El presidente Felipe Calderón definió a Barack Obama como un líder que representa la esperanza de millones de personas en todo el mundo: “Sé, señor presidente, la enorme responsabilidad que pesa sobre sus hombros”, dijo. Mientras, el estadunidense dejó su último mensaje sobre la reforma migratoria, la cual, dijo, “estoy dedicado a lograr”.
En el cierre de su visita, el mandatario estadunidense sostuvo que México y Estados Unidos son buenos vecinos, aunque “no siempre hemos estado del mismo lado de cada tema y no hay duda que en el futuro habrá diferencias también”.
Fue el momento para hablar de las coincidencias. Calderón y Obama se definieron como mandatarios que forman parte de la misma generación. Los dos comprendemos, dijo Obama, que la influencia de la política, el poder del dinero o la fuerza están más allá de la ley. “Todos, cada uno, somos iguales y hemos recibido los derechos humanos básicos que surgen, no de la ley, sino de nuestro creador”.
Obama se refirió a Calderón como un socio que ha demostrado su valor y valentía y que “combina su sentido de principio con uno de practicidad”.
Y refrendó el mensaje que hace 60 años dio a México Franklin D. Roosevelt de que el espíritu de responsabilidad, interés y afecto mutuos harán que se logren los propósitos y objetivos comunes.
Obama dijo que la democracia no es un don heredado de generaciones anteriores, sino que cada una tiene la responsabilidad de protegerla.
Mientras, Calderón definió a Obama como un hombre provisto con la inteligencia, sencillez y carisma suficientes para ejercer el liderazgo que se necesita para resolver los problemas actuales del mundo.
El presidente mexicano —parafraseando a Mahatma Gandhi— habló de los pecados capitales que ha cometido la humanidad al pretender “riqueza sin trabajo, placer sin conciencia, ciencia sin humanidad, conocimiento sin carácter, comercio sin moral, oración sin sacrificio y política sin principios”.
Y dijo que la civilización no se ha dado cuenta del riesgo de su propia mortalidad.
Al hablar de la esperanza que ahora tiene el mundo en Obama, Calderón pintó el escenario de la humanidad que sufre sus propios errores, herida por la guerra y la violencia, así como por el crimen organizado y el terrorismo y la miseria de millones de personas.
Además se refirió al súbito deterioro económico de otros millones de personas a causa de la crisis económica que ahora sufre la humanidad.
- Claves
El menú
• Camarones al pico de gallo, filete en salsa molcajeteada y barrilito de higo en salsa de zapote fueron parte del menú
• En el Museo Nacional de Antropología e Historia se ofreció la cena mexicana amenizada por la marimba chiapaneca de la Secretaría de Marina.
En el cierre de su visita, el mandatario estadunidense sostuvo que México y Estados Unidos son buenos vecinos, aunque “no siempre hemos estado del mismo lado de cada tema y no hay duda que en el futuro habrá diferencias también”.
Fue el momento para hablar de las coincidencias. Calderón y Obama se definieron como mandatarios que forman parte de la misma generación. Los dos comprendemos, dijo Obama, que la influencia de la política, el poder del dinero o la fuerza están más allá de la ley. “Todos, cada uno, somos iguales y hemos recibido los derechos humanos básicos que surgen, no de la ley, sino de nuestro creador”.
Obama se refirió a Calderón como un socio que ha demostrado su valor y valentía y que “combina su sentido de principio con uno de practicidad”.
Y refrendó el mensaje que hace 60 años dio a México Franklin D. Roosevelt de que el espíritu de responsabilidad, interés y afecto mutuos harán que se logren los propósitos y objetivos comunes.
Obama dijo que la democracia no es un don heredado de generaciones anteriores, sino que cada una tiene la responsabilidad de protegerla.
Mientras, Calderón definió a Obama como un hombre provisto con la inteligencia, sencillez y carisma suficientes para ejercer el liderazgo que se necesita para resolver los problemas actuales del mundo.
El presidente mexicano —parafraseando a Mahatma Gandhi— habló de los pecados capitales que ha cometido la humanidad al pretender “riqueza sin trabajo, placer sin conciencia, ciencia sin humanidad, conocimiento sin carácter, comercio sin moral, oración sin sacrificio y política sin principios”.
Y dijo que la civilización no se ha dado cuenta del riesgo de su propia mortalidad.
Al hablar de la esperanza que ahora tiene el mundo en Obama, Calderón pintó el escenario de la humanidad que sufre sus propios errores, herida por la guerra y la violencia, así como por el crimen organizado y el terrorismo y la miseria de millones de personas.
Además se refirió al súbito deterioro económico de otros millones de personas a causa de la crisis económica que ahora sufre la humanidad.
- Claves
El menú
• Camarones al pico de gallo, filete en salsa molcajeteada y barrilito de higo en salsa de zapote fueron parte del menú
• En el Museo Nacional de Antropología e Historia se ofreció la cena mexicana amenizada por la marimba chiapaneca de la Secretaría de Marina.
Lorena López y Víctor Hugo Michel, Milenio, 17 de abril.
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