Calderón, por una política de Estado en seguridad

El presidente Felipe Calderón aseveró que “la mayor amenaza a la libertad” que tiene México en el Bicentenario de la Independencia es la inseguridad, el crimen organizado, cuyas actividades representan “el más grande desafío” para el país.

Subrayó que la solución a este problema debe involucrar a todos los gobernantes y estar por encima de ideologías y diferencias políticas, a fin de que se diseñe una estrategia de Estado sustentada en responsabilidades mutuas de quienes ejercen el poder en los diferentes ámbitos de gobierno.

El mandatario hizo una analogía sobre los deberes de los héroes de la Independencia y las responsabilidades que deben tener los políticos de hoy: “Si a Hidalgo y a Morelos les tocó conquistar esa libertad de que goza México, y pagaron nuestra libertad con sus vidas, y ese fue el deber de la generación de la Independencia, el nuestro, el deber de la generación del Bicentenario, es defender esa libertad, preservarla, ampliarla, enriquecerla, ejercerla”.

Al inaugurar la Expo Bicentenario, el titular del Ejecutivo también hizo un llamado al diálogo a todas las fuerzas políticas para que, dentro de sus divergencias y pluralidad, los mexicanos, “la generación del Bicentenario, discutamos el presente y el futuro de México”.

Enfatizó que uno de los temas en el que deben prevalecer las coincidencias es el del combate al crimen organizado. “Es en la seguridad donde está hoy la mayor amenaza a la libertad que ha conquistado México. La seguridad pública es el más grande desafío del país y por ello la solución de este problema debe de estar por encima de ideologías y de intereses de coyuntura, así sean legítimos”, reiteró.

Calderón subrayó que el combate a la criminalidad es más importante que “partidos y credos”, y consideró que esa lucha “debe transformarse en política no sólo de un gobierno, sino en política de Estado”.

Y ello, señaló, sólo podrá construirse no únicamente con las ideas de todos, “sino con el ejercicio de las responsabilidades mutuas”.

“Tenemos un sistema de pesos y contrapesos que equilibra el ejercicio del poder público, y que es un antídoto contra el autoritarismo”, agregó.

Acompañado del gobernador de la entidad, Juan Manuel Oliva, y del secretario de Educación, Alonso Lujambio, y ante la presencia de cientos de invitados, Calderón insistió en convocar al diálogo. “Debemos dialogar sobre el pasado, pero también debemos discutir nuestro presente, y sobre todo, nuestro futuro, el futuro que queremos para nuestro país”, pidió.

Silao, Gto. Juan Pablo Becerra-Acosta, Milenio, 18 de julio.

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