La Secretaría del Trabajo tiene listos los dos primeros promocionales con los que defenderá la iniciativa de reforma laboral —que presentó Acción Nacional en la Cámara de Diputados, en marzo pasado—, como parte de la estrategia que impulsa, a fin de que en septiembre próximo la propuesta se discuta y vote por los legisladores.
El mensaje central de los spots es la defensa y el fortalecimiento de los derechos laborales, que estarán a salvo a pesar de las diferencias que enfrenten los trabajadores con los líderes sindicales y de las mujeres “que resulten embarazadas”.
Se trata de dos versiones de comerciales con una duración de 20 segundos para radio y televisión, identificados con los nombres de “obrero” y mujer “embarazada”
de la “campaña reforma labo-
ral” de la Secretaría del Trabajo.
El “cierre oficial” en ambos spots es la promoción del logotipo a color del gobierno federal con el escudo nacional y el eslogan Vivir Mejor, con una voz en off, así como la página electrónica de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
Iniciativa rechazada
Aunque se trata de la difusión de la iniciativa panista, que es rechazada por PRI y PRD, en los promocionales se incluye la leyenda: “Este programa es público, ajeno a cualquier partido político. Queda prohibido el uso para fines distintos a los establecidos en el programa”.
En el comercial identificado como “obrero”, la dependencia federal se refiere a la cláusula de exclusión con la que cuentan algunos sindicatos en su contrato colectivo, la cual consiste en que la empresa concrete el despido de algún trabajador por renunciar o ser expulsado del sindicato.
En siete imágenes se aborda el diálogo entre un hombre joven que busca empleo en el periódico El Clarín y su padre, quien, al verlo en la casa, le pregunta por qué no está en la fábrica.
El hijo responde “con mucha aflicción y enojo” que lo “corrieron”; entonces, el padre pregunta por qué, a lo que el joven responde: “Discutí con el líder sindical y le pidió al patrón que me corriera”.
“El padre contundente le dice a su hijo: ‘¡ No te preocupes, porque de aprobarse la reforma laboral, ya no podrán despedirte por renunciar o por expulsarte del sindicato!’”
Entra la voz en off con la leyenda: “La reforma laboral fortalece los derechos de los trabajadores”.
En ese momento entra a cuadro la imagen del joven que checa la tarjeta de entrada a la fábrica y dice “contento” que “¡la reforma laboral protege mis derechos!”.
En la versión del comercial de la mujer embarazada, la dependencia promueve que con la reforma ninguna mujer podrá ser despedida ni podrán exigir certificado de ingravidez al solicitar empleo.
El spot promueve la imagen de una mujer “con un embarazo apenas notorio” que barre afuera de su casa cuando sale la vecina para ir a trabajar y le pregunta: “¿Qué pasó Rosita, no vas a ir a trabajar”.
Rosita, identificada en el diálogo como “embarazada”, responde: “¡Ay manita!, ¿qué crees?, ¡me despidieron porque el patrón supo que estoy embarazada!”, y agrega “muy afligida” que “ahora nadie va a querer contratarme!”
La vecina le dice a Rosita “contundentemente e indignada”: ‘¡No te preocupes, porque de aprobarse la reforma laboral los patrones ya no podrán despedir a las mujeres que resulten embarazadas!’”.
Al final aparece Rosita en la oficina frente a la computadora y dice “feliz” que “¡la reforma laboral protege mis derechos!”.
La dependencia analiza también la inclusión de los promocionales para publicarlos en medios impresos, como periódicos y revistas, en forma de historietas.
Religiosos, actores relevantes
Los spots forman parte de la estrategia para promover la reforma, que consta de 21 puntos, entre los que la dependencia elaboró un listado de “actores preponderantes” para la aprobación de la reforma laboral.
Además de incluir a los presidentes nacionales de los partidos políticos y gobernadores de la oposición, la secretaría enlistó los nombres de una veintena de líderes religiosos de todas las iglesias del país.
Al respecto, el subsecretario de Trabajo, Álvaro Castro Estrada, afirmó que los líderes religiosos “son actores sociales de relevancia en el país”; aunque admitió que no representa para ellos “una legislación que ataña su propia capacidad como ministros de culto”.
