La coordinación nacional del Frente Amplio Progresista (FAP) informó que los partidos que lo integran (PRD, PT y Convergencia) acordaron participar juntos en las elecciones intermedias del próximo año.
Porfirio Muñoz Ledo admitió que aún persisten diferencias entre los dirigentes de los partidos. Sin embargo, el diputado petista Silvano Garay Ulloa dijo que “es un hecho que la corriente Nueva Izquierda –a la cual pertenece el presidente sustituto del sol azteca, Guadalupe Acosta Naranjo– ya aceptó que la coordinación del frente la tenga el ex embajador”.
Después de que en dos ocasiones Acosta Naranjo no pudo reunirse con los presidentes nacionales de Convergencia, Luis Maldonado, y del PT, Alberto Anaya, para platicar en torno a este asunto, en un intento por dejar al margen de una negociación a Muñoz Ledo, el Comité Ejecutivo Nacional del PRD determinó que su secretaria general, Martha Dalia Gastélum, acudiera a la reunión del FAP celebrada el martes para formalizar el acuerdo.
Ayer, Acosta Naranjo envió una carta a sus correligionarios para expresar la determinación del partido de “continuar fortaleciendo y proyectando al FAP como un espacio para el diálogo, la concertación y las alianzas con todas las fuerzas democráticas y progresistas de México que coincidan en la necesidad de una profunda transformación de nuestro país”.
También expresó respeto a la determinación de que el candidato del PT y Convergencia a la alcaldía de Acapulco, Luis Walton, sea reconocido como el del FAP, aunque “nosotros hubiéramos esperado el respaldo de nuestros aliados para enfrentar y resistir juntos los embates del PRI y del PAN”.
Aclaró a Luis Maldonado y Alberto Anaya que pese a la oposición de perredistas por la designación de Muñoz Ledo como coordinador nacional del FAP, “no hemos planteado ni su desconocimiento ni su destitución”, y aclaró que respetarán el año que debe estar en el cargo.
“Quiero clarificar que estas discrepancias relacionadas con la actuación del compañero mencionado no implican, de parte del PRD, la ruptura o la desintegración del FAP”, señaló el dirigente, quien además expresó su disposición de reactivar la comisión ejecutiva del bloque, integrada por los presidentes nacionales de los tres partidos que lo conforman.
Asimismo, anunció que comenzó pláticas con el Partido Socialdemócrata para explorar “la posibilidad de una actuación conjunta en las próximas elecciones federales”.
Porfirio Muñoz Ledo admitió que aún persisten diferencias entre los dirigentes de los partidos. Sin embargo, el diputado petista Silvano Garay Ulloa dijo que “es un hecho que la corriente Nueva Izquierda –a la cual pertenece el presidente sustituto del sol azteca, Guadalupe Acosta Naranjo– ya aceptó que la coordinación del frente la tenga el ex embajador”.
Después de que en dos ocasiones Acosta Naranjo no pudo reunirse con los presidentes nacionales de Convergencia, Luis Maldonado, y del PT, Alberto Anaya, para platicar en torno a este asunto, en un intento por dejar al margen de una negociación a Muñoz Ledo, el Comité Ejecutivo Nacional del PRD determinó que su secretaria general, Martha Dalia Gastélum, acudiera a la reunión del FAP celebrada el martes para formalizar el acuerdo.
Ayer, Acosta Naranjo envió una carta a sus correligionarios para expresar la determinación del partido de “continuar fortaleciendo y proyectando al FAP como un espacio para el diálogo, la concertación y las alianzas con todas las fuerzas democráticas y progresistas de México que coincidan en la necesidad de una profunda transformación de nuestro país”.
También expresó respeto a la determinación de que el candidato del PT y Convergencia a la alcaldía de Acapulco, Luis Walton, sea reconocido como el del FAP, aunque “nosotros hubiéramos esperado el respaldo de nuestros aliados para enfrentar y resistir juntos los embates del PRI y del PAN”.
Aclaró a Luis Maldonado y Alberto Anaya que pese a la oposición de perredistas por la designación de Muñoz Ledo como coordinador nacional del FAP, “no hemos planteado ni su desconocimiento ni su destitución”, y aclaró que respetarán el año que debe estar en el cargo.
“Quiero clarificar que estas discrepancias relacionadas con la actuación del compañero mencionado no implican, de parte del PRD, la ruptura o la desintegración del FAP”, señaló el dirigente, quien además expresó su disposición de reactivar la comisión ejecutiva del bloque, integrada por los presidentes nacionales de los tres partidos que lo conforman.
Asimismo, anunció que comenzó pláticas con el Partido Socialdemócrata para explorar “la posibilidad de una actuación conjunta en las próximas elecciones federales”.
Alma Muñoz, La Jornada, 11 de septiembre.
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