MONTERREY.-El Ejército rindió ayer un homenaje luctuoso a los 11 militares que han caído a manos del crimen organizado, dejando clara su respuesta: "Redoblaremos esfuerzos en la lucha".
En el acto, realizado en la Séptima Zona Militar, los soldados caídos estuvieron representados por 10 féretros vacíos, cada uno cubierto con una Bandera de México. Los familiares de tres militares llevaban consigo urnas con cenizas.
Al hablar ante autoridades y familiares, Juan José Juárez Ramos, comandante del 22 Batallón de Infantería, dijo que, lejos de debilitarlos, este tipo de ataques los hacen más fuertes.
"No hay espacio para debilidades o temores", expresó el mando, en cuyo batallón estaban siete de las víctimas.
"Somos y seguiremos siendo los garantes de la seguridad nacional y del bienestar de nuestra sociedad mexicana", agregó.
"El ejemplo que han demostrado con su debida actitud nuestros compañeros de armas fenecidos, así lo certifican. Este ejemplo nos obliga a los integrantes de las Fuerzas Armadas a redoblar esfuerzos en la lucha contra el crimen organizado", añadió.
"Este ejemplo nos hace más fuertes, nos une y nos infunde mayor valor en el cumplimiento de nuestras misiones, así garantizaremos la tranquilidad de los ciudadanos, la seguridad de la población y el estado de derecho de nuestra nación", aseguró.
Los soldados homenajeados, entre los que se encuentra uno que estaba retirado, son parte de los 14 cuerpos hallados en la semana comprendida entre el miércoles 15 de octubre y el pasado miércoles 22.
Todos los militares fueron encontrados en circunstancias similares: Vestidos de civil, degollados y apuñalados en tórax y abdomen, además de que presentaban huellas de haber sido arrastrados.
Fuentes del Ejército aseguraron que cinco de ellos fueron asesinados cuando se encontraban investigando el crimen de sus compañeros en el bar Givenchy's, en Monterrey.
Ayer, después de que un soldado leyó los nombres de sus 11 compañeros, tomó la palabra el joven Juan Lara Hernández, hermano de una víctima y primo de otro.
"(Los asesinos) quizá no han visualizado que tarde o temprano caerán en manos de la justicia y se pondrán detrás de las rejas para pagar por los crímenes cometidos", expresó.
La ceremonia fue encabezada por el Gobernador de Nuevo León, Natividad González Parás; el Comandante de la Cuarta Región Militar, Javier del Real Magallanes, y el Comandante de la Séptima Zona Militar, René Aguilar, junto con funcionarios estatales y federales.
Ayer, personal de la SIEDO que llegó el martes a Monterrey ya empezó a revisar los expedientes sobre los homicidios que están en la delegación estatal de la PGR, y en los próximos días determinarían si se llevan las investigaciones a la Ciudad de México.
En el acto, realizado en la Séptima Zona Militar, los soldados caídos estuvieron representados por 10 féretros vacíos, cada uno cubierto con una Bandera de México. Los familiares de tres militares llevaban consigo urnas con cenizas.
Al hablar ante autoridades y familiares, Juan José Juárez Ramos, comandante del 22 Batallón de Infantería, dijo que, lejos de debilitarlos, este tipo de ataques los hacen más fuertes.
"No hay espacio para debilidades o temores", expresó el mando, en cuyo batallón estaban siete de las víctimas.
"Somos y seguiremos siendo los garantes de la seguridad nacional y del bienestar de nuestra sociedad mexicana", agregó.
"El ejemplo que han demostrado con su debida actitud nuestros compañeros de armas fenecidos, así lo certifican. Este ejemplo nos obliga a los integrantes de las Fuerzas Armadas a redoblar esfuerzos en la lucha contra el crimen organizado", añadió.
"Este ejemplo nos hace más fuertes, nos une y nos infunde mayor valor en el cumplimiento de nuestras misiones, así garantizaremos la tranquilidad de los ciudadanos, la seguridad de la población y el estado de derecho de nuestra nación", aseguró.
Los soldados homenajeados, entre los que se encuentra uno que estaba retirado, son parte de los 14 cuerpos hallados en la semana comprendida entre el miércoles 15 de octubre y el pasado miércoles 22.
Todos los militares fueron encontrados en circunstancias similares: Vestidos de civil, degollados y apuñalados en tórax y abdomen, además de que presentaban huellas de haber sido arrastrados.
Fuentes del Ejército aseguraron que cinco de ellos fueron asesinados cuando se encontraban investigando el crimen de sus compañeros en el bar Givenchy's, en Monterrey.
Ayer, después de que un soldado leyó los nombres de sus 11 compañeros, tomó la palabra el joven Juan Lara Hernández, hermano de una víctima y primo de otro.
"(Los asesinos) quizá no han visualizado que tarde o temprano caerán en manos de la justicia y se pondrán detrás de las rejas para pagar por los crímenes cometidos", expresó.
La ceremonia fue encabezada por el Gobernador de Nuevo León, Natividad González Parás; el Comandante de la Cuarta Región Militar, Javier del Real Magallanes, y el Comandante de la Séptima Zona Militar, René Aguilar, junto con funcionarios estatales y federales.
Ayer, personal de la SIEDO que llegó el martes a Monterrey ya empezó a revisar los expedientes sobre los homicidios que están en la delegación estatal de la PGR, y en los próximos días determinarían si se llevan las investigaciones a la Ciudad de México.
Daniel Flores y José García corresponsales, Reforma, 25 de octubre.
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