LA HABANA/MADRID (EFE).— Las disidentes Damas de Blanco manifestaron ayer su “preocupación” y desacuerdo con la posibilidad de licencias extra-penales para los presos políticos que no aceptan la condición de irse de Cuba para salir de prisión y pidieron libertad plena para ellos.
“No estamos de acuerdo, muchos de ellos (los presos políticos) no están de acuerdo”, declaró ayer a corresponsales Laura Pollán, portavoz de este grupo femenino integrado por familiares de opositores encarcelados, al fin de la marcha que habitualmente realizan estas mujeres a la salida de misa en una iglesia de La Habana.
La licencia extra-penal “significa que seguiremos con la misma cadena de hace siete años, lo único que (a los encarcelados) los van a mover de la prisión para su casa, pero siguen presos, no lo podemos permitir”, dijo Pollán, en alusión a que la condena sigue en vigor con esa figura.
Insistió en que esa opción, otorgada en los últimos años a algunos opositores por salud, no supone “libertad plena” y sólo constituye “un cambio de medida: van para sus casas porque no pueden continuar en la prisión, pero continúan abiertas sus causas”.
Pollán recordó que incluso las Damas de Blanco están luchando para que los disidentes que quedaron excarcelados con ese tipo de licencia, porque estaban enfermos, puedan obtener permisos para salir del país. Según las Damas de Blanco, al menos 12 presos que aún están en prisión no aceptan la condición de abandonar Cuba para salir de prisión.
Desde julio, 36 prisioneros de conciencia cubanos han salido de la cárcel y han sido trasladados a España, lo que la disidencia y muchos presos consideran deportaciones. Quedan en prisión 16 de los 52 presos que el gobierno de Raúl Castro se ha comprometido a excarcelar, fruto de la negociación con la Iglesia católica de la isla, apoyada por España.
Quieren irse de España a EU
Un total de 21 presos políticos cubanos acogidos en España desde el pasado mes de julio han comunicado a la embajada de Estados Unidos su deseo de ir a vivir a este país por motivos de reunificación familiar, informaron ayer a EFE.
Los que han solicitado trasladarse a EU alegan causas familiares, puesto que todos tienen allegados en este país, en su mayoría en Florida.
“Hace seis años que no veo a mi hijo, que está en Miami. Si no fuera por él, me quedaría en España, donde disfrutamos de la democracia”, dijo las Giraldo, encarcelado, como los otros disidentes, en 2003, tras ser acusado de conspirar con EU contra la revolución.
“No estamos de acuerdo, muchos de ellos (los presos políticos) no están de acuerdo”, declaró ayer a corresponsales Laura Pollán, portavoz de este grupo femenino integrado por familiares de opositores encarcelados, al fin de la marcha que habitualmente realizan estas mujeres a la salida de misa en una iglesia de La Habana.
La licencia extra-penal “significa que seguiremos con la misma cadena de hace siete años, lo único que (a los encarcelados) los van a mover de la prisión para su casa, pero siguen presos, no lo podemos permitir”, dijo Pollán, en alusión a que la condena sigue en vigor con esa figura.
Insistió en que esa opción, otorgada en los últimos años a algunos opositores por salud, no supone “libertad plena” y sólo constituye “un cambio de medida: van para sus casas porque no pueden continuar en la prisión, pero continúan abiertas sus causas”.
Pollán recordó que incluso las Damas de Blanco están luchando para que los disidentes que quedaron excarcelados con ese tipo de licencia, porque estaban enfermos, puedan obtener permisos para salir del país. Según las Damas de Blanco, al menos 12 presos que aún están en prisión no aceptan la condición de abandonar Cuba para salir de prisión.
Desde julio, 36 prisioneros de conciencia cubanos han salido de la cárcel y han sido trasladados a España, lo que la disidencia y muchos presos consideran deportaciones. Quedan en prisión 16 de los 52 presos que el gobierno de Raúl Castro se ha comprometido a excarcelar, fruto de la negociación con la Iglesia católica de la isla, apoyada por España.
Quieren irse de España a EU
Un total de 21 presos políticos cubanos acogidos en España desde el pasado mes de julio han comunicado a la embajada de Estados Unidos su deseo de ir a vivir a este país por motivos de reunificación familiar, informaron ayer a EFE.
Los que han solicitado trasladarse a EU alegan causas familiares, puesto que todos tienen allegados en este país, en su mayoría en Florida.
“Hace seis años que no veo a mi hijo, que está en Miami. Si no fuera por él, me quedaría en España, donde disfrutamos de la democracia”, dijo las Giraldo, encarcelado, como los otros disidentes, en 2003, tras ser acusado de conspirar con EU contra la revolución.
El Universal, 27 de septiembre.
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