Dijo que “no” se trata de que los líderes religiosos lleven a los fieles el mensaje de apoyar la iniciativa panista, sino que la dependencia federal está dispuesta a difundirla con todos los sectores.
Elba Mónica Bravo, Milenio, 21 de junio.
El mensaje central de los spots es la defensa y el fortalecimiento de los derechos laborales, que estarán a salvo a pesar de las diferencias que enfrenten los trabajadores con los líderes sindicales y de las mujeres “que resulten embarazadas”.
Se trata de dos versiones de comerciales con una duración de 20 segundos para radio y televisión, identificados con los nombres de “obrero” y mujer “embarazada”
de la “campaña reforma labo-
ral” de la Secretaría del Trabajo.
El “cierre oficial” en ambos spots es la promoción del logotipo a color del gobierno federal con el escudo nacional y el eslogan Vivir Mejor, con una voz en off, así como la página electrónica de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
Iniciativa rechazada
Aunque se trata de la difusión de la iniciativa panista, que es rechazada por PRI y PRD, en los promocionales se incluye la leyenda: “Este programa es público, ajeno a cualquier partido político. Queda prohibido el uso para fines distintos a los establecidos en el programa”.
En el comercial identificado como “obrero”, la dependencia federal se refiere a la cláusula de exclusión con la que cuentan algunos sindicatos en su contrato colectivo, la cual consiste en que la empresa concrete el despido de algún trabajador por renunciar o ser expulsado del sindicato.
En siete imágenes se aborda el diálogo entre un hombre joven que busca empleo en el periódico El Clarín y su padre, quien, al verlo en la casa, le pregunta por qué no está en la fábrica.
El hijo responde “con mucha aflicción y enojo” que lo “corrieron”; entonces, el padre pregunta por qué, a lo que el joven responde: “Discutí con el líder sindical y le pidió al patrón que me corriera”.
“El padre contundente le dice a su hijo: ‘¡ No te preocupes, porque de aprobarse la reforma laboral, ya no podrán despedirte por renunciar o por expulsarte del sindicato!’”
Entra la voz en off con la leyenda: “La reforma laboral fortalece los derechos de los trabajadores”.
En ese momento entra a cuadro la imagen del joven que checa la tarjeta de entrada a la fábrica y dice “contento” que “¡la reforma laboral protege mis derechos!”.
En la versión del comercial de la mujer embarazada, la dependencia promueve que con la reforma ninguna mujer podrá ser despedida ni podrán exigir certificado de ingravidez al solicitar empleo.
El spot promueve la imagen de una mujer “con un embarazo apenas notorio” que barre afuera de su casa cuando sale la vecina para ir a trabajar y le pregunta: “¿Qué pasó Rosita, no vas a ir a trabajar”.
Rosita, identificada en el diálogo como “embarazada”, responde: “¡Ay manita!, ¿qué crees?, ¡me despidieron porque el patrón supo que estoy embarazada!”, y agrega “muy afligida” que “ahora nadie va a querer contratarme!”
La vecina le dice a Rosita “contundentemente e indignada”: ‘¡No te preocupes, porque de aprobarse la reforma laboral los patrones ya no podrán despedir a las mujeres que resulten embarazadas!’”.
Al final aparece Rosita en la oficina frente a la computadora y dice “feliz” que “¡la reforma laboral protege mis derechos!”.
La dependencia analiza también la inclusión de los promocionales para publicarlos en medios impresos, como periódicos y revistas, en forma de historietas.
Religiosos, actores relevantes
Los spots forman parte de la estrategia para promover la reforma, que consta de 21 puntos, entre los que la dependencia elaboró un listado de “actores preponderantes” para la aprobación de la reforma laboral.
Además de incluir a los presidentes nacionales de los partidos políticos y gobernadores de la oposición, la secretaría enlistó los nombres de una veintena de líderes religiosos de todas las iglesias del país.
Al respecto, el subsecretario de Trabajo, Álvaro Castro Estrada, afirmó que los líderes religiosos “son actores sociales de relevancia en el país”; aunque admitió que no representa para ellos “una legislación que ataña su propia capacidad como ministros de culto”.
Dijo que “no” se trata de que los líderes religiosos lleven a los fieles el mensaje de apoyar la iniciativa panista, sino que la dependencia federal está dispuesta a difundirla con todos los sectores.
Elba Mónica Bravo, Milenio, 21 de junio.
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