El convaleciente ex presidente Fidel Castro calificó ayer de “hipócrita” el anuncio de Estados Unidos de que está listo para establecer un puente aéreo con La Habana, a fin de transportar productos de primera necesidad por un valor de hasta cinco millones de dólares. En tanto, el presidente Raúl Castro recorrió la arrasada Isla de la Juventud, uno de los cinco territorios cubanos más afectados por los huracanes Gustav e Ike , que dejaron pérdidas nacionales estimadas en cinco mil millones de dólares.
Bajo el título “El papel de bueno ¿a costa de quién?”, el histórico líder hizo hincapié en una de sus habituales columnas de opinión publicada ayer por el periódico oficial Granma, en los cargamentos de alimentos y mensajes que enviaron decenas de naciones amigas como México, Rusia, Brasil, Ecuador y Venezuela hasta organismos internacionales como el Programa Mundial de Alimentos.
“Es obvio que el gobierno de EU no puede comprender que la dignidad de un pueblo no tiene precio”, dijo Castro en referencia a los anuncios de asistencia de ese país y luego de reiterar que Cuba “no puede aceptar una donación del gobierno que nos bloquea”. Castro consideró que “la ola de solidaridad con la isla, que abarca a países grandes y pequeños, con recursos y hasta sin recursos, desaparecería el día que Cuba dejara de ser digna”.
Prominentes artistas locales, como Alicia Alonso y Silvio Rodríguez, llamaron en tanto a sus colegas del resto del mundo a sumarse a la demanda de que Estados Unidos levante su bloqueo de casi medio siglo al país.
Al mismo tiempo, informes telefónicos desde Miami a este diario indicaron que iglesias de esa ciudad de Florida realizan una “masiva campaña” de recogida de ayuda para la isla, sin que se tenga “muy claro cómo se podrá enviar”.
El departamento de Estado de Estados Unidos hizo llegar a la prensa extranjera en La Habana un listado de las acciones para “asistir el pueblo cubano” entre las que figura una moratoria de 90 días para que ONGs puedan tramitar ayuda “en cantidades de hasta diez millones de usd por organización”.
Washington además autorizó a sus compañías a realizar ventas por 250 millones de usd, en lo que parece su respuesta a una solicitud cubana en tal sentido. El permiso no contempla créditos, pero abarca materiales de construcción y alimentos.
Por su parte, el vicepresidente de Rusia, Igor Ivanovich, examinó el lunes con Raúl Castro fórmulas para “ampliar la colaboración” en sectores claves como níquel y petróleo. En una línea similar trabajan Venezuela, Brasil, España, Ecuador, Honduras y la ONU. La prometida ayuda de México aún se espera.
Bajo el título “El papel de bueno ¿a costa de quién?”, el histórico líder hizo hincapié en una de sus habituales columnas de opinión publicada ayer por el periódico oficial Granma, en los cargamentos de alimentos y mensajes que enviaron decenas de naciones amigas como México, Rusia, Brasil, Ecuador y Venezuela hasta organismos internacionales como el Programa Mundial de Alimentos.
“Es obvio que el gobierno de EU no puede comprender que la dignidad de un pueblo no tiene precio”, dijo Castro en referencia a los anuncios de asistencia de ese país y luego de reiterar que Cuba “no puede aceptar una donación del gobierno que nos bloquea”. Castro consideró que “la ola de solidaridad con la isla, que abarca a países grandes y pequeños, con recursos y hasta sin recursos, desaparecería el día que Cuba dejara de ser digna”.
Prominentes artistas locales, como Alicia Alonso y Silvio Rodríguez, llamaron en tanto a sus colegas del resto del mundo a sumarse a la demanda de que Estados Unidos levante su bloqueo de casi medio siglo al país.
Al mismo tiempo, informes telefónicos desde Miami a este diario indicaron que iglesias de esa ciudad de Florida realizan una “masiva campaña” de recogida de ayuda para la isla, sin que se tenga “muy claro cómo se podrá enviar”.
El departamento de Estado de Estados Unidos hizo llegar a la prensa extranjera en La Habana un listado de las acciones para “asistir el pueblo cubano” entre las que figura una moratoria de 90 días para que ONGs puedan tramitar ayuda “en cantidades de hasta diez millones de usd por organización”.
Washington además autorizó a sus compañías a realizar ventas por 250 millones de usd, en lo que parece su respuesta a una solicitud cubana en tal sentido. El permiso no contempla créditos, pero abarca materiales de construcción y alimentos.
Por su parte, el vicepresidente de Rusia, Igor Ivanovich, examinó el lunes con Raúl Castro fórmulas para “ampliar la colaboración” en sectores claves como níquel y petróleo. En una línea similar trabajan Venezuela, Brasil, España, Ecuador, Honduras y la ONU. La prometida ayuda de México aún se espera.
Manuel Juan Somoza en La habana, Milenio, 18 de septiembre.
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