El PRI ganó la mayoría en la Cámara de Diputados y de concretarse una alianza legislativa con el PVEM, tendrá la mayoría absoluta en la legislatura que inicia el 1 de septiembre.
En la elección de ayer, el tricolor habría ganado 233 diputaciones, con las que regresa como grupo mayoritario a San Lázaro luego del derrumbe de hace tres años, cuando fue relegado al tercer lugar, por debajo del PAN y del PRD, con apenas 106 representantes.
De confirmarse las tendencias de votación, el PVEM, aliado del PRI en los últimos años, tendrá 22 diputados.
La mayoría absoluta del PRI y su aliado, con 255 diputaciones, le permitiría imponer el Presupuesto de Egresos en lo que resta del sexenio de Felipe Calderón.
También decidir, sin mediar negociación, al próximo Auditor Superior de la Federación, funcionario del Legislativo que supervisa el manejo de los recursos federales y decide las sanciones a los funcionarios que hayan incurrido en irregularidades.
En este escenario, ninguna reforma legal podrá pasar sin el aval del tricolor y, en cambio, ese partido llevará mano en sus propuestas legislativas que en alianza con el PVEM podrán pasar sin mayor problema.
De confirmarse los triunfos priistas y oficializarse el porcentaje para el reparto de plurinominales, los personajes que tendrían control sobre el mayor número de legisladores serían la presidenta del partido, Beatriz Paredes; el Gobernador Enrique Peña, y Mandatarios cuyos estados tienen una mayor cantidad de distritos, como Ulises Ruiz, de Oaxaca, y Fidel Herrera, de Veracruz.
Caída panista
Según los resultados preliminares de la elección de ayer, el PAN no se pudo mantener como primera fuerza en San Lázaro, la cual había obtenido por primera vez en su historia hace tres años, cuando se alzó con el triunfo en la Presidencia y además ganó la mayor cantidad de escaños en el Senado.
Los votos para el PAN le dan la ventaja en 76 distritos y su porcentaje le alcanza para 146 curules, con las cuales queda como segunda fuerza.
El PRD cae. De los 127 diputados que tiene actualmente y que fueron producto del efecto López Obrador en 2006, ahora pasará a 72.
De confirmarse los porcentajes de votación para los partidos pequeños, el PT, Panal y Convergencia salvarían el registro. No así el PSD.
Jorge Arturo Hidalgo, Reforma, 6 de julio.
En la elección de ayer, el tricolor habría ganado 233 diputaciones, con las que regresa como grupo mayoritario a San Lázaro luego del derrumbe de hace tres años, cuando fue relegado al tercer lugar, por debajo del PAN y del PRD, con apenas 106 representantes.
De confirmarse las tendencias de votación, el PVEM, aliado del PRI en los últimos años, tendrá 22 diputados.
La mayoría absoluta del PRI y su aliado, con 255 diputaciones, le permitiría imponer el Presupuesto de Egresos en lo que resta del sexenio de Felipe Calderón.
También decidir, sin mediar negociación, al próximo Auditor Superior de la Federación, funcionario del Legislativo que supervisa el manejo de los recursos federales y decide las sanciones a los funcionarios que hayan incurrido en irregularidades.
En este escenario, ninguna reforma legal podrá pasar sin el aval del tricolor y, en cambio, ese partido llevará mano en sus propuestas legislativas que en alianza con el PVEM podrán pasar sin mayor problema.
De confirmarse los triunfos priistas y oficializarse el porcentaje para el reparto de plurinominales, los personajes que tendrían control sobre el mayor número de legisladores serían la presidenta del partido, Beatriz Paredes; el Gobernador Enrique Peña, y Mandatarios cuyos estados tienen una mayor cantidad de distritos, como Ulises Ruiz, de Oaxaca, y Fidel Herrera, de Veracruz.
Caída panista
Según los resultados preliminares de la elección de ayer, el PAN no se pudo mantener como primera fuerza en San Lázaro, la cual había obtenido por primera vez en su historia hace tres años, cuando se alzó con el triunfo en la Presidencia y además ganó la mayor cantidad de escaños en el Senado.
Los votos para el PAN le dan la ventaja en 76 distritos y su porcentaje le alcanza para 146 curules, con las cuales queda como segunda fuerza.
El PRD cae. De los 127 diputados que tiene actualmente y que fueron producto del efecto López Obrador en 2006, ahora pasará a 72.
De confirmarse los porcentajes de votación para los partidos pequeños, el PT, Panal y Convergencia salvarían el registro. No así el PSD.
Jorge Arturo Hidalgo, Reforma, 6 de julio.
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