A dos años de haber admitido su interés por contender por la Presidencia de la República en 2012, Marcelo Ebrard teje una estrategia para conquistar la candidatura única de la izquierda mexicana que lo lleve a Los Pinos.
Su plan político se respalda en una sola idea: “Buen Gobierno”.
Sus estrategas ven en la promoción activa de sus acciones de gobierno —físicas y sociales— el instrumento clave para apuntalar las aspiraciones presidenciales de Ebrard Casaubón, y aseguran que en este momento no existe un estructura definida para llevar al actual jefe de gobierno a la candidatura del Partido de la Revolución Democrática.
Pretenden que en este momento del juego político, su obra de gobierno sea su mejor plataforma de presentación, que se aprecie, no sólo en la ciudad que gobierna, sino en todos los estados de la República, y que se valore la gobernabilidad que se vive en la capital del país.
Como sucedió en las pasadas elecciones del 4 de julio, el jefe de Gobierno del DF tiene previsto recorrer los estados donde se realizarán elecciones en 2011, para apoyar a los candidatos del PRD que disputarán algún cargo de elección popular, y de paso, mantenerse en el escenario político en el interior del país.
El año próximo estarán en juego seis gubernaturas: Guerrero, Baja California sur, Coahuila, estado de México, Nayarit y Michoacán; y 222 presidenciales municipales. De julio a diciembre de 2011, los partidos aglutinados en el Diálogo para la Reconstrucción de México —PRD, PT y Convergencia— designarán al candidato único que represente a la izquierda mexicana, en las presidenciales de 2012.
De ese “sí aspiro” a la Presidencia, que le declaró al periodista Jorge Ramos de la cadena Univisión de Estados Unidos, el 21 de julio de 2008, Marcelo Ebrard se mueve hoy día sin más plan para consolidar su figura política, que promoviendo sus acciones de gobierno.
Exprime las bondades de las obras de infraestructura que ha realizado en la capital del país, en una campaña discreta, pero de alto impacto, y abona a su causa, las simpatías que resultan de la ampliación de sus programas de gobierno.
Ebrard Casaubón sabe bien que la postulación recaerá en quien se encuentre mejor posicionado dentro del partido el año entrante.
Las acciones de largo plazo
Sus estrategas, algunos consultados por EL UNIVERSAL, explican bajo la condición de no ser citados, que el plan elaborado se sustenta en el principio de “Buen Gobierno”, uno de los preceptos básicos de la administración encabezada por Marcelo Ebrard.
En el recuento se hace énfasis en las acciones concretas que desarrolla el gobierno capitalino, como la construcción de infraestructura de transporte, incluyendo, la línea 12 del Sistema de Transporte Metro, la red del llamado Metrobus y otras vialidades de gran envergadura, y que servirán para consolidar la imagen de Ebrard.
Además de consolidar los programas sociales creados por este gobierno o retomados de la administración de Andrés Manuel López Obrador.
Los estrategas de Marcelo Ebrard recomendaron lanzar nuevos programas, y mejorar y ampliar otros. Se creó el esquema Prepa Sí, que beneficia a más de 200 mil jóvenes, y que representa una generación completa apoyada por el gobierno de la ciudad de México.
El programa de Adultos Mayores, que construyó el propio López Obrador, pero que amplió y consolidó Ebrard. Pasó de 350 mil personas a 470 mil beneficiarios. Los 120 mil adicionales fueron resultado de la reducción de la edad para ser beneficiario. De 70 años se bajo a los 68 años de edad. En cuanto al programa Madres Solas, éste también se ha mejorado al ampliar su cobertura.
“Esta es la estrategia de promoción que está creando el jefe de Gobierno del DF para que los estados de la República se enteren de Marcelo Ebrard Casaubón y de sus acciones de gobierno”, explicó una de las fuentes consultadas.
Los asesores de Ebrard aseguran que esto tiene un importante impacto mediático, que repercute en los estados del país, y admiten que la estrategia está fincada en un “buen gobierno”.
Por otro lado, el apoyo que dio Ebrard en varios estados de la República, en las pasadas campañas electorales, le redituó presencia en los medios.
Los estrategas
El grupo de estrategas de Marcelo Ebrard encargados de posicionarlo como precandidato y candidato del PRD y de la izquierda mexicana, está integrado por al menos seis colaboradores visibles. Todos concentrados en consolidar sus acciones de gobierno y que estas se conozcan de manera masiva.
Mario Delgado, secretario de Finanzas del gobierno de la ciudad de México; Mario Carrillo, secretario de Educación, y a quien escucha Marcelo Ebrard; en la parte territorial y en los enlaces con las organizaciones se encuentra, Jesús Valencia, secretario general del PRD en el Distrito Federal; en cuento a los programas sociales y de desarrollo, José Ángel Ávila, secretario de Gobierno capitalino, y Héctor Serrano Cortés, subsecretario de Programas Delegacionales, quien se ha convertido en un personaje muy cercano a Marcelo Ebrard.
