Se tiró la piedra sin importar el descalabro al pueblo: campesinos

“¡Eso no se vale!”, advirtió el dirigente de la Confederación Nacional Campesina, Cruz López Aguilar, al asentar que con los recientes ajustes a los energéticos, el precio del diesel agropecuario subió 80 centavos, es decir, más de la mitad del valor que tuvo en 2009.

Dijo que el PRI “asumió el costo político” de incrementar en uno por ciento los impuestos para que el gobierno tuviera dinero suficiente para el gasto y no aumentara el costo de las gasolinas, pero no cumplió. Además –señaló–, el precio internacional del petróleo está a la alza y todo indica que no hay razón para el aumento de los energéticos.

“Se tiró la piedra sin importar que el pueblo salga descalabrado. Todos los días se anuncia la recuperación, pero la realidad aplasta las declaraciones prematuras. El aumento de los productos de la canasta básica es un indicador del rebrote de la inflación y el aumento de la pobreza alimentaria. Hay una política errática en materia de tarifas”, dijo el dirigente ante poco más de medio millar de campesinos reunidos en la Casa del Agrarista, en el contexto del 95 aniversario de la promulgación de la Ley Agraria.

Los gobernadores de San Luis Potosí, Fernando Toranzo Fernández, y de Sinaloa, Jesús Aguilar Padilla, y el secretario general del PRI, Jesús Murillo Karam, también se pronunciaron contra los incrementos. Aguilar Padilla aseguró que los campesinos de Sinaloa aportarán 5 millones de toneladas de maíz del ciclo otoño-invierno 2009-2010 y están comprometidos con la producción de alimentos, pero requieren que se eliminen “burocracias y papeleos que impiden el ejercicio puntual de los recursos”.

En tanto, Toranzo Fernández asentó que no es momento de discutir –como propuso el presidente Felipe Calderón– la relección, sino de atender el derecho a la alimentación diaria de la población y responder a las urgencias. “Un líder que no conoce la historia de su tierra está condenado a repetir los errores del pasado”, destacó.

Murillo Karam señaló que la reforma del Estado tiene que incluir la capacidad de desarrollo del país y considerar que es urgente lograr la igualdad. El campo no necesita de programas asistencialistas, sino de acciones para su desarrollo, ya que es urgente lograr la igualdad.

Ante los señalamientos, el titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Francisco Mayorga Castañeda, puntualizó en entrevista que los precios de granos y oleaginosas no generan presiones inflacionarias, y aseguró que hay suficiente producción agropecuaria para el abasto nacional. “Con la sequía disminuyó 10 por ciento la producción de maíz y bajó la de azúcar, pero hay oferta suficiente, además de que aumentó la producción de leche, huevo, carne y otros bienes agrícolas. Este año el gobierno mantendrá apoyos excepcionales al sector agropecuario”, asfirmó.

Antes, el dirigente de la CNC dijo que los campesinos están preocupados por las secuelas de la sequía que afectó la producción del ciclo primavera-verano de 2009. “No conocemos los datos oficiales del siniestro, pero sí que se perdieron 400 mil hectáreas sembradas con cebada y frijol en Jalisco, y al menos 50 mil de maíz blanco se dañaron; si los productores no tienen el apoyo de semilla y fertilizante quedarán fuera de la actividad productiva”, advirtieron.

Para asegurar que ningún campesino se quede fuera de la actividad agropecuaria, López Aguilar propuso el establecimiento de un programa emergente a más tardar el 30 de abril, y con ello asegurar empleo, tranquilidad social y disponibilidad de alimentos, pues “este año es especial e invita a la insurrección”.

Matilde Pérez, La Jornada, 7 de enero.