El Relator Especial de la ONU sobre la Libertad de Expresión, Frank La Rue, visitó, fuera de su programa oficial, a Raúl Hernández Abundio, dirigente de la Organización del Pueblo Indígena Me'phaa (OPIM) que se encuentra preso en Ayutla de los Libres, Guerrero, desde abril de 2008.
De acuerdo con un comunicado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, La Rue consideró el encarcelamiento de Hernández como una "gran injusticia". El indígena, declarado preso de conciencia por Amnistía Internacional, fue acusado de homicidio y recibirá sentencia el viernes.
La Rue escuchó su testimonio sobre las circunstancias de su detención, que atribuyó al trabajo que realizaba en la OPIM.
"Le doy especial importancia a libertad de expresión de los pueblos indígenas, porque tienen el derecho legítimo de organizarse y a alzar su voz", indicó el funcionario de la ONU.
El Relator también se entrevistó brevemente con la presidenta de la OPIM, Obtilia Eugenio Manuel, quien le explicó el trabajo que realiza la organización y le relató las amenazas y hostigamientos que enfrentan desde 2003.
Más tarde, La Rue visitó la oficina del Centro Tlachinollan en Ayutla de los Libres, misma que permanece cerrada desde marzo del 2009, a raíz de las agresiones y amenazas que recibió el equipo que laboraba ahí.
El funcionario de Naciones Unidas se entrevistó finalmente Guadalupe Castro Morales, viuda de Raúl Lucas Lucía, quien fuera presidente de la Organización para el Futuro del Pueblo Mixteco (OFPM) y que fue desaparecido, torturado y ejecutado extrajudicialmente en febrero de 2009, junto con el secretario de esa organización Manuel Ponce Rosas.
"Consideramos que la visita del Relator es fundamental para fortalecer el derecho a la libertad de expresión que se ha visto conculcado a los luchadores sociales en Guerrero", indicó el Centro Tlachinollan.
De acuerdo con un comunicado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, La Rue consideró el encarcelamiento de Hernández como una "gran injusticia". El indígena, declarado preso de conciencia por Amnistía Internacional, fue acusado de homicidio y recibirá sentencia el viernes.
La Rue escuchó su testimonio sobre las circunstancias de su detención, que atribuyó al trabajo que realizaba en la OPIM.
"Le doy especial importancia a libertad de expresión de los pueblos indígenas, porque tienen el derecho legítimo de organizarse y a alzar su voz", indicó el funcionario de la ONU.
El Relator también se entrevistó brevemente con la presidenta de la OPIM, Obtilia Eugenio Manuel, quien le explicó el trabajo que realiza la organización y le relató las amenazas y hostigamientos que enfrentan desde 2003.
Más tarde, La Rue visitó la oficina del Centro Tlachinollan en Ayutla de los Libres, misma que permanece cerrada desde marzo del 2009, a raíz de las agresiones y amenazas que recibió el equipo que laboraba ahí.
El funcionario de Naciones Unidas se entrevistó finalmente Guadalupe Castro Morales, viuda de Raúl Lucas Lucía, quien fuera presidente de la Organización para el Futuro del Pueblo Mixteco (OFPM) y que fue desaparecido, torturado y ejecutado extrajudicialmente en febrero de 2009, junto con el secretario de esa organización Manuel Ponce Rosas.
"Consideramos que la visita del Relator es fundamental para fortalecer el derecho a la libertad de expresión que se ha visto conculcado a los luchadores sociales en Guerrero", indicó el Centro Tlachinollan.
Reforma, 22 de agosto.
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