De no haber ocurrido la ruptura de la alianza entre PRD, PT y Convergencia, los tres partidos habrían obtenido 13 distritos más en las elecciones del pasado domingo.
Tan sólo en el estado de Guerrero, el PRD perdió frente al PRI cuatro distritos, dos de ellos en Acapulco, por una diferencia que Convergencia se llevó para sí mismo.
En el Distrito Federal perdió cuatro distritos, dos en Morelos, uno en Michoacán y dos más en el Estado de México.
Un comparativo de los porcentajes obtenidos por cada uno de los tres partidos en los 300 distritos federales del país, a partir de los resultados dados a conocer por el IFE, demuestran que la estrategia de Andrés Manuel López Obrador de llamar a votar de manera diferenciada, aunado al rechazo de los tres partidos a construir una alianza que les permitiera ir juntos al proceso electoral federal, debido a las diferencias políticas que dejó en ellos el hecho que el PRD haya impulsado la desaparición de las coaliciones, sí afectó de manera considerable las aspiraciones perredistas.
Además, el PRD pasó a ser cuarta, quinta y hasta sexta fuerza política en 15 de las 32 entidades del país. Tras los resultados, sólo se mantiene como primera fuerza en el Distrito Federal, Michoacán, Zacatecas y Baja California Sur.
Tras la ruptura de toda posibilidad de alianza con PT y Convergencia, partidos a los que Andrés Manuel López Obrador decidió apoyar en todo el país, a excepción del Distrito Federal y Tabasco, el PRD definió un escenario de hasta 60 distritos de mayoría que podría ganar, sin embargo el pasado domingo, sólo ganó 39. El desplome fue en 19 distritos, principalmente ubicados en dos de sus bastiones: Guerrero y Chiapas.
Guerrero: debacle total
El caso más significativo de que la ruptura afectó las aspiraciones electorales ocurrió en Guerrero, donde el PRD perdió ocho de los nueve distritos en disputa, todos frente al PRI.
Pero en cuatro de ellos, dos con sede en Acapulco, uno en Tlapa y otro en Chilapa, los votos que obtuvo Convergencia habrían sido suficientes para ganarle al tricolor.
De acuerdo con las cifras oficiales, en los distritos de Acapulco, el PRD se quedó a 6 mil y 4 mil votos de diferencia aproximada con el PRI. Convergencia obtuvo en el primer caso 19 mil sufragios y en el otro distrito 7 mil 300. Mientras, el PT sumó 2 mil 300 y 2 mil votos. Si los tres casos su hubieran sumado, la coalición PRD-PT-Convergencia habría ganado al PRI con una diferencia de 14 mil y poco menos de 6 mil votos en los dos distritos de Acapulco.
Igualmente ocurrió en Tlapa y Chilapa, donde el PRI ganó por cerca de 3 mil y 5 mil votos, mismos que pudo haber aportado mayoritariamente el PT, que logró 4 mil 700 y 3 mil 400; mientras Convergencia logró mil 650 y 2 mil 200, suficientes para haber hecho la diferencia.
El municipio guerrerense de Acapulco era hasta el año pasado bastión perredista, pero se convirtió en epicentro de las disputas electorales entre antiguos aliados: Gloria Sierra, candidata del PRD, contra Luis Walton de Convergencia; sus votos habrían sido la diferencia frente al triunfo del priísta Manuel Añorve.
En el Distrito Federal, de los 27 distritos, el PRD perdió, de acuerdo con las cifras oficiales, cinco con el PAN y dos con PT: el 4 y el 19 de Iztapalapa.
En el Estado de México, los votos de PT y Convergencia habrían sido suficientes al PRD para ganarle al PRI los distritos 30 y 31 de Nezahuacóyotl.
Casos similares ocurrieron en los distritos morelenses de Jiutepec y Cuautla, lo mismo que en Jiquilpan de Juárez, en Michoacán.
El fracaso en la concreción de alianzas con sus antiguos aliados, y otros factores que llevaron al PRD al desplome del 12 por ciento también lo ubicó como cuarta fuerza en los estados de Baja California, Coahuila, Guanajuato, Jalisco, puebla, Querétaro, San Luis Potosí y Yucatán. En estos, el Partido Verde Ecologista alcanzó el tercer lugar.
En los estados de Aguascalientes, Colima, Chihuahua, Durango, Nuevo León y Sinaloa cayó hasta la quinta fuerza, por detrás del Verde Ecologista y de Nueva Alianza, partido que tiene tres años con registro como fuerza política nacional.
La peor situación se vive en Campeche, donde el PRD de ubica como sexta fuerza política, por debajo del Verde, Nueva Alianza y Convergencia.
- Claves
Culpan al CEN
• Candidatos electos de la corriente Izquierda Social responsabilizaron a la dirigencia nacional de la debacle del PRD en el DF.
• En conferencia de prensa, Valentina Batres y Ramón Jiménez, candidatos electos a diputados local y federal, respectivamente, señalaron que las fallas de la “errática” campaña electoral nacional ocasionaron que el PRD capitalino perdiera algunos distritos en la Ciudad de México.
• Acusaron que la dirigencia nacional prefirió promover la imagen de Jesús Ortega, “lo que no ayudó en nada” al partido en la capital.
