Bimbo replantea plan en Venezuela

A contracorriente de las actividades de otras empresas mexicanas que decidieron reducir sus operaciones en Venezuela, debido a factores políticos, Grupo Bimbo, la empresa panificadora más grande de América Latina, replanteó su estrategia de negocios en aquel país con la intención de sustituir las importaciones de diversos productos, y evitar un impacto prolongado de la devaluación del bolívar.

Grupo Bimbo informó a EL UNIVERSA que, en lo que va del año, la empresa implementó un programa de mantenimiento en la Planta Guarenas, ubicada en la ciudad del mismo nombre en Venezuela, y un proceso de modernización de equipo.

“La compra de nueva maquinaria nos permitirá al final del año sustituir las importaciones que representan 12% de las ventas”, dijo la empresa del osito, que negó que el gobierno de Venezuela restrinja o limite la elaboración de sus productos.

“Bimbo es respetuoso del marco jurídico vigente y de las instituciones en todos los países donde tiene presencia”, según el breve comunicado.

De acuerdo con el reporte de la compañía, al final del segundo trimestre, las ventas netas de Grupo Bimbo en América Latina reportaron un crecimiento de 1.4%, respecto a igual periodo del año anterior.

El resultado obedeció, según la empresa, al buen desempeño en países como Chile, Colombia y Brasil, en donde el incremento en los volúmenes, los lanzamientos de nuevos productos, la incorporación de nuevos clientes y la expansión de la red de distribución están dando buenos resultados.

La reducción de las ventas en Venezuela por la devaluación del Bolívar a partir del primero de enero de 2010, parcialmente contrarrestaron los buenos resultados de esas operaciones.

Analistas de Banamex Accival informaron que en América Latina, el EBITDA para la empresa disminuyó 30% (margen EBITDA de 5.4%), impactado principalmente por los resultados de su subsidiaria en Venezuela, que apenas estaría alcanzando su punto de equilibrio.

Los analistas informaron que las ventas del Grupo en el periodo de referencia se incrementaron solamente 0.7%, debido a la debilidad en la demanda, un entorno operativo altamente competitivo y por la devaluación del bolívar en Venezuela.

El Ebitda permaneció prácticamente estable, mientras que el margen bruto presentó una ligera mejora, debido a un menor precio del trigo que fue contrarrestado por mayores gastos de publicidad en México, menores precios en Estados Unidos y el deterioro de su subsidiaria en Venezuela. La utilidad neta disminuyó 12% por gastos financieros no recurrentes, y las ventas en AL registraron un alza de 1.8% en el primer semestre.
Ramiro Alonso, El Universal, 27 de julio.

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