Legisladores de PRI y PRD coincidieron en que impulsarán una contrapropuesta de reforma política que, a diferencia de la iniciativa presentada anteayer por Felipe Calderón, incluya cotos al presidencialismo.
El presidente del Senado, el perredista Carlos Navarrete, estimó que el titular del Ejecutivo erró al no incluir el asunto del régimen presidencial en la propuesta de reforma política.
“El viejo presidencialismo, en el que el Presidente era Dios y podía decidir todo, ya pasó a la historia. Todos debemos estar sujetos al régimen de responsabilidades”, sentenció Navarrete, al valorar que la reforma sí quedará aprobada antes del 30 de abril.
Coincidió con el PRI en que es necesario discutir la ratificación de integrantes del gabinete presidencial —uno de los más insistentes planteamientos del líder de los senadores priistas, Manlio Fabio Beltrones—, que el Presidente sea sujeto de responsabilidades, modificar el veto de bolsillo y que el Plan Nacional de Desarrollo pase por la aprobación del Congreso.
El también líder de los senadores perredistas consideró que, al enviar su iniciativa, Calderón dio el primer paso para abrir la discusión; sin embargo, confió que en que lleguen otras iniciativas y se integre una propuesta más avanzada.
En tanto, el vicecoordinador de la fracción del Revolucionario Institucional en la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, se manifestó por impulsar la ratificación del gabinete y la revocación del mandato presidencial, como parte de la reforma política.
El legislador cuestionó el proyecto por limitar al Poder Legislativo sin reformar la estructura de la Presidencia.
“Es indispensable que la reforma política cubra los tres Poderes: el Legislativo, como lo plantea el Presidente; pero también el Ejecutivo, como han planteado diputados y senadores”, expuso.
Secundó, en ese sentido, la exigencia de acotar las facultades del Presidente.
“Estamos en favor, por ejemplo, de controlar al Ejecutivo con la ratificación de los nombramientos de los secretarios de Estado, y de que exista una revocación del mandato presidencial para que haya posibilidad de que la gente reconsidere su decisión”, indicó.
César Augusto Santiago, también vicecoordinador priista, sostuvo a su vez que la iniciativa de Calderón pretende revivir el presidencialismo autoritario de la época del general Plutarco Elías Calles.
“Si no está de acuerdo el Presidente con los impuestos que determine el Congreso de la Unión, los veta; si no está de acuerdo con la asignación del presupuesto, lo veta, y además quiere la oportunidad de mandar dos iniciativas que se tienen qué dictaminar a chaleco”, subrayó.
Insistió, por ello, en que la iniciativa de reforma política de Felipe Calderón “es una propuesta para volver al presidencialismo autoritario, como no se veía desde la época del general Plutarco Elías Calles”.
Al respecto, el líder nacional del PRD, Jesús Ortega, adelantó que el PRD buscará una alianza con el PRI para impulsar dentro de la reforma política la revocación de mandato y la ratificación del gabinete, debido a que se trata de omisiones en la propuesta presidencial.
Expresó que su partido pugnará por fortalecer el Poder Legislativo, a diferencia de lo que sugiere la iniciativa del Presidente.
“Ni siquiera toma la idea de fortalecer al poder Legislativo a través de ratificar a los integrantes del gabinete. Esa es una de las ausencias notables que tiene la propuesta del Presidente”, evaluó.
- Claves
La propuesta federal
• El martes, Felipe Calderón propuso una reforma política integrada por diez puntos que incluye la segunda vuelta en las presidenciales.
• Plantea también la reelección de legisladores y alcaldes por un máximo de 12 años, y reducir de 500 a 400 los diputados, y de 128 a 96 los senadores.
• La iniciativa sugiere crear la figura de la “iniciativa preferente” para proponer dos leyes por cada legislatura y hacer observaciones al presupuesto.
El presidente del Senado, el perredista Carlos Navarrete, estimó que el titular del Ejecutivo erró al no incluir el asunto del régimen presidencial en la propuesta de reforma política.
“El viejo presidencialismo, en el que el Presidente era Dios y podía decidir todo, ya pasó a la historia. Todos debemos estar sujetos al régimen de responsabilidades”, sentenció Navarrete, al valorar que la reforma sí quedará aprobada antes del 30 de abril.
Coincidió con el PRI en que es necesario discutir la ratificación de integrantes del gabinete presidencial —uno de los más insistentes planteamientos del líder de los senadores priistas, Manlio Fabio Beltrones—, que el Presidente sea sujeto de responsabilidades, modificar el veto de bolsillo y que el Plan Nacional de Desarrollo pase por la aprobación del Congreso.
El también líder de los senadores perredistas consideró que, al enviar su iniciativa, Calderón dio el primer paso para abrir la discusión; sin embargo, confió que en que lleguen otras iniciativas y se integre una propuesta más avanzada.
En tanto, el vicecoordinador de la fracción del Revolucionario Institucional en la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, se manifestó por impulsar la ratificación del gabinete y la revocación del mandato presidencial, como parte de la reforma política.
El legislador cuestionó el proyecto por limitar al Poder Legislativo sin reformar la estructura de la Presidencia.
“Es indispensable que la reforma política cubra los tres Poderes: el Legislativo, como lo plantea el Presidente; pero también el Ejecutivo, como han planteado diputados y senadores”, expuso.
Secundó, en ese sentido, la exigencia de acotar las facultades del Presidente.
“Estamos en favor, por ejemplo, de controlar al Ejecutivo con la ratificación de los nombramientos de los secretarios de Estado, y de que exista una revocación del mandato presidencial para que haya posibilidad de que la gente reconsidere su decisión”, indicó.
César Augusto Santiago, también vicecoordinador priista, sostuvo a su vez que la iniciativa de Calderón pretende revivir el presidencialismo autoritario de la época del general Plutarco Elías Calles.
“Si no está de acuerdo el Presidente con los impuestos que determine el Congreso de la Unión, los veta; si no está de acuerdo con la asignación del presupuesto, lo veta, y además quiere la oportunidad de mandar dos iniciativas que se tienen qué dictaminar a chaleco”, subrayó.
Insistió, por ello, en que la iniciativa de reforma política de Felipe Calderón “es una propuesta para volver al presidencialismo autoritario, como no se veía desde la época del general Plutarco Elías Calles”.
Al respecto, el líder nacional del PRD, Jesús Ortega, adelantó que el PRD buscará una alianza con el PRI para impulsar dentro de la reforma política la revocación de mandato y la ratificación del gabinete, debido a que se trata de omisiones en la propuesta presidencial.
Expresó que su partido pugnará por fortalecer el Poder Legislativo, a diferencia de lo que sugiere la iniciativa del Presidente.
“Ni siquiera toma la idea de fortalecer al poder Legislativo a través de ratificar a los integrantes del gabinete. Esa es una de las ausencias notables que tiene la propuesta del Presidente”, evaluó.
- Claves
La propuesta federal
• El martes, Felipe Calderón propuso una reforma política integrada por diez puntos que incluye la segunda vuelta en las presidenciales.
• Plantea también la reelección de legisladores y alcaldes por un máximo de 12 años, y reducir de 500 a 400 los diputados, y de 128 a 96 los senadores.
• La iniciativa sugiere crear la figura de la “iniciativa preferente” para proponer dos leyes por cada legislatura y hacer observaciones al presupuesto.
Con información de Angélica Mercado, Fernando Damián, Daniel Venegas y Liliana Padilla, Milenio, 17 de diciembre.
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