Ante una plancha del Zócalo que lucía grandes huecos, Andrés Manuel López Obrador advirtió que la situación económica en el país “va a empeorar”, por lo cual anunció una serie de movilizaciones y medidas en los próximos dos meses en defensa del petróleo y la economía popular, donde exigirá al gobierno federal la disminución en los precios de la gasolina, luz y diesel, entre otros productos.
“Todo apunta a que la situación va a empeorar, la crisis de Estados Unidos nos va a afectar más de la cuenta por la debilidad de nuestra economía; en pocos meses el peso se devaluó 40 por ciento, este año el crecimiento estará por debajo de cero, ya hay despidos masivos de trabajadores y el desempleo crece de manera alarmante”, alertó
López Obrador advirtió que si el gobierno federal no pone en marcha medidas efectivas para mejorar la situación en el país, no sólo habrá más pobreza, sino también más inseguridad y más violencia.
“Aún cuando no se ha desbordado el descontento, la manifestación más inequívoca del fracaso de la actual política económica es el crecimiento tan preocupante de la inseguridad y la violencia”, insistió
Al evento de ayer no acudió la dirigencia nacional del PRD, que encabeza Jesús Ortega, aunque días atrás deslizó la posibilidad de asistir si su agenda se lo permitía.
Ni el coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete, asistió, pese a que ha sido el enlace permanente en los últimos meses.
Como ha sucedido en los últimos mítines de López Obrador, no se logró atestar la plancha del Zócalo capitalino como en otras ocasiones, aunque sí asistieron miles de personas agrupadas en las distintas organizaciones todavía afines al tabasqueño, como el Movimiento por la Esperanza que encabeza René Bejarano.
En el templete, López Obrador anunció la apertura de oficinas representativas o “casas del movimiento” en todo el país y las 16 delegaciones de la capital, para asesorar a todos los deudores de la banca, hipotecas, tarjetahabientes, entre otros, y sostuvo que no sólo se les asesorará, sino que se organizarán movilizaciones para defenderlos del “hostigamiento” y “abusos” de sus acreedores.
“En estas casas no sólo se brindará información y asesoría, sino que se auspiciará la organización y habrá movilizaciones en la búsqueda de soluciones colectivas”, estableció.
En ese sentido, el tabasqueño enlistó siete medidas y movilizaciones que realizará del 26 de enero al 22 de marzo para reforzar su movimiento de resistencia civil en apoyo de la economía popular, entre las que destacan diversos mítines frente a Luz y Fuerza del Centro, y frente a la Secretaría de Hacienda para exigir la reducción en los precios de la luz, diesel, gasolina, y que se elimine el Impuesto Empresarial de Tasa Única que se aplica al sector empresarial.
De igual manera está considerada una manifestación el 3 de marzo en la Asociación Mexicana de Bancos, para protestar por las tasas de interés en las tarjetas de crédito y la cartera vencida.
Esta etapa de movilizaciones culminará el 22 de marzo, con una asamblea informativa que se convocó nuevamente en el Zócalo capitalino.
“Todo apunta a que la situación va a empeorar, la crisis de Estados Unidos nos va a afectar más de la cuenta por la debilidad de nuestra economía; en pocos meses el peso se devaluó 40 por ciento, este año el crecimiento estará por debajo de cero, ya hay despidos masivos de trabajadores y el desempleo crece de manera alarmante”, alertó
López Obrador advirtió que si el gobierno federal no pone en marcha medidas efectivas para mejorar la situación en el país, no sólo habrá más pobreza, sino también más inseguridad y más violencia.
“Aún cuando no se ha desbordado el descontento, la manifestación más inequívoca del fracaso de la actual política económica es el crecimiento tan preocupante de la inseguridad y la violencia”, insistió
Al evento de ayer no acudió la dirigencia nacional del PRD, que encabeza Jesús Ortega, aunque días atrás deslizó la posibilidad de asistir si su agenda se lo permitía.
Ni el coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete, asistió, pese a que ha sido el enlace permanente en los últimos meses.
Como ha sucedido en los últimos mítines de López Obrador, no se logró atestar la plancha del Zócalo capitalino como en otras ocasiones, aunque sí asistieron miles de personas agrupadas en las distintas organizaciones todavía afines al tabasqueño, como el Movimiento por la Esperanza que encabeza René Bejarano.
En el templete, López Obrador anunció la apertura de oficinas representativas o “casas del movimiento” en todo el país y las 16 delegaciones de la capital, para asesorar a todos los deudores de la banca, hipotecas, tarjetahabientes, entre otros, y sostuvo que no sólo se les asesorará, sino que se organizarán movilizaciones para defenderlos del “hostigamiento” y “abusos” de sus acreedores.
“En estas casas no sólo se brindará información y asesoría, sino que se auspiciará la organización y habrá movilizaciones en la búsqueda de soluciones colectivas”, estableció.
En ese sentido, el tabasqueño enlistó siete medidas y movilizaciones que realizará del 26 de enero al 22 de marzo para reforzar su movimiento de resistencia civil en apoyo de la economía popular, entre las que destacan diversos mítines frente a Luz y Fuerza del Centro, y frente a la Secretaría de Hacienda para exigir la reducción en los precios de la luz, diesel, gasolina, y que se elimine el Impuesto Empresarial de Tasa Única que se aplica al sector empresarial.
De igual manera está considerada una manifestación el 3 de marzo en la Asociación Mexicana de Bancos, para protestar por las tasas de interés en las tarjetas de crédito y la cartera vencida.
Esta etapa de movilizaciones culminará el 22 de marzo, con una asamblea informativa que se convocó nuevamente en el Zócalo capitalino.
Alejandro Páez, Crónica, 26 de enero.
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