Este año se dará el colapso de la actividad productiva y del comercio internacional, ante el arribo de una profunda recesión en las tres locomotoras de la economía mundial, Estados Unidos, Japón y la zona del Euro, advirtió la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin).
Debido a lo anterior se tendrá una repercusión en el empleo debilitando la oferta de oportunidades de trabajo, hasta colocarla en su nivel más bajo de los últimos años, pues según la Concamin se espera la creación de sólo 75 mil empleos en 2009.
“En México, tres temas dominarán la escena nacional: la recesión económica, el combate a la inseguridad y el proceso electoral. Vistas así las cosas, 2009 pondrá a prueba la solidez de nuestros fundamentos económicos, la capacidad del Estado para combatir la inseguridad y la funcionalidad de la más reciente reforma electoral”, indicó el organismo en su documento mensual titulado Pulso Industrial.
Indicó que en el país la recesión está presente en el sector fabril y comienzan a presentarse ya los paros técnicos, los ajustes de personal, la reducción de turnos, la disminución de jornadas, los programas de ajuste administrativo y las estrategias para recortar costos.
“La reducción de la demanda procedente de EU; el descenso en las remesas y en los ingresos por turismo, la escasez de financiamiento en los mercados internacionales; el retroceso de la inversión extranjera; el deterioro de las expectativas de empresarios y consumidores, el aumento del desempleo y el freno de las inversiones provocarán la contracción de la economía a razón de 1.2 por ciento, una caída de 2.9 por ciento en la producción fabril y un retroceso de 3.6 por ciento en la actividad de su más importante componente, las manufacturas, que registrará números rojos por segundo año consecutivo”, explicó.
Al mismo tiempo, el descenso en el crédito al consumo, el aumento del desempleo, el recorte en el gasto destinado a los bienes de consumo duradero y la contracción en las remesas familiares, provocarán el enfriamiento del consumo interno de bienes y servicios restándole vigor a la inflación para ubicarla en casi 5.1 por ciento al cierre del año.
“En 2009 se frenará la inversión, lo mismo que la generación de fuentes de empleo en el sector formal. La primera cerrará el año con un retroceso de 0.8 por ciento, debido al enfriamiento de la mayor parte de los proyectos de inversión privada y al repliegue esperado en la inversión foránea”, concluyó la Concamin.
Debido a lo anterior se tendrá una repercusión en el empleo debilitando la oferta de oportunidades de trabajo, hasta colocarla en su nivel más bajo de los últimos años, pues según la Concamin se espera la creación de sólo 75 mil empleos en 2009.
“En México, tres temas dominarán la escena nacional: la recesión económica, el combate a la inseguridad y el proceso electoral. Vistas así las cosas, 2009 pondrá a prueba la solidez de nuestros fundamentos económicos, la capacidad del Estado para combatir la inseguridad y la funcionalidad de la más reciente reforma electoral”, indicó el organismo en su documento mensual titulado Pulso Industrial.
Indicó que en el país la recesión está presente en el sector fabril y comienzan a presentarse ya los paros técnicos, los ajustes de personal, la reducción de turnos, la disminución de jornadas, los programas de ajuste administrativo y las estrategias para recortar costos.
“La reducción de la demanda procedente de EU; el descenso en las remesas y en los ingresos por turismo, la escasez de financiamiento en los mercados internacionales; el retroceso de la inversión extranjera; el deterioro de las expectativas de empresarios y consumidores, el aumento del desempleo y el freno de las inversiones provocarán la contracción de la economía a razón de 1.2 por ciento, una caída de 2.9 por ciento en la producción fabril y un retroceso de 3.6 por ciento en la actividad de su más importante componente, las manufacturas, que registrará números rojos por segundo año consecutivo”, explicó.
Al mismo tiempo, el descenso en el crédito al consumo, el aumento del desempleo, el recorte en el gasto destinado a los bienes de consumo duradero y la contracción en las remesas familiares, provocarán el enfriamiento del consumo interno de bienes y servicios restándole vigor a la inflación para ubicarla en casi 5.1 por ciento al cierre del año.
“En 2009 se frenará la inversión, lo mismo que la generación de fuentes de empleo en el sector formal. La primera cerrará el año con un retroceso de 0.8 por ciento, debido al enfriamiento de la mayor parte de los proyectos de inversión privada y al repliegue esperado en la inversión foránea”, concluyó la Concamin.
Antonio Hernández, Milenio, 12 de enero.
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