Dallas, 7 de diciembre. La Patrulla Fronteriza se ha convertido en la mayor fuerza policial armada del gobierno federal de Estados Unidos, tras haber duplicado su tamaño en los pasados ocho años, ante el intento de frenar el cruce masivo de inmigrantes indocumentados.
La Patrulla Fronteriza ocupa el primer lugar entre las corporaciones federales por número de agentes con poderes para realizar arrestos, al acumular en sus filas hasta esta semana 18 mil 49 elementos.
Con ello, se informó, la corporación a cargo de la vigilancia de las fronteras sobrepasa a agencias como la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), la Oficina Federal de Prisiones, la Oficina del Alguacil de Estados Unidos y el Servicio Secreto y todas las demás fuerzas policiales federales.
El secretario de Seguridad Interna de Estados Unidos, Michael Chertoff, dijo esta semana en Washington que el incremento en el número de agentes ha ayudado a reducir por primera vez el flujo de indocumentados desde 2001.
“Por primera vez hemos revertido el moméntum y nos estamos moviendo en la dirección correcta”, indicó el funcionario, al anunciar que la Patrulla Fronteriza ha cumplido las metas de reclutamiento fijadas por la administración del presidente George W. Bush.
Cuando Bush llegó a la Casa Blanca en 2001, la Patrulla Fronteriza contaba con 9 mil agentes y esta semana su número llega a los 18 mil 49, precisó Chertoff.
La administración Bush comenzó a incrementar el número de agentes de la Patrulla Fronteriza tras los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.
Sin embargo, la contratación de agentes se aceleró luego de que en mayo de 2006 el presidente estadunidense lanzó el reto de contratar y entrenar en los siguientes tres años a 6 mil nuevos elementos para duplicar el tamaño de la corporación al final de su administración.
El llamado de Bush colocó a la Patrulla Fronteriza en una carrera contra el tiempo para sumar nuevos agentes y proporcionarles entrenamiento.
Chertoff dijo esta semana que el esfuerzo realizado permitió el cumplimiento de las metas trazadas por la administración federal.
“Hemos alcanzado la meta. Técnicamente el número al que debemos llegar es de 18 mil 319, de acuerdo con la Oficina de General de Contabilidad (GAO, el brazo de investigación del Congreso), pero con más de tres semanas para concluir 2008, eso está al alcance”, indicó el funcionario.
Varias organizaciones defensoras de derechos humanos han advertido que el rápido crecimiento de la Patrulla Fronteriza conlleva riesgos de mayor hostigamiento y abuso a los indocumentados, ante la falta de experiencia y entrenamiento adecuado de parte de los agentes.
T.J. Bonner, presidente del Consejo Nacional de la Patrulla Fronteriza, el sindicato de la corporación con unos 15 mil agentes afiliados, reconoce que la falta de experiencia y entrenamiento adecuado se ha extendido por el rápido crecimiento de la corporación.
Bonner advirtió que para fines de este año la mitad de los agentes que conforman la Patrulla Fronteriza tendrá menos de dos años de permanencia en el empleo.
La Patrulla Fronteriza ocupa el primer lugar entre las corporaciones federales por número de agentes con poderes para realizar arrestos, al acumular en sus filas hasta esta semana 18 mil 49 elementos.
Con ello, se informó, la corporación a cargo de la vigilancia de las fronteras sobrepasa a agencias como la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), la Oficina Federal de Prisiones, la Oficina del Alguacil de Estados Unidos y el Servicio Secreto y todas las demás fuerzas policiales federales.
El secretario de Seguridad Interna de Estados Unidos, Michael Chertoff, dijo esta semana en Washington que el incremento en el número de agentes ha ayudado a reducir por primera vez el flujo de indocumentados desde 2001.
“Por primera vez hemos revertido el moméntum y nos estamos moviendo en la dirección correcta”, indicó el funcionario, al anunciar que la Patrulla Fronteriza ha cumplido las metas de reclutamiento fijadas por la administración del presidente George W. Bush.
Cuando Bush llegó a la Casa Blanca en 2001, la Patrulla Fronteriza contaba con 9 mil agentes y esta semana su número llega a los 18 mil 49, precisó Chertoff.
La administración Bush comenzó a incrementar el número de agentes de la Patrulla Fronteriza tras los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.
Sin embargo, la contratación de agentes se aceleró luego de que en mayo de 2006 el presidente estadunidense lanzó el reto de contratar y entrenar en los siguientes tres años a 6 mil nuevos elementos para duplicar el tamaño de la corporación al final de su administración.
El llamado de Bush colocó a la Patrulla Fronteriza en una carrera contra el tiempo para sumar nuevos agentes y proporcionarles entrenamiento.
Chertoff dijo esta semana que el esfuerzo realizado permitió el cumplimiento de las metas trazadas por la administración federal.
“Hemos alcanzado la meta. Técnicamente el número al que debemos llegar es de 18 mil 319, de acuerdo con la Oficina de General de Contabilidad (GAO, el brazo de investigación del Congreso), pero con más de tres semanas para concluir 2008, eso está al alcance”, indicó el funcionario.
Varias organizaciones defensoras de derechos humanos han advertido que el rápido crecimiento de la Patrulla Fronteriza conlleva riesgos de mayor hostigamiento y abuso a los indocumentados, ante la falta de experiencia y entrenamiento adecuado de parte de los agentes.
T.J. Bonner, presidente del Consejo Nacional de la Patrulla Fronteriza, el sindicato de la corporación con unos 15 mil agentes afiliados, reconoce que la falta de experiencia y entrenamiento adecuado se ha extendido por el rápido crecimiento de la corporación.
Bonner advirtió que para fines de este año la mitad de los agentes que conforman la Patrulla Fronteriza tendrá menos de dos años de permanencia en el empleo.
Notimex, La Nornada, 8 de diciembre.
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