Organizadores de una marcha de protesta indígena que recorre el suroeste colombiano en reclamo de sus tierras, decidieron la noche del martes hacer una pausa, luego de la muerte de dos de sus integrantes durante un enfrentamientos con la policía.
La Consejera Mayor del Comité Regional Indígena del departamento de Cauca (CRIC), Aída Quilpue, dijo a radio Caracol que la marcha que ayer llegó a la localidad de Santander de Quilichao para reanudar hoy su marcha con los cuerpos de los dos caídos en la cabeza de la protesta.
“Vamos a esperar aquí a indígenas del (departamento) Huila y Nariño, y a organizaciones de mujeres que se sumarán a la marcha, y vamos a revisar lo sucedido con la muerte de dos personas”, dijo Quilcue.
Los decesos se registraron ayer cuando indígenas de las localidades de Caloto y Corinto, del departamento de Cauca, se enfrentaron con el escuadrón antimotines de la policía en la vía Panamericana, a la altura del municipio de Villa Rica.
Los muertos fueron identi?cados por voceros indígenas como el campesino Jesús Antonio Neme y Eiver Ibisto, de la etnia Páez.
VERSIÓN. El reporte o?cial indicó que las dos personas perecieron al estallar un artefacto explosivo artesanal que pretendían arrojar a los policías que custodiaban la marcha, en un hecho en el que resultaron heridos otros cinco nativos.
Sin embargo, manifestantes señalan que murieron por disparos de los policías implicados en la reyerta.
El dirigente del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), Feliciano Valencia, aseguró que los cadáveres de los dos manifestantes serán llevados a la ciudad de Villa Rica, donde harán las denuncias ante la justicia por esta agresión.
ANTECEDENTES. Los cerca de 20 mil indígenas, que reclaman el cumplimiento de compromisos previos del gobierno como la compra y titulación de tierras y su autonomía, iniciaron la movilización el martes pasado en el municipio de Piendamó, en el departamento del Cauca, y tienen previsto concluirla el viernes en la ciudad de Cali, capital del departamento del Valle.
La caminata, que según los organizadores es “pacífica”, ocurre una semana después de que choques entre campesinos y policías en Cauca dejaran un indígena muerto y un centenar de heridos, incluido un oficial que perdió las manos por la explosión de un artefacto.
Por su parte, el gobierno colombiano denunció que las manifestaciones de la semana pasada estaban infiltradas por rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y que hacían parte de un plan de la oposición política para desestabilizar al presidente Álvaro Uribe.
Los indígenas rechazaron las acusaciones del gobierno y aseguraron que se trata de un movimiento de protesta pacífica y reivindicativa. Exigen eliminar el Plan Colombia y rechazar el Tratado de Libre Comercio entre EU y Colombia.
La Consejera Mayor del Comité Regional Indígena del departamento de Cauca (CRIC), Aída Quilpue, dijo a radio Caracol que la marcha que ayer llegó a la localidad de Santander de Quilichao para reanudar hoy su marcha con los cuerpos de los dos caídos en la cabeza de la protesta.
“Vamos a esperar aquí a indígenas del (departamento) Huila y Nariño, y a organizaciones de mujeres que se sumarán a la marcha, y vamos a revisar lo sucedido con la muerte de dos personas”, dijo Quilcue.
Los decesos se registraron ayer cuando indígenas de las localidades de Caloto y Corinto, del departamento de Cauca, se enfrentaron con el escuadrón antimotines de la policía en la vía Panamericana, a la altura del municipio de Villa Rica.
Los muertos fueron identi?cados por voceros indígenas como el campesino Jesús Antonio Neme y Eiver Ibisto, de la etnia Páez.
VERSIÓN. El reporte o?cial indicó que las dos personas perecieron al estallar un artefacto explosivo artesanal que pretendían arrojar a los policías que custodiaban la marcha, en un hecho en el que resultaron heridos otros cinco nativos.
Sin embargo, manifestantes señalan que murieron por disparos de los policías implicados en la reyerta.
El dirigente del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), Feliciano Valencia, aseguró que los cadáveres de los dos manifestantes serán llevados a la ciudad de Villa Rica, donde harán las denuncias ante la justicia por esta agresión.
ANTECEDENTES. Los cerca de 20 mil indígenas, que reclaman el cumplimiento de compromisos previos del gobierno como la compra y titulación de tierras y su autonomía, iniciaron la movilización el martes pasado en el municipio de Piendamó, en el departamento del Cauca, y tienen previsto concluirla el viernes en la ciudad de Cali, capital del departamento del Valle.
La caminata, que según los organizadores es “pacífica”, ocurre una semana después de que choques entre campesinos y policías en Cauca dejaran un indígena muerto y un centenar de heridos, incluido un oficial que perdió las manos por la explosión de un artefacto.
Por su parte, el gobierno colombiano denunció que las manifestaciones de la semana pasada estaban infiltradas por rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y que hacían parte de un plan de la oposición política para desestabilizar al presidente Álvaro Uribe.
Los indígenas rechazaron las acusaciones del gobierno y aseguraron que se trata de un movimiento de protesta pacífica y reivindicativa. Exigen eliminar el Plan Colombia y rechazar el Tratado de Libre Comercio entre EU y Colombia.
Agencias en Bogotá, Crónica, 23 de octubre.
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