Asegura edil de Chilpancingo que no vio ninguna traición para nadie

Durante el encuentro en donde se definió al candidato de unidad a la gubernatura del estado de Guerrero, Manuel Añorve Baños, por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), “no vi que hubiera ninguna traición para nadie”, aseguro Héctor Astudillo Flores, presidente municipal de Chilpancingo.

Entrevistado en este puerto durante una reunión de trabajo con el gobernador Zeferino Torreblanca Galindo, Astudillo Flores recordó que durante la designación de Añorve Baños hubo expresiones de solidaridad al término de la intervención de la lideresa nacional de su partido, Beatriz Paredes Rangel.

“El senador Aguirre Rivero le manifestó todo su apoyo al doctor Añorve; incluso hubo un abrazo y expresiones muy cálidas, hasta cariñosas; después participó el diputado Héctor Vicario, después participe yo y finalmente el legislador federal Mario Moreno Arcos”.

Astudillo Flores —quien contendió para gobernador con Zeferino Torreblanca Galindo– dijo también que en dicha reunión los ex gobernadores Rubén Figueroa y René Juárez “no dijeron absolutamente nada, fueron testigos de lo que aconteció ahí”.

Horacio Ramos en Acapulco, La Crónica, 14 de agosto.