El presidente Felipe Calderón y su homólogo de Noruega, Jens Stoltenberg, propusieron crear un fondo verde para financiar las acciones de los países en desarrollo, a fin de enfrentar los efectos del cambio climático.
De acuerdo con la propuesta, el fondo verde empezaría con 10 mil millones de dólares por año hasta 2013 y después incrementaría de 30 a 40 mil millones en 2020.
En la cumbre de cambio climático en Copenhague, el mandatario mexicano declaró que es fundamental que todos aprueben la propuesta para desarrollar un modelo de recaudación amplio.
“Para lograr un resultado ambicioso en Copenhague, es crucial que lleguemos a un acuerdo sobre la financiación de acciones climáticas en los países en desarrollo”, advirtieron los dirigentes.
Ambas naciones calificaron de “inadecuado” el presupuesto que hasta el momento se ha recabado para el cambio climático, por lo que, México y Noruega plantearon una negociación para juntar las propuestas de ambos países, en un nuevo modelo económico, en el que se podría dar un mayor alcance al financiamiento previsible para el cambio climático en los países en desarrollo.
La propuesta noruega era un modelo que exhortaba a las Naciones Unidas a que destinará un porcentaje determinado de la subasta internacional de derechos de emisión para financiar las acciones ambientalistas en los países de tercer mundo.
Mientras, el proyecto del gobierno mexicano proponía establecer un fondo verde basado en las emisiones de gases de efecto invernadero, el PIB y la población de cada país. La articulación de ambas propuestas activará ambas fuentes de ingreso.
“Tenemos que aumentar la cantidad adecuada de financiamiento que combine fuentes complementarias de préstamo. El dinero debe cubrir la adaptación y mitigación en los países en desarrollo basados en los resultados”, afirmaron Calderón y Stoltenberg.
Asimismo, el presidente Calderón se comprometió a bajar las emisiones de gases de efecto invernadero, en los próximos dos años por cuenta propia y continuar después con el financiamiento que reciba de los países desarrollados.
“México está comprometido a reducir las emisiones de CO2 a 50 millones de toneladas por año por sus propio medios y fondos hasta el 2012”, explicó el mandatario.
Además aseguró que el país está preparado a: “llegar a un índice de reducción de gases de efecto invernadero de hasta un 30 por ciento para 2020” y por lo tanto, pidió a los países de primer mundo el financiamiento necesario e intercambio de tecnología para poder cumplir con el objetivo.
“En este compromiso, tomamos en cuenta que las naciones desarrolladas tendrán una gran responsabilidad que nosotros tenemos que compartir proporcionalmente y con solidaridad”, explicó Calderón.
En contra parte, el jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, presidió la conferencia de alcaldes en Copenhague, donde pidió a las Naciones Unidas que incluya y se les tome en cuenta a los gobiernos locales, ya que éstos conocen los resultados y los trabajos de una forma más específica.
El papel de México
México ocupa el lugar 14 en emisión de CO2 debido a que produce cada año 512 millones de toneladas. lo que representa 2% de los gases de efecto invernadero que provocan el calentamiento global.
La cumbre de cambio climático de 2010 se realizará en México, donde se plantea dar más espacio a las ONG y a la comunidad científica.
De acuerdo con la propuesta, el fondo verde empezaría con 10 mil millones de dólares por año hasta 2013 y después incrementaría de 30 a 40 mil millones en 2020.
En la cumbre de cambio climático en Copenhague, el mandatario mexicano declaró que es fundamental que todos aprueben la propuesta para desarrollar un modelo de recaudación amplio.
“Para lograr un resultado ambicioso en Copenhague, es crucial que lleguemos a un acuerdo sobre la financiación de acciones climáticas en los países en desarrollo”, advirtieron los dirigentes.
Ambas naciones calificaron de “inadecuado” el presupuesto que hasta el momento se ha recabado para el cambio climático, por lo que, México y Noruega plantearon una negociación para juntar las propuestas de ambos países, en un nuevo modelo económico, en el que se podría dar un mayor alcance al financiamiento previsible para el cambio climático en los países en desarrollo.
La propuesta noruega era un modelo que exhortaba a las Naciones Unidas a que destinará un porcentaje determinado de la subasta internacional de derechos de emisión para financiar las acciones ambientalistas en los países de tercer mundo.
Mientras, el proyecto del gobierno mexicano proponía establecer un fondo verde basado en las emisiones de gases de efecto invernadero, el PIB y la población de cada país. La articulación de ambas propuestas activará ambas fuentes de ingreso.
“Tenemos que aumentar la cantidad adecuada de financiamiento que combine fuentes complementarias de préstamo. El dinero debe cubrir la adaptación y mitigación en los países en desarrollo basados en los resultados”, afirmaron Calderón y Stoltenberg.
Asimismo, el presidente Calderón se comprometió a bajar las emisiones de gases de efecto invernadero, en los próximos dos años por cuenta propia y continuar después con el financiamiento que reciba de los países desarrollados.
“México está comprometido a reducir las emisiones de CO2 a 50 millones de toneladas por año por sus propio medios y fondos hasta el 2012”, explicó el mandatario.
Además aseguró que el país está preparado a: “llegar a un índice de reducción de gases de efecto invernadero de hasta un 30 por ciento para 2020” y por lo tanto, pidió a los países de primer mundo el financiamiento necesario e intercambio de tecnología para poder cumplir con el objetivo.
“En este compromiso, tomamos en cuenta que las naciones desarrolladas tendrán una gran responsabilidad que nosotros tenemos que compartir proporcionalmente y con solidaridad”, explicó Calderón.
En contra parte, el jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, presidió la conferencia de alcaldes en Copenhague, donde pidió a las Naciones Unidas que incluya y se les tome en cuenta a los gobiernos locales, ya que éstos conocen los resultados y los trabajos de una forma más específica.
El papel de México
México ocupa el lugar 14 en emisión de CO2 debido a que produce cada año 512 millones de toneladas. lo que representa 2% de los gases de efecto invernadero que provocan el calentamiento global.
La cumbre de cambio climático de 2010 se realizará en México, donde se plantea dar más espacio a las ONG y a la comunidad científica.
Karen Benavides, Milenio, 15 de diciembre.
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