En seis ocasiones han hecho alianzas electorales, pero sólo en tres PAN y PRD han triunfado en las urnas, y de ellas sólo un gobierno ha sido ratificado por la izquierda.
A lo largo de su historia, panistas y perredistas han ido en alianza en Coahuila, Chihuahua, Durango, Yucatán, Oaxaca, Nayarit y Chiapas, con triunfo en los dos últimos.
De las 10 elecciones que se disputarán en 2010, el PRD ha esbozado la posibilidad de alianza con Acción Nacional en tres estados: Oaxaca, Veracruz y Puebla, pero en ninguno con un candidato perredista.
La ambigüedad de la política de alianzas aprobada por el Congreso Nacional del PRD permite analizar caso por caso la viabilidad de un acuerdo con el PAN o, en su caso, con el PRI en Tlaxcala.
El texto de línea política aprobado establece que “las alianzas electorales deberán resolverse tomando en consideración los compromisos programáticos y de gobierno de los candidatos. De preferencia en una alianza amplia se debe privilegiar los candidatos de la sociedad. Nunca una alianza debe mellar el perfil político de izquierda de nuestro partido”.
Las direcciones estatales del PRD en Veracruz y Puebla mantienen acercamientos con el PAN y se ha mencionado la posible postulación de Gerardo Buganza y Rafael Moreno Valle, respectivamente; ambos casos hay oposición de un importante sector perredista, a diferencia de Oaxaca, donde hay una generalizada aceptación.
En esta entidad, definida ya la alianza electoral entre PRD-PT y Convergencia, sólo resta por confirmar la candidatura de Gabino Cué como abanderado del frente opositor al cual aún no se suma Acción Nacional, pero hay pláticas entre ambos partidos.
Pese a que el PRD dejó abierta la posibilidad de las alianzas con el PAN o el PRI, Andrés Manuel López Obrador fue claro al advertir que ninguno de los tres partidos podría aliarse con las fuerzas políticas que representan a la “oligarquía”.
La historia
De la mano del PAN, el PRD ha logrado ganar dos veces vez una gubernatura, en 1999 en Nayarit, con Antonio Echavarría, quien apenas arribó al gobierno lo hizo a un lado. Igualmente, en el año 2000 el panista Pablo Salazar fue candidato a la gubernatura de Chiapas con el apoyo del PRD.
En seis ocasiones han hecho alianzas electorales, pero sólo en tres PAN y PRD han triunfado en las urnas, y de ellas sólo un gobierno ha sido ratificado por la izquierda.
A lo largo de su historia, panistas y perredistas han ido en alianza en Coahuila, Chihuahua, Durango, Yucatán, Oaxaca, Nayarit y Chiapas, con triunfo en los dos últimos.
De las 10 elecciones que se disputarán en 2010, el PRD ha esbozado la posibilidad de alianza con Acción Nacional en tres estados: Oaxaca, Veracruz y Puebla, pero en ninguno con un candidato perredista.
La ambigüedad de la política de alianzas aprobada por el Congreso Nacional del PRD permite analizar caso por caso la viabilidad de un acuerdo con el PAN o, en su caso, con el PRI en Tlaxcala.
El texto de línea política aprobado establece que “las alianzas electorales deberán resolverse tomando en consideración los compromisos programáticos y de gobierno de los candidatos. De preferencia en una alianza amplia se debe privilegiar los candidatos de la sociedad. Nunca una alianza debe mellar el perfil político de izquierda de nuestro partido”.
Las direcciones estatales del PRD en Veracruz y Puebla mantienen acercamientos con el PAN y se ha mencionado la posible postulación de Gerardo Buganza y Rafael Moreno Valle, respectivamente; ambos casos hay oposición de un importante sector perredista, a diferencia de Oaxaca, donde hay una generalizada aceptación.
En esta entidad, definida ya la alianza electoral entre PRD-PT y Convergencia, sólo resta por confirmar la candidatura de Gabino Cué como abanderado del frente opositor al cual aún no se suma Acción Nacional, pero hay pláticas entre ambos partidos.
Pese a que el PRD dejó abierta la posibilidad de las alianzas con el PAN o el PRI, Andrés Manuel López Obrador fue claro al advertir que ninguno de los tres partidos podría aliarse con las fuerzas políticas que representan a la “oligarquía”.
