La economía de México ha sido la más afectada de Latinoamérica por la recesión global y será la nación que tardará más tiempo en recuperarse, de acuerdo con un trabajo del Grupo de Diarios América (GDA).
Según la encuesta que recaba trimestralmente el GDA —al que pertenece EL UNIVERSAL— la economía de México será la que más decrecerá este año, con un registro de -7.2% respecto a 2008; la de Brasil crecerá 0.33% y en Colombia, el desarrollo será nulo.
En tanto, se estima que el Producto Interno Bruto (PIB) de Chile marcará -1.2%; en Costa Rica, -1.3%; y en Venezuela, -1% a tasa anual, en 2009.
El mayor deterioro de México se debe, en gran parte, a su estrecha relación económica con Estados Unidos, epicentro de la crisis financiera.
En contraste, naciones del sur de América mantienen a flote su comercio gracias al crecimiento de China y su elevada demanda de recursos naturales. En el caso de Brasil, que se prevé sea el único país de la región que tendrá crecimiento económico durante este año, se ejercieron cerca de 20 mil millones de dólares en un solo programa orientado al subsidio de vivienda habitacional para el sector de la construcción civil.
En México, las medidas anunciadas en las primeras etapas de la crisis se quedaron cortas en la práctica.
En los primeros siete meses del año, el gasto total en inversión física ascendió a 20 mil 700 millones de dólares, la mitad de lo previsto inicialmente.
La empresa calificadora Merrill Lynch estimó que mientras a México y a Chile les tomará casi dos años en llegar a los niveles que tenían antes de la crisis, a Brasil y a Perú apenas les implicará en tiempo, los próximos cinco trimestres.
Para enfrentar la crisis económica global, a inicios de año se anunciaron en todo el mundo diversas medidas contracíclicas, orientadas a incrementar o mantener el consumo y el empleo.
En México, los anuncios se enfocaron en incrementar el gasto en infraestructura, de tal forma que la inversión impulsada en este rubro por los sectores público y privado alcanzaría los 570 mil millones de pesos (casi 42 mil millones de dólares).
Según la encuesta que recaba trimestralmente el GDA —al que pertenece EL UNIVERSAL— la economía de México será la que más decrecerá este año, con un registro de -7.2% respecto a 2008; la de Brasil crecerá 0.33% y en Colombia, el desarrollo será nulo.
En tanto, se estima que el Producto Interno Bruto (PIB) de Chile marcará -1.2%; en Costa Rica, -1.3%; y en Venezuela, -1% a tasa anual, en 2009.
El mayor deterioro de México se debe, en gran parte, a su estrecha relación económica con Estados Unidos, epicentro de la crisis financiera.
En contraste, naciones del sur de América mantienen a flote su comercio gracias al crecimiento de China y su elevada demanda de recursos naturales. En el caso de Brasil, que se prevé sea el único país de la región que tendrá crecimiento económico durante este año, se ejercieron cerca de 20 mil millones de dólares en un solo programa orientado al subsidio de vivienda habitacional para el sector de la construcción civil.
En México, las medidas anunciadas en las primeras etapas de la crisis se quedaron cortas en la práctica.
En los primeros siete meses del año, el gasto total en inversión física ascendió a 20 mil 700 millones de dólares, la mitad de lo previsto inicialmente.
La empresa calificadora Merrill Lynch estimó que mientras a México y a Chile les tomará casi dos años en llegar a los niveles que tenían antes de la crisis, a Brasil y a Perú apenas les implicará en tiempo, los próximos cinco trimestres.
Para enfrentar la crisis económica global, a inicios de año se anunciaron en todo el mundo diversas medidas contracíclicas, orientadas a incrementar o mantener el consumo y el empleo.
En México, los anuncios se enfocaron en incrementar el gasto en infraestructura, de tal forma que la inversión impulsada en este rubro por los sectores público y privado alcanzaría los 570 mil millones de pesos (casi 42 mil millones de dólares).
Ixel Yutzil González, El Universal, 5 de octubre.
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