En cuanto al perredismo capitalino se reconoce que existe un apoyo dividido, tanto a López Obrador como a Ebrard, pero que éste comienza a contar con el respaldo de una parte de la clase media que perdió el tabasqueño, principalmente por sus acciones de resistencia tras las elecciones de 2006, una de ellas, el plantón en Paseo de la Reforma.
En cuanto a las organizaciones sociales con presencia e influencia en la ciudad de México, Ebrard cuenta con pactos de entendimiento, lo que ha permitido gobernabilidad en el DF. La relación con las organizaciones consideradas como “duras”, como son las del comercio informal, está vigente.
Entre estas organizaciones están las que lideran Martha Chavarría, Alejandra Barrios (aunque su relación es históricamente con el PRI), y el Movimiento Urbano Popular, también con fuertes vínculos con el PT.
“A diferencia de López Obrador (que lanzo un Proyecto Alternativo de Nación), Marcelo Ebrard explica su plan a través del discurso, que tiene que ver con el medio ambiente, la sustentabilidad, con el desarrollo social, la economía, pero no puede lanzar un plan como López Obrador, por ser un funcionario público, que debe concentrarse en las actividades de gobierno, que es su principal medio de promoción, y que es algo lícito”, explicó uno de sus colaboradores en este esfuerzo por consolidar la candidatura del jefe de Gobierno.
El esfuerzo de Marcelo
De acuerdo con su estrategia, Marcelo Ebrard concentrará gran parte de esfuerzo político en la región central de la república mexicana, tanto en sectores del propio Distrito Federal como del estado de México, y en el norte del país, en esta región donde buscará “contagiar” con algunos de sus planes y programas gobierno, y que le han permitido llevar el liderazgo en distintas áreas, como en la competitividad, recaudación fiscal y en la construcción de infraestructura.
Ebrard buscará una mayor presencia en estados del país aprovechando los distintos procesos electorales de 2011.
“La presencia per se de Marcelo Ebrard en alguno de los lugares de la elección (en julio pasado) abonaba en favor del candidato, pero a su vez eso le ayudó también a ganar adeptos y simpatías, lo que le permitió crear bases de apoyo importantes”, explicó uno de sus estrategas consultados.
Se ha integrado una corriente leal a Marcelo Ebrard Casaubón que en el interior del sol azteca la llaman Ciudadanos en Movimiento.
Su plan político se respalda en una sola idea: “Buen Gobierno”.
Sus estrategas ven en la promoción activa de sus acciones de gobierno —físicas y sociales— el instrumento clave para apuntalar las aspiraciones presidenciales de Ebrard Casaubón, y aseguran que en este momento no existe un estructura definida para llevar al actual jefe de gobierno a la candidatura del Partido de la Revolución Democrática.
Pretenden que en este momento del juego político, su obra de gobierno sea su mejor plataforma de presentación, que se aprecie, no sólo en la ciudad que gobierna, sino en todos los estados de la República, y que se valore la gobernabilidad que se vive en la capital del país.
Como sucedió en las pasadas elecciones del 4 de julio, el jefe de Gobierno del DF tiene previsto recorrer los estados donde se realizarán elecciones en 2011, para apoyar a los candidatos del PRD que disputarán algún cargo de elección popular, y de paso, mantenerse en el escenario político en el interior del país.
El año próximo estarán en juego seis gubernaturas: Guerrero, Baja California sur, Coahuila, estado de México, Nayarit y Michoacán; y 222 presidenciales municipales. De julio a diciembre de 2011, los partidos aglutinados en el Diálogo para la Reconstrucción de México —PRD, PT y Convergencia— designarán al candidato único que represente a la izquierda mexicana, en las presidenciales de 2012.
De ese “sí aspiro” a la Presidencia, que le declaró al periodista Jorge Ramos de la cadena Univisión de Estados Unidos, el 21 de julio de 2008, Marcelo Ebrard se mueve hoy día sin más plan para consolidar su figura política, que promoviendo sus acciones de gobierno.
Exprime las bondades de las obras de infraestructura que ha realizado en la capital del país, en una campaña discreta, pero de alto impacto, y abona a su causa, las simpatías que resultan de la ampliación de sus programas de gobierno.
Ebrard Casaubón sabe bien que la postulación recaerá en quien se encuentre mejor posicionado dentro del partido el año entrante.
Las acciones de largo plazo
Sus estrategas, algunos consultados por EL UNIVERSAL, explican bajo la condición de no ser citados, que el plan elaborado se sustenta en el principio de “Buen Gobierno”, uno de los preceptos básicos de la administración encabezada por Marcelo Ebrard.
