El sector empresarial rechazó el paquete económico del presidente Felipe Calderón y en especial la propuesta de incremento de impuestos.
En pasarela ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, empresarios de la industria de telecomunicaciones, automotriz, cervecera, de juegos y sorteos, de tiendas de autoservicio y representantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) pidieron a los diputados no aprobar un alza impositiva, ya que “desincentivará la inversión, el consumo y la generación de empleos”.
Luis Foncerrada, presidente del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), señaló que se requiere de un sistema impositivo competitivo simple y que propicie la inversión.
En tanto, Fernando Ruiz Sahagún, integrante del comité fiscal del CCE, dijo que para aumentar la recaudación se deben hacer ajustes al catastro y que el impuesto predial se incremente de manera importante en los estados, donde es baja la recaudación de impuestos.
Sin embargo, aseguró que el CCE sí apoya la contribución contra la pobreza, ya que “es un impuesto que va en el camino correcto, que aumenta la base gravable, aumenta la eficiencia recaudatoria y sobre todo da la sensación de pertenencia al momento que todos pagan”.
Agregó que es importante que este impuesto a la pobreza no tenga huecos; “si empezamos a hacer distinciones entre canastas básicas, productos industrializados y no industrializados, vamos a caer exactamente en el problema que tiene actualmente el Impuesto al Valor Agregado”.
En su momento, Gustavo Cantú, vicepresidente de la Asociación Nacional de Telecomunicaciones y vicepresidente corporativo de Nextel de México, señaló que el Impuesto Especial de Producción y Servicios (IEPS) del cuatro por ciento que se pretende “es una muy mala idea” porque afectará a toda la población, ya que las telecomunicaciones “son un producto de consumo masivo, no es un producto de lujo”.
Tras señalar que el 80 por ciento de la población utiliza servicios de telecomunicaciones y que la industria ya tiene 14 gravámenes, Cantú mencionó que con agilizar la licitación del espectro radioeléctrico y de la fibra oscura se podrían recaudar por lo menos 14 mil millones de pesos, que es lo que busca el gobierno federal con el IEPS.
La industria cervecera, por su parte, expresó que el impuesto que pretende cobrar el gobierno federal dañará gravemente al sector en inversión y generación de empleo.
Propuso que “si a esta industria se le permite con la misma tasa del 25 por ciento que siga elevando su tendencia de crecimiento, es capaz de aportar al país mil millones de pesos, que es la cantidad que pretende recaudar con el impuesto”.
En pasarela ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, empresarios de la industria de telecomunicaciones, automotriz, cervecera, de juegos y sorteos, de tiendas de autoservicio y representantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) pidieron a los diputados no aprobar un alza impositiva, ya que “desincentivará la inversión, el consumo y la generación de empleos”.
Luis Foncerrada, presidente del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), señaló que se requiere de un sistema impositivo competitivo simple y que propicie la inversión.
En tanto, Fernando Ruiz Sahagún, integrante del comité fiscal del CCE, dijo que para aumentar la recaudación se deben hacer ajustes al catastro y que el impuesto predial se incremente de manera importante en los estados, donde es baja la recaudación de impuestos.
Sin embargo, aseguró que el CCE sí apoya la contribución contra la pobreza, ya que “es un impuesto que va en el camino correcto, que aumenta la base gravable, aumenta la eficiencia recaudatoria y sobre todo da la sensación de pertenencia al momento que todos pagan”.
Agregó que es importante que este impuesto a la pobreza no tenga huecos; “si empezamos a hacer distinciones entre canastas básicas, productos industrializados y no industrializados, vamos a caer exactamente en el problema que tiene actualmente el Impuesto al Valor Agregado”.
En su momento, Gustavo Cantú, vicepresidente de la Asociación Nacional de Telecomunicaciones y vicepresidente corporativo de Nextel de México, señaló que el Impuesto Especial de Producción y Servicios (IEPS) del cuatro por ciento que se pretende “es una muy mala idea” porque afectará a toda la población, ya que las telecomunicaciones “son un producto de consumo masivo, no es un producto de lujo”.
Tras señalar que el 80 por ciento de la población utiliza servicios de telecomunicaciones y que la industria ya tiene 14 gravámenes, Cantú mencionó que con agilizar la licitación del espectro radioeléctrico y de la fibra oscura se podrían recaudar por lo menos 14 mil millones de pesos, que es lo que busca el gobierno federal con el IEPS.
La industria cervecera, por su parte, expresó que el impuesto que pretende cobrar el gobierno federal dañará gravemente al sector en inversión y generación de empleo.
Propuso que “si a esta industria se le permite con la misma tasa del 25 por ciento que siga elevando su tendencia de crecimiento, es capaz de aportar al país mil millones de pesos, que es la cantidad que pretende recaudar con el impuesto”.
Blanca Estela Botello, Crónica, 10 de octubre.
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