El secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, sostuvo que las averiguaciones previas, por ley, “son secretas para quien las haga”, no se pueden revelar, con lo que convalidó la decisión de la Secretaría de la Defensa Nacional de impedir a la Comisión Nacional de Derechos Humanos el acceso a esa información, derivada de la muerte de dos menores en Tamaulipas, el 3 de abril pasado.
En conferencia de prensa, reconoció que este tipo de movilizaciones de fuerzas federales para enfrentar a delincuentes afectan en buena medida las escenas del crimen, lo cual atribuyó a “falta de entrenamiento, no de dolo o de mala intención”, por lo que se tienen que buscar ciertas reglas de disciplina mínima para evitar esas alteraciones.
El funcionario afirmó que las indagatorias se tienen que mantener en secreto para no alertar al culpable, no estigmatizar al inocente y no socializar la duda propia.
“Ellos (en la Sedena) tienen la competencia natural para hacer estas investigaciones, no le pueden revelar esa información a la CNDH, está en la ley ni a terceros ni a nadie, sólo pueden conocer de esas informaciones, en los términos que señala la ley, quienes están facultados por ellos, pero no gente ajena a la dependencia”, expuso Gómez Mont.
La Sedena abrió una averiguación previa sobre ese acontecimiento, en el que los niños Bryan y Martín Almanza murieron, presuntamente en un enfrentamiento entre sicarios y militares, aunque la CNDH ha concluido que los impactos de bala a la camioneta donde viajaban los menores con familiares provinieron de los soldados.
Gómez Mont reafirmó que la propia CNDH acepta que no tiene todas las versiones de los hechos, por lo que el funcionario consideró que en “la valoración que se haga de esa recomendación, se tiene que reconocer que está descontextualizada, que es cierto que parte de ese problema es que no puede conocer las indagatorias que hace la autoridad y que así lo ha dispuesto la ley, es cierto”.
Al preguntarle si acepta el señalamiento de esa comisión, de que fue alterada la escena por militares, el titular de la Segob respondió que tendría que ponerse él a hacer una investigación en ese sentido.
“Sí es cierto, y ya se ha señalado, que la Procuraduría General de la República, la Procuraduría General de Justicia Militar y las fuerzas armadas están generando protocolos para crear una cultura de respeto a la escena del crimen y facilitar la labor de las investigaciones”, dijo.
El funcionario explicó que este tipo de eventos son violentos y se tienen que tomar las precauciones para ver que el riesgo de agresión ya haya pasado “y normalmente esta movilización afecta en buena medida las escenas del crimen; tienen que tener en claro que ya no están expuestos los que están en esos lugares al fuego cruzado al que están confrontando”.
Dijo que por ello se tienen que buscar ciertas reglas de “disciplina mínima, que a pesar de que sin dejar de reconocer la necesidad de esas maniobras, no alteren las escenas del crimen, de los hechos, para que los peritos puedan realizar sus labores”.
En todo caso, sostuvo Gómez Mont, es un problema “de falta de entrenamiento, no de dolo o de mala intención”.
Claves
Omisión
La CNDH acepta no haber podido llegar a mayores detalles sobre la muerte de dos menores en Tamaulipas, por “la omisión o falta de colaboración” de la Sedena.
Human Rights planteó que la conclusión de la CNDH, que responsabiliza a militares de los disparos contra los menores, resalta la necesidad de dejar de confiar en el Ejército para que investigue sus propios abusos.
El secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, concedió la razón al Poder Legislativo de haber decidido que “las averiguaciones previas son secretas para quien las haga, no las puede revelar”.
México/Mauricio Pérez, Milenio, 19 de junio.
En conferencia de prensa, reconoció que este tipo de movilizaciones de fuerzas federales para enfrentar a delincuentes afectan en buena medida las escenas del crimen, lo cual atribuyó a “falta de entrenamiento, no de dolo o de mala intención”, por lo que se tienen que buscar ciertas reglas de disciplina mínima para evitar esas alteraciones.
El funcionario afirmó que las indagatorias se tienen que mantener en secreto para no alertar al culpable, no estigmatizar al inocente y no socializar la duda propia.
“Ellos (en la Sedena) tienen la competencia natural para hacer estas investigaciones, no le pueden revelar esa información a la CNDH, está en la ley ni a terceros ni a nadie, sólo pueden conocer de esas informaciones, en los términos que señala la ley, quienes están facultados por ellos, pero no gente ajena a la dependencia”, expuso Gómez Mont.
La Sedena abrió una averiguación previa sobre ese acontecimiento, en el que los niños Bryan y Martín Almanza murieron, presuntamente en un enfrentamiento entre sicarios y militares, aunque la CNDH ha concluido que los impactos de bala a la camioneta donde viajaban los menores con familiares provinieron de los soldados.
Gómez Mont reafirmó que la propia CNDH acepta que no tiene todas las versiones de los hechos, por lo que el funcionario consideró que en “la valoración que se haga de esa recomendación, se tiene que reconocer que está descontextualizada, que es cierto que parte de ese problema es que no puede conocer las indagatorias que hace la autoridad y que así lo ha dispuesto la ley, es cierto”.
Al preguntarle si acepta el señalamiento de esa comisión, de que fue alterada la escena por militares, el titular de la Segob respondió que tendría que ponerse él a hacer una investigación en ese sentido.
“Sí es cierto, y ya se ha señalado, que la Procuraduría General de la República, la Procuraduría General de Justicia Militar y las fuerzas armadas están generando protocolos para crear una cultura de respeto a la escena del crimen y facilitar la labor de las investigaciones”, dijo.
El funcionario explicó que este tipo de eventos son violentos y se tienen que tomar las precauciones para ver que el riesgo de agresión ya haya pasado “y normalmente esta movilización afecta en buena medida las escenas del crimen; tienen que tener en claro que ya no están expuestos los que están en esos lugares al fuego cruzado al que están confrontando”.
Dijo que por ello se tienen que buscar ciertas reglas de “disciplina mínima, que a pesar de que sin dejar de reconocer la necesidad de esas maniobras, no alteren las escenas del crimen, de los hechos, para que los peritos puedan realizar sus labores”.
En todo caso, sostuvo Gómez Mont, es un problema “de falta de entrenamiento, no de dolo o de mala intención”.
Claves
Omisión
La CNDH acepta no haber podido llegar a mayores detalles sobre la muerte de dos menores en Tamaulipas, por “la omisión o falta de colaboración” de la Sedena.
Human Rights planteó que la conclusión de la CNDH, que responsabiliza a militares de los disparos contra los menores, resalta la necesidad de dejar de confiar en el Ejército para que investigue sus propios abusos.
El secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, concedió la razón al Poder Legislativo de haber decidido que “las averiguaciones previas son secretas para quien las haga, no las puede revelar”.
México/Mauricio Pérez, Milenio, 19 de junio.
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