Liliana Padilla, Milenio, 27 de diciembre.
A lo largo de su historia, panistas y perredistas han ido en alianza en Coahuila, Chihuahua, Durango, Yucatán, Oaxaca, Nayarit y Chiapas, con triunfo en los dos últimos.
De las 10 elecciones que se disputarán en 2010, el PRD ha esbozado la posibilidad de alianza con Acción Nacional en tres estados: Oaxaca, Veracruz y Puebla, pero en ninguno con un candidato perredista.
La ambigüedad de la política de alianzas aprobada por el Congreso Nacional del PRD permite analizar caso por caso la viabilidad de un acuerdo con el PAN o, en su caso, con el PRI en Tlaxcala.
El texto de línea política aprobado establece que “las alianzas electorales deberán resolverse tomando en consideración los compromisos programáticos y de gobierno de los candidatos. De preferencia en una alianza amplia se debe privilegiar los candidatos de la sociedad. Nunca una alianza debe mellar el perfil político de izquierda de nuestro partido”.
Las direcciones estatales del PRD en Veracruz y Puebla mantienen acercamientos con el PAN y se ha mencionado la posible postulación de Gerardo Buganza y Rafael Moreno Valle, respectivamente; ambos casos hay oposición de un importante sector perredista, a diferencia de Oaxaca, donde hay una generalizada aceptación.
En esta entidad, definida ya la alianza electoral entre PRD-PT y Convergencia, sólo resta por confirmar la candidatura de Gabino Cué como abanderado del frente opositor al cual aún no se suma Acción Nacional, pero hay pláticas entre ambos partidos.
Pese a que el PRD dejó abierta la posibilidad de las alianzas con el PAN o el PRI, Andrés Manuel López Obrador fue claro al advertir que ninguno de los tres partidos podría aliarse con las fuerzas políticas que representan a la “oligarquía”.
La historia
De la mano del PAN, el PRD ha logrado ganar dos veces vez una gubernatura, en 1999 en Nayarit, con Antonio Echavarría, quien apenas arribó al gobierno lo hizo a un lado. Igualmente, en el año 2000 el panista Pablo Salazar fue candidato a la gubernatura de Chiapas con el apoyo del PRD.
En seis ocasiones han hecho alianzas electorales, pero sólo en tres PAN y PRD han triunfado en las urnas, y de ellas sólo un gobierno ha sido ratificado por la izquierda.
A lo largo de su historia, panistas y perredistas han ido en alianza en Coahuila, Chihuahua, Durango, Yucatán, Oaxaca, Nayarit y Chiapas, con triunfo en los dos últimos.
De las 10 elecciones que se disputarán en 2010, el PRD ha esbozado la posibilidad de alianza con Acción Nacional en tres estados: Oaxaca, Veracruz y Puebla, pero en ninguno con un candidato perredista.
La ambigüedad de la política de alianzas aprobada por el Congreso Nacional del PRD permite analizar caso por caso la viabilidad de un acuerdo con el PAN o, en su caso, con el PRI en Tlaxcala.
El texto de línea política aprobado establece que “las alianzas electorales deberán resolverse tomando en consideración los compromisos programáticos y de gobierno de los candidatos. De preferencia en una alianza amplia se debe privilegiar los candidatos de la sociedad. Nunca una alianza debe mellar el perfil político de izquierda de nuestro partido”.
Las direcciones estatales del PRD en Veracruz y Puebla mantienen acercamientos con el PAN y se ha mencionado la posible postulación de Gerardo Buganza y Rafael Moreno Valle, respectivamente; ambos casos hay oposición de un importante sector perredista, a diferencia de Oaxaca, donde hay una generalizada aceptación.
En esta entidad, definida ya la alianza electoral entre PRD-PT y Convergencia, sólo resta por confirmar la candidatura de Gabino Cué como abanderado del frente opositor al cual aún no se suma Acción Nacional, pero hay pláticas entre ambos partidos.
Pese a que el PRD dejó abierta la posibilidad de las alianzas con el PAN o el PRI, Andrés Manuel López Obrador fue claro al advertir que ninguno de los tres partidos podría aliarse con las fuerzas políticas que representan a la “oligarquía”.
Liliana Padilla, Milenio, 27 de diciembre.
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