PRD propone que para la contratación de adquisiciones, arrendamientos, servicios y obras públicas, Pemex se apegue al artículo 134 de la Constitución.
"Tratándose de grandes proyectos, para la construcción de nuevas instalaciones de refinación, plantas petroquímicas, ductos y proyectos de exploración, desarrollo y producción de hidrocarburos, deberán observarse los siguientes criterios: "Un porcentaje creciente del contenido nacional a incorporar para cada proyecto; favorecer la integración de las cadenas productivas; la formación de recursos humanos; el desarrollo científico y tecnológico nacional y la promoción de nuevas ramas industriales del País", indica.
Por otro lado, en la reforma a la Ley de Presupuesto, los perredistas buscan regular la asignación de los excedentes petroleros, para que sólo el 20 por ciento sea enviado al Fondo de Estabilización, mientras que el 70 por ciento restante se destine a programas y proyectos de inversión en infraestructura de Pemex.
Para garantizar la autonomía de gestión de la empresa, el PRD plantea que el decreto presupuestal sea elaborado por Pemex y remitido a la Cámara de Diputados para su aprobación, sin modificación de Hacienda.
Además de crear la "definición de superávit de operación", para un nuevo esquema de financiamiento, proponen que la deuda de Pidiregas sea revisada, auditada y "adoptada" como parte de la contabilidad del Gobierno federal, en calidad de "deuda pública interna".
Avanzan
El proyecto del PRD en materia energética contempla reformar las siguientes leyes:
· Reglamentaria del artículo 27 constitucional en el ramo del petróleo.
· Orgánica de la Administración Pública Federal.
· Entidades Paraestatales.
· Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.
· Planeación.
· Obras y Servicios.
· Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios.
· Derechos.
· Orgánica de Pemex (nueva).
· Comisión Nacional de Energía (nueva).
Claudia Guerrero y Érika Hernández, Reforma, 11 de agosto.
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