El nulo crecimiento del Partido de la Revolución Democrática en 17 estados del país es consecuencia de “estrategias erróneas”, que lo han llevado a dejarlo sin apoyo partidario.
A partir de esta situación se conformó por primera vez en el PRD una comisión especial de estrategia electoral que se enfocará sólo a estas 17 entidades, principalmente del norte del país, para destinar mayores recursos económicos y humanos que permitan un crecimiento en las preferencias.
De acuerdo con el plan de trabajo perredista, del cual MILENIO posee copia, se reconoce que “estrategias erróneas de nuestro partido nos han llevado a no apoyar de manera adecuada a las entidades donde tenemos escaso éxito electoral, bajo el argumento de que no tenemos posibilidades de ganar, por lo que sólo se han considerado distritos prioritarios aquellos cuyas probabilidades de obtener el triunfo son muy elevadas y, por lo tanto, son los merecedores de apoyo partidario”.
El documento elaborado por cuatro ex dirigentes estatales perredistas en el norte del país, donde el PRD enfrenta este problema, resalta que aunque ha habido esfuerzos por intentar aumentar las preferencias electorales, ninguno ha obtenido resultados positivos.
“A final de cuentas se ha impuesto la inercia y se ha optado por lo aparentemente más sencillo: apoyar a los distritos federales competitivos y no invertir en aquellos en donde ha habido bajos porcentajes, con lo que se cierra el círculo vicioso; no se apoya a ciertas entidades porque tienen resultados menores a 15 por ciento y éstas no mejoran sus números porque no se les apoya”.
El plan de trabajo plantea incrementar los recursos del partido para hacer crecer la estructura el partido en los 17 estados, en algunos de los cuales no supera siquiera dos por ciento de las preferencias, para así “revertir esta inercia”.
“Se trata de estudiar y atender de manera puntual y específica a todas y cada una de tales entidades federativas. No únicamente en el plano financiero, que es importante más no suficiente.”
Entre los objetivos propuestos por Trinidad Morales, Socorro Ceseñas, Rafael Palacios y Juan Manuel Ávila, y que ya fueron aprobados al seno de la Comisión Política Nacional, destacan: “Incrementar de manera sustancial los resultados electorales de 2009 en las 17 entidades en las que el PRD tiene porcentajes inferiores a 15 por ciento”.
Además, “sentar bases organizativas y electorales para que estas entidades coadyuven de manera importante en la elección presidencial de 2012 a favor del PRD”.
El documento resalta que un error recurrente que es necesario revertir es “el de percibir el éxito electoral sólo en la perspectiva de los distritos federales de mayoría; olvidando los 200 de representación proporcional”.
El análisis detalla que se ha valorado como esfuerzo estéril elevar la votación de un distrito de 4%, por ejemplo, donde el PRD es tercera o cuarta fuerza, muy alejado de un triunfo de mayoría; sin considerar que el incremento de 1 punto influye de una manera importante en la asignación de diputados en la circunscripción respectiva.
Apunta que “no es casual que sea en las circunscripciones I y II en las que el PRD obtiene las asignaciones menores de diputados de representación proporcional”.
Por ello, la estrategia establece que de los 17 estados donde el PRD es francamente débil, son cinco los que cuentan con un listado nominal que se coloca dentro de los 10 primeros a nivel nacional:Jalisco, Guanajuato, Puebla, Nuevo León y Chihuahua.
“Elevar el porcentaje de votos en las entidades en donde el partido ha tenido escaso éxito repercute de manera significativa en los números nacionales absolutos y, por ende, en el porcentaje nacional y en el otorgamiento de diputados de representación proporcional.”
La comisión aprobada por la Comisión Política comenzó a trabajar en dichas entidades y deberá presentar ante ésta instancia el análisis por cada uno de los distritos de los 17 estados en cuestión, y a partir de ahí se definirá la estrategia para cada uno de ellos.
A partir de esta situación se conformó por primera vez en el PRD una comisión especial de estrategia electoral que se enfocará sólo a estas 17 entidades, principalmente del norte del país, para destinar mayores recursos económicos y humanos que permitan un crecimiento en las preferencias.
De acuerdo con el plan de trabajo perredista, del cual MILENIO posee copia, se reconoce que “estrategias erróneas de nuestro partido nos han llevado a no apoyar de manera adecuada a las entidades donde tenemos escaso éxito electoral, bajo el argumento de que no tenemos posibilidades de ganar, por lo que sólo se han considerado distritos prioritarios aquellos cuyas probabilidades de obtener el triunfo son muy elevadas y, por lo tanto, son los merecedores de apoyo partidario”.
El documento elaborado por cuatro ex dirigentes estatales perredistas en el norte del país, donde el PRD enfrenta este problema, resalta que aunque ha habido esfuerzos por intentar aumentar las preferencias electorales, ninguno ha obtenido resultados positivos.
“A final de cuentas se ha impuesto la inercia y se ha optado por lo aparentemente más sencillo: apoyar a los distritos federales competitivos y no invertir en aquellos en donde ha habido bajos porcentajes, con lo que se cierra el círculo vicioso; no se apoya a ciertas entidades porque tienen resultados menores a 15 por ciento y éstas no mejoran sus números porque no se les apoya”.
El plan de trabajo plantea incrementar los recursos del partido para hacer crecer la estructura el partido en los 17 estados, en algunos de los cuales no supera siquiera dos por ciento de las preferencias, para así “revertir esta inercia”.
“Se trata de estudiar y atender de manera puntual y específica a todas y cada una de tales entidades federativas. No únicamente en el plano financiero, que es importante más no suficiente.”
Entre los objetivos propuestos por Trinidad Morales, Socorro Ceseñas, Rafael Palacios y Juan Manuel Ávila, y que ya fueron aprobados al seno de la Comisión Política Nacional, destacan: “Incrementar de manera sustancial los resultados electorales de 2009 en las 17 entidades en las que el PRD tiene porcentajes inferiores a 15 por ciento”.
Además, “sentar bases organizativas y electorales para que estas entidades coadyuven de manera importante en la elección presidencial de 2012 a favor del PRD”.
El documento resalta que un error recurrente que es necesario revertir es “el de percibir el éxito electoral sólo en la perspectiva de los distritos federales de mayoría; olvidando los 200 de representación proporcional”.
El análisis detalla que se ha valorado como esfuerzo estéril elevar la votación de un distrito de 4%, por ejemplo, donde el PRD es tercera o cuarta fuerza, muy alejado de un triunfo de mayoría; sin considerar que el incremento de 1 punto influye de una manera importante en la asignación de diputados en la circunscripción respectiva.
Apunta que “no es casual que sea en las circunscripciones I y II en las que el PRD obtiene las asignaciones menores de diputados de representación proporcional”.
Por ello, la estrategia establece que de los 17 estados donde el PRD es francamente débil, son cinco los que cuentan con un listado nominal que se coloca dentro de los 10 primeros a nivel nacional:Jalisco, Guanajuato, Puebla, Nuevo León y Chihuahua.
“Elevar el porcentaje de votos en las entidades en donde el partido ha tenido escaso éxito repercute de manera significativa en los números nacionales absolutos y, por ende, en el porcentaje nacional y en el otorgamiento de diputados de representación proporcional.”
La comisión aprobada por la Comisión Política comenzó a trabajar en dichas entidades y deberá presentar ante ésta instancia el análisis por cada uno de los distritos de los 17 estados en cuestión, y a partir de ahí se definirá la estrategia para cada uno de ellos.
Liliana Padilla, Milenio, 23 de marzo.
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