Tan sólo en el estado de Guerrero, el PRD perdió frente al PRI cuatro distritos, dos de ellos en Acapulco, por una diferencia que Convergencia se llevó para sí mismo.
En el Distrito Federal perdió cuatro distritos, dos en Morelos, uno en Michoacán y dos más en el Estado de México.
Un comparativo de los porcentajes obtenidos por cada uno de los tres partidos en los 300 distritos federales del país, a partir de los resultados dados a conocer por el IFE, demuestran que la estrategia de Andrés Manuel López Obrador de llamar a votar de manera diferenciada, aunado al rechazo de los tres partidos a construir una alianza que les permitiera ir juntos al proceso electoral federal, debido a las diferencias políticas que dejó en ellos el hecho que el PRD haya impulsado la desaparición de las coaliciones, sí afectó de manera considerable las aspiraciones perredistas.
Además, el PRD pasó a ser cuarta, quinta y hasta sexta fuerza política en 15 de las 32 entidades del país. Tras los resultados, sólo se mantiene como primera fuerza en el Distrito Federal, Michoacán, Zacatecas y Baja California Sur.
Tras la ruptura de toda posibilidad de alianza con PT y Convergencia, partidos a los que Andrés Manuel López Obrador decidió apoyar en todo el país, a excepción del Distrito Federal y Tabasco, el PRD definió un escenario de hasta 60 distritos de mayoría que podría ganar, sin embargo el pasado domingo, sólo ganó 39. El desplome fue en 19 distritos, principalmente ubicados en dos de sus bastiones: Guerrero y Chiapas.
Guerrero: debacle total
El caso más significativo de que la ruptura afectó las aspiraciones electorales ocurrió en Guerrero, donde el PRD perdió ocho de los nueve distritos en disputa, todos frente al PRI.
Pero en cuatro de ellos, dos con sede en Acapulco, uno en Tlapa y otro en Chilapa, los votos que obtuvo Convergencia habrían sido suficientes para ganarle al tricolor.
De acuerdo con las cifras oficiales, en los distritos de Acapulco, el PRD se quedó a 6 mil y 4 mil votos de diferencia aproximada con el PRI. Convergencia obtuvo en el primer caso 19 mil sufragios y en el otro distrito 7 mil 300. Mientras, el PT sumó 2 mil 300 y 2 mil votos. Si los tres casos su hubieran sumado, la coalición PRD-PT-Convergencia habría ganado al PRI con una diferencia de 14 mil y poco menos de 6 mil votos en los dos distritos de Acapulco.
Igualmente ocurrió en Tlapa y Chilapa, donde el PRI ganó por cerca de 3 mil y 5 mil votos, mismos que pudo haber aportado mayoritariamente el PT, que logró 4 mil 700 y 3 mil 400; mientras Convergencia logró mil 650 y 2 mil 200, suficientes para haber hecho la diferencia.
El municipio guerrerense de Acapulco era hasta el año pasado bastión perredista, pero se convirtió en epicentro de las disputas electorales entre antiguos aliados: Gloria Sierra, candidata del PRD, contra Luis Walton de Convergencia; sus votos habrían sido la diferencia frente al triunfo del priísta Manuel Añorve.
En el Distrito Federal, de los 27 distritos, el PRD perdió, de acuerdo con las cifras oficiales, cinco con el PAN y dos con PT: el 4 y el 19 de Iztapalapa.
En el Estado de México, los votos de PT y Convergencia habrían sido suficientes al PRD para ganarle al PRI los distritos 30 y 31 de Nezahuacóyotl.
Casos similares ocurrieron en los distritos morelenses de Jiutepec y Cuautla, lo mismo que en Jiquilpan de Juárez, en Michoacán.
El fracaso en la concreción de alianzas con sus antiguos aliados, y otros factores que llevaron al PRD al desplome del 12 por ciento también lo ubicó como cuarta fuerza en los estados de Baja California, Coahuila, Guanajuato, Jalisco, puebla, Querétaro, San Luis Potosí y Yucatán. En estos, el Partido Verde Ecologista alcanzó el tercer lugar.
En los estados de Aguascalientes, Colima, Chihuahua, Durango, Nuevo León y Sinaloa cayó hasta la quinta fuerza, por detrás del Verde Ecologista y de Nueva Alianza, partido que tiene tres años con registro como fuerza política nacional.
La peor situación se vive en Campeche, donde el PRD de ubica como sexta fuerza política, por debajo del Verde, Nueva Alianza y Convergencia.
- Claves
Culpan al CEN
• Candidatos electos de la corriente Izquierda Social responsabilizaron a la dirigencia nacional de la debacle del PRD en el DF.
• En conferencia de prensa, Valentina Batres y Ramón Jiménez, candidatos electos a diputados local y federal, respectivamente, señalaron que las fallas de la “errática” campaña electoral nacional ocasionaron que el PRD capitalino perdiera algunos distritos en la Ciudad de México.
• Acusaron que la dirigencia nacional prefirió promover la imagen de Jesús Ortega, “lo que no ayudó en nada” al partido en la capital.
Liliana Padilla, Milenio, 10 de julio.
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