El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, prometió no bajar la guardia en la lucha contra grupos ilegales luego de que un coche bomba con cincuenta kilos de anfo, explosivo más potente que la dinamita, estallara a las 5:30 de la mañana de ayer ante las instalaciones de Caracol Radio y la agencia española de noticias EFE, al norte de Bogotá. Siete personas resultaron con heridas leves y 1,160 oficinas y departamentos tuvieron daños importantes, sin que se conozcan el autor ni el objetivo del ataque.
En la torre de doce pisos, tres de ellos ocupados por Caracol Radio, del grupo español Prisa, también funcionan el consulado de Ecuador, la agencia de noticias EFE, oficinas privadas de varios bancos y también de políticos como el ex presidente César Gaviria (1990-1994). Tras asegurar que no había víctimas mortales ni daños graves, Santos, quien asumió su cargo el sábado pasado, dijo temprano en el sitio del estallido que “como todo acto terrorista, lo que quiere es generar miedo a la población, el escepticismo de la gente en las autoridades”.
Santos estuvo acompañado del ministro del Interior, Germán Vargas Lleras y de Defensa, Rodrigo Rivera. También llegaron al sitio mandos militares y el alcalde bogotano, Samuel Moreno. “Vamos a seguir combatiendo al terrorismo con todo lo que tengamos a nuestro alcance”, aseguró el mandatario. “No vamos a caer en la trampa, no nos van a aguar la fiesta”, insistió Santos antes de iniciar con su comitiva una visita a las instalaciones dañadas. “El terrorismo lo vamos a seguir combatiendo...La ‘seguridad democrática’ no va a bajar la guardia un solo milímetro”, agregó el mandatario al referirse a la política de su antecesor, Álvaro Uribe, de combate frontal a grupos ilegales, principalmente de la guerrilla. Santos recorrió a pie la zona de la explosión, en medio de una nube de agentes de la policía y militares, y pidió a la prensa “no hacerle el juego a los terroristas”. Sin señalar responsables, aseguró que “no han ocurrido más cosas, no porque no hayan querido sino porque no han podido. Hemos asistido a la transición de poder más tranquila de las últimas décadas en Colombia y ellos están mortificados”.
El ministro de Defensa dijo que la detonación pudo estar ligada a un carro bomba desactivado el miércoles pasado en la ciudad de Neiva o ser una “secuela terrorista” por el cambio de gobierno. La policía aseguró que el modus operandi y el tipo de explosivo apuntan a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
La explosión del auto Chevrolet Swift 1994 ocurrió en la calle 67, esquina con carrera séptima, activada con un celular. El alcalde de Bogotá informó que hubo daños en 1,160 predios y en el lugar resultó un cráter de 45 centímetros de profundidad y 2.50 metros de diámetro. Para analizar las pruebas se instaló una Comisión de Seguridad.
Darío Arizmendi, periodista de Radio Caracol, estaba conduciendo su programa “Hoy por hoy” cuando ocurrió el hecho e informó en ese instante. “Ha caído buena parte del techo, se ignora el origen de esta explosión que conmovió el edificio que ocupa la cadena. Hay pánico”.
En la noche, unas 500 personas estuvieron ante Caracol Radio con velas y pancartas para repudiar el hecho y acompañando a los afectados por el atentado.
El gobierno de México así, como el de Estados Unidos y la OEA condenaron de inmediato el atentado terrorista. También lo hicieron los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez y de Ecuador, Rafael Correa, acusados por el ex presidente Álvaro Uribe de albergar en sus territorios a guerrilleros de las FARC.
Retira reclamo
La ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, María Ángela Holguín, dijo ayer que ni países ni organismos internacionales harán verificaciones sobre la presunta presencia de guerrilleros de las FARC y el ELN en Venezuela al considerar que ahora se “está mirando hacia adelante”.
“No. Verificación, no. Estamos mirando hacia adelante. Vamos a ver en seguridad qué mecanismos podemos implementar. La idea es que la comisión de seguridad defina los mejores métodos”, declaró Holguín al diario El Tiempo, de Bogotá.
