Mandan en la Sierra Fidel y 'Los Pelones'

COXQUIHUI.- "Nadie pasa sin nuestra autorización" frenaron en seco el par de pelones.

El camino bordeado de platanales y papayos estaba cerrado por dos muchachos a bordo de un automóvil rojo con propaganda del priista Javier Duarte, candidato a Gobernador.

Nadie podía entrar a la comunidad La Higuera o a cualquier otra de este municipio indígena en la Sierra del Totonacapan, si no lo autorizaban "Los Pelones", el grupo de choque del priismo que las últimas semanas tenía amenazados a los habitantes de la región.

Ya habían hecho de las suyas en el municipio panista de Zozocolco. Una semana antes de las elecciones, el domingo por la noche, alrededor de 30 muchachos con las caras tapadas y playeras negras llegaron a la plaza, echaron tiros al cielo y golpearon a quien cruzara por el lugar.

Uno de ellos fue Humberto Solís, maestro de la Universidad Veracruzana y simpatizante panista. A bordo de su camioneta apenas alcanzó a ver la tremenda piedrota que le lanzaron en la cara y le provocó traumatismo de la órbita izquierda, fractura orbitaria y edema de Berlin muy severo, según el diagnóstico médico. Es decir, casi pierde el ojo.

A "Los Pelones" también les atribuyen la borradera de bardas con propaganda de la Oposición registrada la noche del 22 de junio en Coxquihui. Según Celedonio Rivera a las 3 de la madrugada 15 jóvenes encapuchados llegaron con cubetas y borraron su simpatía blanquiazul.

"No ladró ni el perro, pero nos despertó el desmadre que se traían los enviados de Reveriano", dijo.

Celedonio se refiere a Reveriano Pérez Vega, el Edil de Coxquihui mejor conocido como el "Pelón mayor". Hay habitantes que se aventuran incluso a decir que Reveriano está poniendo todo para no perder la Alcaldía y continuar con sus labores de pollero.

Todo. Hasta traer una bruja de Catemaco. Eso dicen en el poblado quienes acudieron al cierre de campaña del priista José Vázquez y terminaron con las cuatro reses hechas barbacoa.

Una barbacoa por demás extraña ya que estaba sazonada con polvo de huesos de muerto que la bruja espolvoreó para hechizar a los votantes, según el comensal Ernestino Juárez. El campesino negó sentir una particular atracción por el candidato del PRI, solo notó extraña la diarrea al día siguiente de la gran comilona.

"La verdad no estaba sabrosa la barbacoa. El hechizo no sirvió porque el único que hace cosas aquí en la tierra es el mero mero, Dios".

Por eso "Los Pelones" cerraron el camino a la comunidad La Higuera -y a las comunidades Sabana, Fábrica, Arenal Zavaleta, Cortines y Tangouné- para evitar que cualquiera entre a ella y compre votos de los habitantes afines al priismo, como acusan que hacen los panistas con el programa Oportunidades.

"Los Pelones" bajaron del tsuru rojo sin placas que estaba cruzado en el camino y repitieron la advertencia: "Nadie pasa sin nuestra autorización. Y antes no eres hombre, si no te partimos la madre".

Detrás de su amenaza llegó una camioneta con dos pelones más. Sin disimulo, vestían playeras con la fotografía de Javier Duarte.

Mientras esperaban más refuerzos uno de ellos comentó que se hizo "pelón" porque no hay más trabajo que ser albañil o rascarle a la milpa, que les pagan 500 pesos diarios en días de campaña, que trabajan para defender a los pobres y que es mejor no provocarlos, porque tienen mucho poder.

Y como muestra hicieron traer por radio a una camioneta de la Policía Estatal, dirigida por el comandante José Cortez Pino, según decía su credencial.

Para el comandante no sirvieron los reclamos de por qué un par de muchachos violaban el derecho al libre tránsito que la Constitución da a todos los mexicanos.

"Aquí la Constitución la tienen guardada debajo de la almohada", dijo sin más con su cara regordeta y sudada. Ni con la pistola que le asomaba del cinturón podía impedir a los muchachos hacer de las suyas.

"Aquí el que manda es don Fidel y 'Los Pelones', ¿qué le vamos a hacer?".
Daniela Rea enviada, Reforma, 4 de julio.

0 Responses to "Mandan en la Sierra Fidel y 'Los Pelones'"