En el recuento se hace énfasis en las acciones concretas que desarrolla el gobierno capitalino, como la construcción de infraestructura de transporte, incluyendo, la línea 12 del Sistema de Transporte Metro, la red del llamado Metrobus y otras vialidades de gran envergadura, y que servirán para consolidar la imagen de Ebrard.
Además de consolidar los programas sociales creados por este gobierno o retomados de la administración de Andrés Manuel López Obrador.
Los estrategas de Marcelo Ebrard recomendaron lanzar nuevos programas, y mejorar y ampliar otros. Se creó el esquema Prepa Sí, que beneficia a más de 200 mil jóvenes, y que representa una generación completa apoyada por el gobierno de la ciudad de México.
El programa de Adultos Mayores, que construyó el propio López Obrador, pero que amplió y consolidó Ebrard. Pasó de 350 mil personas a 470 mil beneficiarios. Los 120 mil adicionales fueron resultado de la reducción de la edad para ser beneficiario. De 70 años se bajo a los 68 años de edad. En cuanto al programa Madres Solas, éste también se ha mejorado al ampliar su cobertura.
“Esta es la estrategia de promoción que está creando el jefe de Gobierno del DF para que los estados de la República se enteren de Marcelo Ebrard Casaubón y de sus acciones de gobierno”, explicó una de las fuentes consultadas.
Los asesores de Ebrard aseguran que esto tiene un importante impacto mediático, que repercute en los estados del país, y admiten que la estrategia está fincada en un “buen gobierno”.
Por otro lado, el apoyo que dio Ebrard en varios estados de la República, en las pasadas campañas electorales, le redituó presencia en los medios.
Los estrategas
El grupo de estrategas de Marcelo Ebrard encargados de posicionarlo como precandidato y candidato del PRD y de la izquierda mexicana, está integrado por al menos seis colaboradores visibles. Todos concentrados en consolidar sus acciones de gobierno y que estas se conozcan de manera masiva.
Mario Delgado, secretario de Finanzas del gobierno de la ciudad de México; Mario Carrillo, secretario de Educación, y a quien escucha Marcelo Ebrard; en la parte territorial y en los enlaces con las organizaciones se encuentra, Jesús Valencia, secretario general del PRD en el Distrito Federal; en cuento a los programas sociales y de desarrollo, José Ángel Ávila, secretario de Gobierno capitalino, y Héctor Serrano Cortés, subsecretario de Programas Delegacionales, quien se ha convertido en un personaje muy cercano a Marcelo Ebrard.
En cuanto al perredismo capitalino se reconoce que existe un apoyo dividido, tanto a López Obrador como a Ebrard, pero que éste comienza a contar con el respaldo de una parte de la clase media que perdió el tabasqueño, principalmente por sus acciones de resistencia tras las elecciones de 2006, una de ellas, el plantón en Paseo de la Reforma.
En cuanto a las organizaciones sociales con presencia e influencia en la ciudad de México, Ebrard cuenta con pactos de entendimiento, lo que ha permitido gobernabilidad en el DF. La relación con las organizaciones consideradas como “duras”, como son las del comercio informal, está vigente.
Entre estas organizaciones están las que lideran Martha Chavarría, Alejandra Barrios (aunque su relación es históricamente con el PRI), y el Movimiento Urbano Popular, también con fuertes vínculos con el PT.
“A diferencia de López Obrador (que lanzo un Proyecto Alternativo de Nación), Marcelo Ebrard explica su plan a través del discurso, que tiene que ver con el medio ambiente, la sustentabilidad, con el desarrollo social, la economía, pero no puede lanzar un plan como López Obrador, por ser un funcionario público, que debe concentrarse en las actividades de gobierno, que es su principal medio de promoción, y que es algo lícito”, explicó uno de sus colaboradores en este esfuerzo por consolidar la candidatura del jefe de Gobierno.
El esfuerzo de Marcelo
De acuerdo con su estrategia, Marcelo Ebrard concentrará gran parte de esfuerzo político en la región central de la república mexicana, tanto en sectores del propio Distrito Federal como del estado de México, y en el norte del país, en esta región donde buscará “contagiar” con algunos de sus planes y programas gobierno, y que le han permitido llevar el liderazgo en distintas áreas, como en la competitividad, recaudación fiscal y en la construcción de infraestructura.
Ebrard buscará una mayor presencia en estados del país aprovechando los distintos procesos electorales de 2011.
“La presencia per se de Marcelo Ebrard en alguno de los lugares de la elección (en julio pasado) abonaba en favor del candidato, pero a su vez eso le ayudó también a ganar adeptos y simpatías, lo que le permitió crear bases de apoyo importantes”, explicó uno de sus estrategas consultados.
Se ha integrado una corriente leal a Marcelo Ebrard Casaubón que en el interior del sol azteca la llaman Ciudadanos en Movimiento.
José Luis Ruiz y Francisco Reséndiz, EL Universal, 27 de julio.
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