Iztapalapa se convirtió en el campo de guerra entre chuchos y bejaranos. Estos últimos advirtieron que iniciarán una lucha encarnizada por esa jefatura delegacional.
Tras reconocer públicamente la nula posibilidad de contender impulsada por otro partido en la jornada electoral del 5 de julio, Clara Brugada y Andrés Manuel López Obrador aseguraron que apoyarán la candidatura de Rafael Acosta, quien es el aspirante del Partido del Trabajo.
En un mitin realizado la tarde de ayer en la Macroplaza Cuitláhuac, los integrantes de Izquierda Unida informaron a más de cinco mil simpatizantes las acciones de resistencia ante la “imposición de Silvia Oliva por el tribunal electoral federal”.
Al evento asistieron la dirigencia estatal y los políticos cercanos al ex jefe de gobierno capitalino.
Durante su participación, Brugada Molina aseveró que Iztapalapa no aceptará ser gobernada por ningún integrante de Nueva Izquierda porque no ganaron en las urnas el pasado 15 de marzo.
Además, exigió al Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la Revolución Democrática pronunciarse sobre el conflicto que atraviesan en esa demarcación, pero sobre todo impedir el registro de Silvia Oliva ante el IEDF.
Para iniciar su movimiento de resistencia, citó a la militancia a un mitin al mediodía de hoy en la plancha del Zócalo de la ciudad de México.
Dijo que durante los tres días siguientes realizarán recorridos y marchas por diversas zonas de la demarcación a fin de promover el voto a favor del aspirante del PT.
Ante el asombro de la propia dirigencia perredista, López Obrador propuso a los colonos impulsar la candidatura de Rafael Acosta, quien en caso de ganar debe renunciar a su cargo y en consecuencia cederle su lugar a Brugada.
Mientras que la gente apoyaba a gritos el planteamiento del político tabasqueño, los miembros de presidium no tuvieron otra opción que aceptar.
Incluso, Acosta se sorprendió y de manera espontánea alzó la mano en señal de la victoria. López Obrador lo acercó y le colocaron una cinta tricolor en la cabeza.
“Él va a ganar”, dijo, y luego continuó: “vamos a hacerlo triunfar, y es que ni él se la va a creer”.
Entonces dejó de señalarlo al tiempo que los asistentes aplaudían. Luego agregó: “pero se tiene que comprometer a que si lo hacemos ganar tiene que renunciar, para que le propongamos a Marcelo Ebrard que Clarita se quede como delegada sustituta”.
“¡Si no renuncias te vamos a madrear!”, le advirtieron los seguidores de Clara Brugada.
Obrador añadió que es una tarea titánica, puesto que se enfrentan a los grupos de poder, y por ello reveló que él mismo hará recorridos por toda la demarcación.
Tras reconocer públicamente la nula posibilidad de contender impulsada por otro partido en la jornada electoral del 5 de julio, Clara Brugada y Andrés Manuel López Obrador aseguraron que apoyarán la candidatura de Rafael Acosta, quien es el aspirante del Partido del Trabajo.
En un mitin realizado la tarde de ayer en la Macroplaza Cuitláhuac, los integrantes de Izquierda Unida informaron a más de cinco mil simpatizantes las acciones de resistencia ante la “imposición de Silvia Oliva por el tribunal electoral federal”.
Al evento asistieron la dirigencia estatal y los políticos cercanos al ex jefe de gobierno capitalino.
Durante su participación, Brugada Molina aseveró que Iztapalapa no aceptará ser gobernada por ningún integrante de Nueva Izquierda porque no ganaron en las urnas el pasado 15 de marzo.
Además, exigió al Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la Revolución Democrática pronunciarse sobre el conflicto que atraviesan en esa demarcación, pero sobre todo impedir el registro de Silvia Oliva ante el IEDF.
Para iniciar su movimiento de resistencia, citó a la militancia a un mitin al mediodía de hoy en la plancha del Zócalo de la ciudad de México.
Dijo que durante los tres días siguientes realizarán recorridos y marchas por diversas zonas de la demarcación a fin de promover el voto a favor del aspirante del PT.
Ante el asombro de la propia dirigencia perredista, López Obrador propuso a los colonos impulsar la candidatura de Rafael Acosta, quien en caso de ganar debe renunciar a su cargo y en consecuencia cederle su lugar a Brugada.
Mientras que la gente apoyaba a gritos el planteamiento del político tabasqueño, los miembros de presidium no tuvieron otra opción que aceptar.
Incluso, Acosta se sorprendió y de manera espontánea alzó la mano en señal de la victoria. López Obrador lo acercó y le colocaron una cinta tricolor en la cabeza.
“Él va a ganar”, dijo, y luego continuó: “vamos a hacerlo triunfar, y es que ni él se la va a creer”.
Entonces dejó de señalarlo al tiempo que los asistentes aplaudían. Luego agregó: “pero se tiene que comprometer a que si lo hacemos ganar tiene que renunciar, para que le propongamos a Marcelo Ebrard que Clarita se quede como delegada sustituta”.
“¡Si no renuncias te vamos a madrear!”, le advirtieron los seguidores de Clara Brugada.
Obrador añadió que es una tarea titánica, puesto que se enfrentan a los grupos de poder, y por ello reveló que él mismo hará recorridos por toda la demarcación.
Jonathan Villanueva, Crónica, 17 de junio.
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