Nezahualcóyotl, Méx., 19 de enero. La lucha entre los partidos de la Revolución Democrática y Revolucionario Institucional se intensificará en el oriente del estado de México, especialmente en nueve de los 18 municipios de la zona; mientras, si el Partido Acción Nacional (PAN) mantiene la tendencia que ha mostrado desde 2003, seguiría siendo la tercera fuerza.
El PRD quiere carro completo, pero el PRI buscará retener Chimalhuacán y recuperar otros cuatro municipios, además de dos diputaciones. El primero llega mejor colocado y al parecer sus divisiones internas no le impedirán conservar Nezahualcóyotl, Valle de Chalco y Amecameca, de acuerdo con las tendencias observadas en 2003 y 2006.
En cambio, Chicoloapan y Chalco deparan al PRD distintos escenarios, pues gobierna ambos, pero no se ha consolidado; mientras en Tlalmanalco, Ixtapaluca y La Paz ha alternado con el PRI desde 2000.
La maquinaria perredista podría mantener también los distritos electorales 24, 25, 26, 32 y 41 de Nezahualcóyotl, y el 27 de Chalco y Valle de Chalco. Actualmente tiene las nueve diputaciones de la zona, pero en la última elección logró apenas una ventaja de 5 por ciento sobre el PRI en el distrito 28, de Amecameca. En el 40 de Ixtapaluca y Chicoloapan también ganó por poco.
La cúpula del PRD busca retener los nueve distritos y ocho municipios que ganó en 2006, pero también la alcaldía de Chimalhuacán, en manos del PRI. En este municipio ha crecido el voto duro por el sol azteca se dará preferencia a los candidatos “de unidad” gracias al pacto entre Nueva Izquierda, Alternativa Democrática Nacional y el Grupo de Acción Política.
Pero los estrategas del sol azteca tendrán más dificultades en el distrito 31, de La Paz y Chimalhuacán, donde el PRI ganó la diputación en 2000 y 2003 por amplio margen, pero perdió en 2006 por menos de medio punto.
En Chimalhuacán gobierna el PRI, pero de 2003 a 2006 el perredismo aumentó su votación de 17 a 38 por ciento, sólo seis puntos abajo del tricolor. En Chalco éste podría repuntar debido a los errores de sus adversarios.
El distrito 40, que comprende Ixtapaluca y Chicoloapan –ambos administrados por el PRD–, será uno de los más disputados, pues las votaciones en 2003 y 2006 fueron muy cerradas.
En 2003 el sol azteca ganó Chicoloapan por nueve puntos y en 2006 por menos de cuatro; ese mismo año le arrebató Ixtapaluca al PRI, con 17 puntos de ventaja. El gobierno estatal redujo los recursos al ayuntamiento y retrasó la única obra que se ejecuta –con recursos metropolitanos–, lo que ha causado inconformidad.
En Chicoloapan y Valle de Chalco buscan repetir los ex ediles perredistas Miguel Ángel Luna Munguía y Juan Manuel San Martín Hernández, respectivamente, y en Chimalhuacán, por el PRI se perfila el también ex edil Jesús Tolentino Román.
Nezahualcóyotl es un bastión del PRD que no depara mayores sorpresas, al igual que sus cinco distritos locales.
Además, las tribus pactaron postular a la diputada Juanita Bonilla como candidata de consenso a la alcaldía, la cual dejará Víctor Bautista López para buscar una diputación local y la coordinación de su bancada.
El actual diputado local Ángel Aburto Monjardín es precandidato fuerte a la alcaldía de Chalco, mientras el alcalde Vicente Alberto Onofre Vázquez renunció al PRD y dejó libre el camino al síndico Enrique Espejel, quien está en busca de una diputación federal.
En Tlalmanalco, segundo municipio en importancia en la región de los volcanes después de Amecameca, el PRD arrebató al PRI la alcaldía con un margen de casi 16 por ciento, y el alcalde amecamense Juan Manuel Guerrero Gutiérrez buscará retener el distrito 28, mientras el diputado local Domingo Hernández Hernández va por una curul federal.
Por el tricolor, el actual subprocurador de justicia en Amecameca, Eduardo Yáñez Montaño, pretende la candidatura a la alcaldía de Chalco; mientras en La Paz un aspirante muy fuerte es Bernardo Corona.
El blanquiazul tendrá pocas posibilidades de crecer en esta zona, pues en los últimos dos trienios fue tercera fuerza en más del 90 por ciento de las posiciones, no ganó diputaciones de mayoría ni alcaldías, y sólo tiene un legislador plurinominal.
Entretanto, los partidos fuertes no sólo impusieron a los consejeros del Instituto Electoral, del Estado de México (IEEM), sino también a los 510 vocales municipales y distritales, quienes se encargarán de la organización, desarrollo y vigilancia de los comicios de julio.
La designación de operadores desconcentrados fue avalada hoy por el Consejo General del IEEM, pero los cinco partidos escogieron a quienes ocuparán las vocalías ejecutiva, de organización y capacitación en los 125 municipios y 45 distritos.
Representantes partidistas ante el IEEM reconocieron que, siguiendo la costumbre en el estado, la fuerza gobernante designó a los vocales ejecutivos de las juntas municipales; la segunda fuerza al de organización y, la tercera, al de capacitación.
