Andrés Manuel López Obrador desistió de ingresar al Palacio Legislativo de San Lázaro, después de que el presidente de la Cámara de Diputados, César Horacio Duarte, anunciara su decisión de ausentarse a la hora del mitin encabezado por el tabasqueño.
Duarte pidió al Comité de Información, Gestoría y Quejas del órgano legislativo recibir cualquier documento a López Obrador.
El llamado “presidente legítimo” informó entonces a los coordinadores parlamentarios del PRD, Javier González Garza, y del PT, Ricardo Cantú, que no entraría al recinto parlamentario, no obstante que los legisladores del Frente Amplio Progresista tenían ya habilitado el Salón Protocolo para recibirlo.
Destacó la ausencia de los representantes de la corriente perredista Nueva Izquierda, liderada por Jesús Ortega, y del coordinador de la bancada de Convergencia, Alejandro Chanona, quien dijo estar “fuera de la ciudad”.
Por su parte, López Obrador demandó nuevamente al Congreso suscribir un acuerdo nacional para enfrentar la crisis económica en el país y manifestó su disposición a sumarse, siempre y cuando haya una convocatoria sin politiquerías.
A sus seguidores les planteó que es necesario “acabar con la política del agandalle y poner un alto a la rapiña del presupuesto”, y arremetió contra el gobierno federal, al que acusó de “mantenido” y de no servir para nada, “le cuesta mucho al pueblo mantener al gobierno”, aseguró.
Dijo que “ojalá los legisladores nos tomen la palabra, se activen y empiecen a poner en práctica el plan de austeridad”.
La víspera de que se presenten las conclusiones del foro anticrisis organizado por el Congreso de la Unión, que de acuerdo con los organizadores se traducirá en acuerdos concretos para hacer frente a la crisis económica, López Obrador dijo que espera una respuesta formal a sus planteamientos.
El tabasqueño dejó ver que es posible que encabece un mitin afuera de la Suprema Corte para demandar a los ministros la reducción de sus salarios, los cuales son de alrededor de 600 mil pesos.
$200 mil millones de ahorro
••• Flanqueada por 20 diputados del Frente Amplio Progresista y con una manta colocada sobre la tribuna parlamentaria, la legisladora perredista Valentina Batres presentó este martes ante el pleno de la Cámara de Diputados la propuesta anticrisis de Andrés Manuel López Obrador.
Aunque los legisladores leales al tabasqueño amagaban con “sorpresas” durante la sesión de ayer, la presentación del plan emergente transcurrió en calma y sin interrupción alguna a los trabajos parlamentarios. Batres insistió en el ahorro de hasta 200 mil millones de pesos con la reducción de 50 por ciento a los sueldos de los altos funcionarios del gobierno federal.
Planteó también la cancelación de los seguros de gastos médicos para la alta burocracia, las pensiones millonarias a los ex presidentes, la compra de vehículos para altos funcionarios, los gastos de representación, viáticos, remodelación y renta de oficinas, boletos en primera clase y gastos de vestuario. (México • Fernando Damián)
Duarte pidió al Comité de Información, Gestoría y Quejas del órgano legislativo recibir cualquier documento a López Obrador.
El llamado “presidente legítimo” informó entonces a los coordinadores parlamentarios del PRD, Javier González Garza, y del PT, Ricardo Cantú, que no entraría al recinto parlamentario, no obstante que los legisladores del Frente Amplio Progresista tenían ya habilitado el Salón Protocolo para recibirlo.
Destacó la ausencia de los representantes de la corriente perredista Nueva Izquierda, liderada por Jesús Ortega, y del coordinador de la bancada de Convergencia, Alejandro Chanona, quien dijo estar “fuera de la ciudad”.
Por su parte, López Obrador demandó nuevamente al Congreso suscribir un acuerdo nacional para enfrentar la crisis económica en el país y manifestó su disposición a sumarse, siempre y cuando haya una convocatoria sin politiquerías.
A sus seguidores les planteó que es necesario “acabar con la política del agandalle y poner un alto a la rapiña del presupuesto”, y arremetió contra el gobierno federal, al que acusó de “mantenido” y de no servir para nada, “le cuesta mucho al pueblo mantener al gobierno”, aseguró.
Dijo que “ojalá los legisladores nos tomen la palabra, se activen y empiecen a poner en práctica el plan de austeridad”.
La víspera de que se presenten las conclusiones del foro anticrisis organizado por el Congreso de la Unión, que de acuerdo con los organizadores se traducirá en acuerdos concretos para hacer frente a la crisis económica, López Obrador dijo que espera una respuesta formal a sus planteamientos.
El tabasqueño dejó ver que es posible que encabece un mitin afuera de la Suprema Corte para demandar a los ministros la reducción de sus salarios, los cuales son de alrededor de 600 mil pesos.
$200 mil millones de ahorro
••• Flanqueada por 20 diputados del Frente Amplio Progresista y con una manta colocada sobre la tribuna parlamentaria, la legisladora perredista Valentina Batres presentó este martes ante el pleno de la Cámara de Diputados la propuesta anticrisis de Andrés Manuel López Obrador.
Aunque los legisladores leales al tabasqueño amagaban con “sorpresas” durante la sesión de ayer, la presentación del plan emergente transcurrió en calma y sin interrupción alguna a los trabajos parlamentarios. Batres insistió en el ahorro de hasta 200 mil millones de pesos con la reducción de 50 por ciento a los sueldos de los altos funcionarios del gobierno federal.
Planteó también la cancelación de los seguros de gastos médicos para la alta burocracia, las pensiones millonarias a los ex presidentes, la compra de vehículos para altos funcionarios, los gastos de representación, viáticos, remodelación y renta de oficinas, boletos en primera clase y gastos de vestuario. (México • Fernando Damián)
Fernando Damián y Liliana Padilla, Milenio, 18 de febrero.
0 Responses to "López Obrador prefirió dar su discurso afuera"
Publicar un comentario