Cronología de atentados en Bogotá
El atentado de ayer se suma a la elevada cifra de acciones terroristas en Bogotá. El 30 de enero de 2002 Caracol Radio sufrió otro ataque con coche bomba, en el que su antigua sede de TV, en el barrio de La Soledad, sufrió cuantiosos daños aunque sin víctimas. La acción fue atribuida a las FARC, aunque el grupo no lo reivindicó. El último atentado, de autoría desconocida, fue el 24 de marzo pasado, con 9 muertos y 59 heridos en Buenaventura. El procedimiento de coche bomba se usó por primera vez en 1985 por narcotraficantes opuestos a las extradiciones a EU, al estallar un vehículo ante la embajada estadunidense en Bogotá.
6 de diciembre de 1989: Un camión bomba deja 63 muertos y 600 heridos junto al edificio del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS, inteligencia estatal). El narcotráfico reivindicó el atentado, uno de los más sangrientos de la historia.
1993: 6 atentados terroristas reivindicados por el narco, con 42 muertos y más de cien heridos.
22 de octubre de 2002: En Bogotá, una explosión no reivindicada deja 3 muertos y 11 heridos en un estacionamiento junto a la sede de la Policía Metropolitana.
9 de diciembre de 2002: Estalla un coche bomba cerca de un cuartel de la Policía en Bogotá con saldo de 69 heridos. Se desconoce la autoría.
7 de febrero de 2003: 36 muertos y más de 200 heridos deja un coche bomba contra el selecto club social El Nogal, en Bogotá, atribuido a las FARC aunque no fue revindicado por el grupo.
9 de agosto de 2003: 1 muerto y 1 herido deja un coche bomba activado por desconocidos en una carretera próxima a Bogotá.
8 de octubre de 2003: 6 muertos y 12 heridos deja un coche bomba frente a un centro comercial de Bogotá. Las autoridades acusan a las FARC, que no reivindica el hecho.
22 octubre de 2003: 15 personas heridas deja un coche bomba en el barrio de Restrepo, al sur de Bogotá, cuya autoría se desconoce.
31 de julio de 2006: 1 civil muerto y 15 soldados heridos por un coche bomba en Bogotá, atribuido por la policía a las FARC.
19 de octubre de 2006: 2 muertos y 5 heridos por coche bomba en la Universidad Militar de Bogotá, en una de las principales zonas de destacamentos castrenses. El presidente Álvaro Uribe acusa a las FARC.
Bogotá/Nayeli Roldán/Agencias, Milenio, 13 de agosto.
En la torre de doce pisos, tres de ellos ocupados por Caracol Radio, del grupo español Prisa, también funcionan el consulado de Ecuador, la agencia de noticias EFE, oficinas privadas de varios bancos y también de políticos como el ex presidente César Gaviria (1990-1994). Tras asegurar que no había víctimas mortales ni daños graves, Santos, quien asumió su cargo el sábado pasado, dijo temprano en el sitio del estallido que “como todo acto terrorista, lo que quiere es generar miedo a la población, el escepticismo de la gente en las autoridades”.
Santos estuvo acompañado del ministro del Interior, Germán Vargas Lleras y de Defensa, Rodrigo Rivera. También llegaron al sitio mandos militares y el alcalde bogotano, Samuel Moreno. “Vamos a seguir combatiendo al terrorismo con todo lo que tengamos a nuestro alcance”, aseguró el mandatario. “No vamos a caer en la trampa, no nos van a aguar la fiesta”, insistió Santos antes de iniciar con su comitiva una visita a las instalaciones dañadas. “El terrorismo lo vamos a seguir combatiendo...La ‘seguridad democrática’ no va a bajar la guardia un solo milímetro”, agregó el mandatario al referirse a la política de su antecesor, Álvaro Uribe, de combate frontal a grupos ilegales, principalmente de la guerrilla. Santos recorrió a pie la zona de la explosión, en medio de una nube de agentes de la policía y militares, y pidió a la prensa “no hacerle el juego a los terroristas”. Sin señalar responsables, aseguró que “no han ocurrido más cosas, no porque no hayan querido sino porque no han podido. Hemos asistido a la transición de poder más tranquila de las últimas décadas en Colombia y ellos están mortificados”.