Este procedimiento se repitió en las juntas distritales: el partido que tiene la diputación “sugiere” al vocal ejecutivo, y las otras organizaciones a los demás operadores.
Con información de Israel Dávila, corresponsal
El PRD quiere carro completo, pero el PRI buscará retener Chimalhuacán y recuperar otros cuatro municipios, además de dos diputaciones. El primero llega mejor colocado y al parecer sus divisiones internas no le impedirán conservar Nezahualcóyotl, Valle de Chalco y Amecameca, de acuerdo con las tendencias observadas en 2003 y 2006.
En cambio, Chicoloapan y Chalco deparan al PRD distintos escenarios, pues gobierna ambos, pero no se ha consolidado; mientras en Tlalmanalco, Ixtapaluca y La Paz ha alternado con el PRI desde 2000.
La maquinaria perredista podría mantener también los distritos electorales 24, 25, 26, 32 y 41 de Nezahualcóyotl, y el 27 de Chalco y Valle de Chalco. Actualmente tiene las nueve diputaciones de la zona, pero en la última elección logró apenas una ventaja de 5 por ciento sobre el PRI en el distrito 28, de Amecameca. En el 40 de Ixtapaluca y Chicoloapan también ganó por poco.
La cúpula del PRD busca retener los nueve distritos y ocho municipios que ganó en 2006, pero también la alcaldía de Chimalhuacán, en manos del PRI. En este municipio ha crecido el voto duro por el sol azteca se dará preferencia a los candidatos “de unidad” gracias al pacto entre Nueva Izquierda, Alternativa Democrática Nacional y el Grupo de Acción Política.
Pero los estrategas del sol azteca tendrán más dificultades en el distrito 31, de La Paz y Chimalhuacán, donde el PRI ganó la diputación en 2000 y 2003 por amplio margen, pero perdió en 2006 por menos de medio punto.
En Chimalhuacán gobierna el PRI, pero de 2003 a 2006 el perredismo aumentó su votación de 17 a 38 por ciento, sólo seis puntos abajo del tricolor. En Chalco éste podría repuntar debido a los errores de sus adversarios.
El distrito 40, que comprende Ixtapaluca y Chicoloapan –ambos administrados por el PRD–, será uno de los más disputados, pues las votaciones en 2003 y 2006 fueron muy cerradas.
En 2003 el sol azteca ganó Chicoloapan por nueve puntos y en 2006 por menos de cuatro; ese mismo año le arrebató Ixtapaluca al PRI, con 17 puntos de ventaja. El gobierno estatal redujo los recursos al ayuntamiento y retrasó la única obra que se ejecuta –con recursos metropolitanos–, lo que ha causado inconformidad.
En Chicoloapan y Valle de Chalco buscan repetir los ex ediles perredistas Miguel Ángel Luna Munguía y Juan Manuel San Martín Hernández, respectivamente, y en Chimalhuacán, por el PRI se perfila el también ex edil Jesús Tolentino Román.
Nezahualcóyotl es un bastión del PRD que no depara mayores sorpresas, al igual que sus cinco distritos locales.
Además, las tribus pactaron postular a la diputada Juanita Bonilla como candidata de consenso a la alcaldía, la cual dejará Víctor Bautista López para buscar una diputación local y la coordinación de su bancada.
El actual diputado local Ángel Aburto Monjardín es precandidato fuerte a la alcaldía de Chalco, mientras el alcalde Vicente Alberto Onofre Vázquez renunció al PRD y dejó libre el camino al síndico Enrique Espejel, quien está en busca de una diputación federal.
En Tlalmanalco, segundo municipio en importancia en la región de los volcanes después de Amecameca, el PRD arrebató al PRI la alcaldía con un margen de casi 16 por ciento, y el alcalde amecamense Juan Manuel Guerrero Gutiérrez buscará retener el distrito 28, mientras el diputado local Domingo Hernández Hernández va por una curul federal.
Por el tricolor, el actual subprocurador de justicia en Amecameca, Eduardo Yáñez Montaño, pretende la candidatura a la alcaldía de Chalco; mientras en La Paz un aspirante muy fuerte es Bernardo Corona.
El blanquiazul tendrá pocas posibilidades de crecer en esta zona, pues en los últimos dos trienios fue tercera fuerza en más del 90 por ciento de las posiciones, no ganó diputaciones de mayoría ni alcaldías, y sólo tiene un legislador plurinominal.
Entretanto, los partidos fuertes no sólo impusieron a los consejeros del Instituto Electoral, del Estado de México (IEEM), sino también a los 510 vocales municipales y distritales, quienes se encargarán de la organización, desarrollo y vigilancia de los comicios de julio.
La designación de operadores desconcentrados fue avalada hoy por el Consejo General del IEEM, pero los cinco partidos escogieron a quienes ocuparán las vocalías ejecutiva, de organización y capacitación en los 125 municipios y 45 distritos.
Representantes partidistas ante el IEEM reconocieron que, siguiendo la costumbre en el estado, la fuerza gobernante designó a los vocales ejecutivos de las juntas municipales; la segunda fuerza al de organización y, la tercera, al de capacitación.
Este procedimiento se repitió en las juntas distritales: el partido que tiene la diputación “sugiere” al vocal ejecutivo, y las otras organizaciones a los demás operadores.
Con información de Israel Dávila, corresponsal
René Ramón, La Jornada, 20 de enero.
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