Buenos propósitos

Después de 12 días de negociaciones en las que 193 países trataron infructuosamente de pactar un nuevo protocolo sobre el medio ambiente, éstos son los principales puntos del acuerdo de Copenhague, que el titular de la Secretaría del Cambio Climático, Yvo de Boer, definió como una carta de “buenas intenciones”.

– Se “toma conocimiento” del objetivo de limitar en dos grados el calentamiento global. Según el panel intergubernamental, un calentamiento superior sería catastrófico para los humanos y la naturaleza.

– Antes del 31 de enero de 2010 los industrializados deben presentar sus metas de reducción de emisiones para 2020. El documento no propone un objetivo común para ese conjunto de Estados. Las metas de las naciones en desarrollo dependerá de la ayuda financiera y tecnológica que reciban.
– Los industrializados aportarán a los países pobres 30 mil millones de dólares entre 2010 y 2012 para ayudarlos a enfrentar los efectos del cambio climático y promover su desarrollo no contaminante.

– Las naciones emergentes y en desarrollo deben permitir “análisis y consultas internacionales” para sus actividades de protección medioambiental, aunque se tiene que tomar en cuenta sus prioridades nacionales. Con este punto, China logró que no haya inspecciones independientes extranjeras.
La Jornada, 20 de diciembre.

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