El ministro de Defensa dijo que la detonación pudo estar ligada a un carro bomba desactivado el miércoles pasado en la ciudad de Neiva o ser una “secuela terrorista” por el cambio de gobierno. La policía aseguró que el modus operandi y el tipo de explosivo apuntan a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
La explosión del auto Chevrolet Swift 1994 ocurrió en la calle 67, esquina con carrera séptima, activada con un celular. El alcalde de Bogotá informó que hubo daños en 1,160 predios y en el lugar resultó un cráter de 45 centímetros de profundidad y 2.50 metros de diámetro. Para analizar las pruebas se instaló una Comisión de Seguridad.
Darío Arizmendi, periodista de Radio Caracol, estaba conduciendo su programa “Hoy por hoy” cuando ocurrió el hecho e informó en ese instante. “Ha caído buena parte del techo, se ignora el origen de esta explosión que conmovió el edificio que ocupa la cadena. Hay pánico”.
En la noche, unas 500 personas estuvieron ante Caracol Radio con velas y pancartas para repudiar el hecho y acompañando a los afectados por el atentado.
El gobierno de México así, como el de Estados Unidos y la OEA condenaron de inmediato el atentado terrorista. También lo hicieron los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez y de Ecuador, Rafael Correa, acusados por el ex presidente Álvaro Uribe de albergar en sus territorios a guerrilleros de las FARC.
Retira reclamo
La ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, María Ángela Holguín, dijo ayer que ni países ni organismos internacionales harán verificaciones sobre la presunta presencia de guerrilleros de las FARC y el ELN en Venezuela al considerar que ahora se “está mirando hacia adelante”.
“No. Verificación, no. Estamos mirando hacia adelante. Vamos a ver en seguridad qué mecanismos podemos implementar. La idea es que la comisión de seguridad defina los mejores métodos”, declaró Holguín al diario El Tiempo, de Bogotá.
Cronología de atentados en Bogotá
El atentado de ayer se suma a la elevada cifra de acciones terroristas en Bogotá. El 30 de enero de 2002 Caracol Radio sufrió otro ataque con coche bomba, en el que su antigua sede de TV, en el barrio de La Soledad, sufrió cuantiosos daños aunque sin víctimas. La acción fue atribuida a las FARC, aunque el grupo no lo reivindicó. El último atentado, de autoría desconocida, fue el 24 de marzo pasado, con 9 muertos y 59 heridos en Buenaventura. El procedimiento de coche bomba se usó por primera vez en 1985 por narcotraficantes opuestos a las extradiciones a EU, al estallar un vehículo ante la embajada estadunidense en Bogotá.
6 de diciembre de 1989: Un camión bomba deja 63 muertos y 600 heridos junto al edificio del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS, inteligencia estatal). El narcotráfico reivindicó el atentado, uno de los más sangrientos de la historia.
1993: 6 atentados terroristas reivindicados por el narco, con 42 muertos y más de cien heridos.
22 de octubre de 2002: En Bogotá, una explosión no reivindicada deja 3 muertos y 11 heridos en un estacionamiento junto a la sede de la Policía Metropolitana.
9 de diciembre de 2002: Estalla un coche bomba cerca de un cuartel de la Policía en Bogotá con saldo de 69 heridos. Se desconoce la autoría.
7 de febrero de 2003: 36 muertos y más de 200 heridos deja un coche bomba contra el selecto club social El Nogal, en Bogotá, atribuido a las FARC aunque no fue revindicado por el grupo.
9 de agosto de 2003: 1 muerto y 1 herido deja un coche bomba activado por desconocidos en una carretera próxima a Bogotá.
8 de octubre de 2003: 6 muertos y 12 heridos deja un coche bomba frente a un centro comercial de Bogotá. Las autoridades acusan a las FARC, que no reivindica el hecho.
22 octubre de 2003: 15 personas heridas deja un coche bomba en el barrio de Restrepo, al sur de Bogotá, cuya autoría se desconoce.
31 de julio de 2006: 1 civil muerto y 15 soldados heridos por un coche bomba en Bogotá, atribuido por la policía a las FARC.
19 de octubre de 2006: 2 muertos y 5 heridos por coche bomba en la Universidad Militar de Bogotá, en una de las principales zonas de destacamentos castrenses. El presidente Álvaro Uribe acusa a las FARC.
Bogotá/Nayeli Roldán/Agencias, Milenio, 13 de agosto.
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