Bogotá, 5 de septiembre. El mandatario colombiano Alvaro Uribe llamó al presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Colombia, Francisco Ricaurte, a dejar de hacer declaraciones “infundadas y temerarias” y comenzar la discusión de los temas verdaderamente importantes de la justicia y la política, en una nueva escalada del conflicto institucional en el país.
“La verdadera urgencia aquí no es lanzar declaraciones infundadas, hacer declaraciones temerarias, sino entrar a discutir los temas de la justicia, de la reforma política”, dijo Uribe en entrevista con la radiodifusora RCN.
De esta manera continúa el choque entre los poderes Ejecutivo y Judicial, iniciado a raíz del caso de la parapolítica, en que unos 70 legisladores –la mayoría de la coalición oficialista– son acusados de vínculos con grupos paramilitares de ultraderecha.
En días recientes, el mandatario se dijo “abierto a la discusión”, pero al mismo tiempo criticó el rechazo del tribunal a un proyecto de reforma judicial que envió al Congreso.
Ricaurte, mientras tanto, advirtió que “tener la mayoría en los sondeos no es garantía de que se esté gobernando democráticamente”, y dijo que Uribe amenaza la independencia judicial de Colombia al llamar “prevaricadores y golpistas” a miembros de la corte.
La intensidad del conflicto entre el presidente y los jueces motivó ya que el relator especial de la comisión de derechos humanos de Naciones Unidas, Leandro Despouy, llamara a la mesura.
“Creo que hay necesidad de una instancia de diálogo profundo, abierto, sincero y transparente, pero al mismo tiempo cuidadoso y responsable”, dijo el funcionario durante un acto en la ciudad de Cartagena de Indias (noroeste).
Por otra parte, Uribe insistió en que su tarea principal es fortalecer su gobierno y no buscar su segunda relección, ya que siente “miedo” de perpetuarse en el poder.
Además, anunció que empezará a sugerir los nombres de algunos dirigentes que en su opinión tienen la capacidad de sucederlo en 2010. Entre ellos, mencionó al ex ministro de Justicia Carlos Holguín, al ministro de Agricultura Andrés Felipe Arias y al titular de Defensa, Juan Manuel Santos.
En otro orden, hoy fue capturado en Caracas el ex ministro colombiano Alvaro Araújo Noguera, acusado de tener nexos con grupos paramilitares, y quien será deportado a Bogotá en las próximas horas, informaron fuentes diplomáticas venezolanas.
En Madrid, mientras tanto, fue aprehendido Edgar Guillermo Vallejo, alias Beto el Gitano, considerado el “traficante de drogas colombiano más buscado del mundo”, sobre todo por la plolicía de Estados Unidos.
“La verdadera urgencia aquí no es lanzar declaraciones infundadas, hacer declaraciones temerarias, sino entrar a discutir los temas de la justicia, de la reforma política”, dijo Uribe en entrevista con la radiodifusora RCN.
De esta manera continúa el choque entre los poderes Ejecutivo y Judicial, iniciado a raíz del caso de la parapolítica, en que unos 70 legisladores –la mayoría de la coalición oficialista– son acusados de vínculos con grupos paramilitares de ultraderecha.
En días recientes, el mandatario se dijo “abierto a la discusión”, pero al mismo tiempo criticó el rechazo del tribunal a un proyecto de reforma judicial que envió al Congreso.
Ricaurte, mientras tanto, advirtió que “tener la mayoría en los sondeos no es garantía de que se esté gobernando democráticamente”, y dijo que Uribe amenaza la independencia judicial de Colombia al llamar “prevaricadores y golpistas” a miembros de la corte.
La intensidad del conflicto entre el presidente y los jueces motivó ya que el relator especial de la comisión de derechos humanos de Naciones Unidas, Leandro Despouy, llamara a la mesura.
“Creo que hay necesidad de una instancia de diálogo profundo, abierto, sincero y transparente, pero al mismo tiempo cuidadoso y responsable”, dijo el funcionario durante un acto en la ciudad de Cartagena de Indias (noroeste).
Por otra parte, Uribe insistió en que su tarea principal es fortalecer su gobierno y no buscar su segunda relección, ya que siente “miedo” de perpetuarse en el poder.
Además, anunció que empezará a sugerir los nombres de algunos dirigentes que en su opinión tienen la capacidad de sucederlo en 2010. Entre ellos, mencionó al ex ministro de Justicia Carlos Holguín, al ministro de Agricultura Andrés Felipe Arias y al titular de Defensa, Juan Manuel Santos.
En otro orden, hoy fue capturado en Caracas el ex ministro colombiano Alvaro Araújo Noguera, acusado de tener nexos con grupos paramilitares, y quien será deportado a Bogotá en las próximas horas, informaron fuentes diplomáticas venezolanas.
En Madrid, mientras tanto, fue aprehendido Edgar Guillermo Vallejo, alias Beto el Gitano, considerado el “traficante de drogas colombiano más buscado del mundo”, sobre todo por la plolicía de Estados Unidos.
AFP, DPA y Reuters, La Jornada, 6 de septiembre.
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