El secretario de Desarrollo Social, Ernesto Cordero, reconoció que la recesión económica por la que atraviesa México afecta más a la clase media, ya que al sufrir desempleo cayó en la denominada pobreza patrimonial, es decir, en la pérdida de ingreso para pagar vivienda, servicios y transporte.
Por lo mismo, anunció que se ampliará el programa Oportunidades a las zonas urbanas —sólo se centraba en áreas rurales—, y en este año se incluirán a 250 mil familias más que padecen pobreza de capacidades, con lo que el programa en ese entorno social llegará a un millón de hogares beneficiados en 2009.
“La clase media es la que está siendo fuertemente afectada en la parte de pobreza patrimonial y de capacidades… Familias que antes estaban por arriba de cierta línea de ingreso, ahora ya no lo van a estar, van a estar por abajo. Familias que antes no estaban consideradas en pobreza patrimonial, ahora sí lo van a estar.
“La pobreza de capacidades abarca un nivel más bajo, en el que ya no se puede pagar salud ni educación básica”, precisó Cordero.
El funcionario refirió que es imposible cuantificar cuántas familias mexicanas se sumaron a los 41 millones de mexicanos que, actualmente, se ubican en la línea de la pobreza patrimonial de acuerdo con encuestas de 2006.
Y lo mismo, abundó, dijo, de aquellos mexicanos que siendo de la clase media engrosaron la cifra de 21 millones que se ubican en la pobreza de capacidades, como se identifica a los hogares que no cuentan con lo suficiente para cubrir cuestiones de salud y educación básica.
Hay que esperar, dijo, las mediciones de ingreso-gasto en los hogares que, dentro de unos días, entregará el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, y los estudios que realice al respecto el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social.
Sin embargo, explicó que de acuerdo con sus propias mediciones, los efectos negativos de la crisis se centraron más en la clase media que en la población en pobreza extrema.
“El gobierno tomó medidas que van ayudar a que esta pobreza no se refleje tanto, que no haya un incremento importante. Cuando el año pasado nos dimos cuenta que los precios de la comida subían, decidimos aumentar el componente alimentario en 120 pesos para compensar ese incremento.
“Hay otros programas alimentarios que están incidiendo en la gente más pobre, por eso creemos que la pobreza alimentaria no va aumentar mucho o se va a mantener, y también por el tipo de crisis, que está pegando más en las clases medias, sobre todo, no tanto a la más pobre”, subrayó.
- Claves
Diferencias
• Pobreza alimentaria: Aquellos hogares que no cuentan con lo suficiente para cubrir la canasta básica.
• Pobreza de capacidades: Aquellos hogares que no cuentan con lo suficiente para potenciar sus aptitudes personales, a través de la salud y la educación básica.
• Pobreza patrimonial: Aquellos hogares que cubriendo los anteriores gastos, no cuentan con lo suficiente para tener una vida digna: vestido y calzado; vivienda; servicio de conservación; energía eléctrica y combustible; alquiler de la vivienda y transporte público
Por lo mismo, anunció que se ampliará el programa Oportunidades a las zonas urbanas —sólo se centraba en áreas rurales—, y en este año se incluirán a 250 mil familias más que padecen pobreza de capacidades, con lo que el programa en ese entorno social llegará a un millón de hogares beneficiados en 2009.
“La clase media es la que está siendo fuertemente afectada en la parte de pobreza patrimonial y de capacidades… Familias que antes estaban por arriba de cierta línea de ingreso, ahora ya no lo van a estar, van a estar por abajo. Familias que antes no estaban consideradas en pobreza patrimonial, ahora sí lo van a estar.
“La pobreza de capacidades abarca un nivel más bajo, en el que ya no se puede pagar salud ni educación básica”, precisó Cordero.
El funcionario refirió que es imposible cuantificar cuántas familias mexicanas se sumaron a los 41 millones de mexicanos que, actualmente, se ubican en la línea de la pobreza patrimonial de acuerdo con encuestas de 2006.
Y lo mismo, abundó, dijo, de aquellos mexicanos que siendo de la clase media engrosaron la cifra de 21 millones que se ubican en la pobreza de capacidades, como se identifica a los hogares que no cuentan con lo suficiente para cubrir cuestiones de salud y educación básica.
Hay que esperar, dijo, las mediciones de ingreso-gasto en los hogares que, dentro de unos días, entregará el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, y los estudios que realice al respecto el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social.
Sin embargo, explicó que de acuerdo con sus propias mediciones, los efectos negativos de la crisis se centraron más en la clase media que en la población en pobreza extrema.
“El gobierno tomó medidas que van ayudar a que esta pobreza no se refleje tanto, que no haya un incremento importante. Cuando el año pasado nos dimos cuenta que los precios de la comida subían, decidimos aumentar el componente alimentario en 120 pesos para compensar ese incremento.
“Hay otros programas alimentarios que están incidiendo en la gente más pobre, por eso creemos que la pobreza alimentaria no va aumentar mucho o se va a mantener, y también por el tipo de crisis, que está pegando más en las clases medias, sobre todo, no tanto a la más pobre”, subrayó.
- Claves
Diferencias
• Pobreza alimentaria: Aquellos hogares que no cuentan con lo suficiente para cubrir la canasta básica.
• Pobreza de capacidades: Aquellos hogares que no cuentan con lo suficiente para potenciar sus aptitudes personales, a través de la salud y la educación básica.
• Pobreza patrimonial: Aquellos hogares que cubriendo los anteriores gastos, no cuentan con lo suficiente para tener una vida digna: vestido y calzado; vivienda; servicio de conservación; energía eléctrica y combustible; alquiler de la vivienda y transporte público
Blanca Valadez, Milenio, 14 de julio.
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