Los contratos incentivados incluidos en la iniciativa de reforma energética tienen como objetivo una privatización abierta que atenta contra el artículo 27 constitucional, afirmó el diputado priista José Murat.
Por su parte, el senador priista Francisco Labastida se declaró en total desacuerdo con Murat, por lo que le pidió demostrar que existe una condición privatizadora encubierta en cualquiera de los aspectos de las iniciativas de reforma.
Durante una reunión entre diputados y senadores del PRI se discutieron una serie de propuestas en torno a la reforma energética, en la que los primeros dejaron ver sus inquietudes sobre los procesos de licitación y adjudicación de contratos que llevaría a cabo Pemex.
Ante esto, Murat sostuvo que es necesario estudiarlos a detalle, toda vez que se están matizando los contenidos de los contratos y en ellos persiste la privatización abierta.
“Me parece que hay que revisarlos, porque las licitaciones públicas, por invitación y adjudicación, se encuentran en un camino de privatización, no cerrado, sino abierto”.
Enfatizó en que de seguir con la tendencia de modificar las leyes secundarias del artículo 27 constitucional, se pondrían en riesgo los procesos de exploración y explotación de los hidrocarburos en México.
Ante esto, aseguró que a los diputados priistas no les quedan claras estas iniciativas, ya que los mecanismos que se proponen en torno a la refinación, transportación y ductos son “definiciones que van directamente a la privatización”.
Por lo que insistirán en la inclusión de una serie de propuestas que van encaminadas al “cuidado de los intereses nacionales”.
Por su parte, el senador priista Francisco Labastida se declaró en total desacuerdo con Murat, por lo que le pidió demostrar que existe una condición privatizadora encubierta en cualquiera de los aspectos de las iniciativas de reforma.
Durante una reunión entre diputados y senadores del PRI se discutieron una serie de propuestas en torno a la reforma energética, en la que los primeros dejaron ver sus inquietudes sobre los procesos de licitación y adjudicación de contratos que llevaría a cabo Pemex.
Ante esto, Murat sostuvo que es necesario estudiarlos a detalle, toda vez que se están matizando los contenidos de los contratos y en ellos persiste la privatización abierta.
“Me parece que hay que revisarlos, porque las licitaciones públicas, por invitación y adjudicación, se encuentran en un camino de privatización, no cerrado, sino abierto”.
Enfatizó en que de seguir con la tendencia de modificar las leyes secundarias del artículo 27 constitucional, se pondrían en riesgo los procesos de exploración y explotación de los hidrocarburos en México.
Ante esto, aseguró que a los diputados priistas no les quedan claras estas iniciativas, ya que los mecanismos que se proponen en torno a la refinación, transportación y ductos son “definiciones que van directamente a la privatización”.
Por lo que insistirán en la inclusión de una serie de propuestas que van encaminadas al “cuidado de los intereses nacionales”.
Nayeli González, Milenio, 14 de octubre.
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